M.A.I-Ona batlle

Capítulo 19

—Creo que no la has subido a mejores amigos...

¿Que cojones íbamos a hacer ahora?

Si, habíamos confirmado nuestra relación hace un tiempo pero no queríamos publicar abiertamente todo lo que hacíamos.

Si hubiera sido otra foto, por ejemplo alguna que lleváramos ropa, no habría pasado nada, pero en esa foto se notaba mucho lo que habíamos hecho una horas antes.

En la historia se podia ver perfectamente como ambas teníamos bastantes chupetones por nuestros cuellos y también que estábamos desnudas, solamente con la sábana tapándonos.

—¿La borro?—dijo Ona sin saber muy bien que hacer.

—¡No!—dijo Aitana —. Así generareis más polémica y os seguirán aún más.

—¿Y que mierda hacemos? ¿Dejo ahí la publicación y que todo el mundo sepa lo que hacemos Isa y yo por las noches?—habló mi chica estresada.

Al ver su reacción llamé su atención.

—Ona, mírame—murmuré. Ella me hizo caso y giró su cabeza para mirarme fijamente a los ojos, buscando refugio en mi mirada—. ¿Tranquila, si? Vamos a encontrar una solución.

Asintió soltando un suspiro y volvió a mirar a las demás chicas que contemplaban la escena con una sonrisa tierna.

—Cata, aparca en cualquier sitio para que tomemos aire y podamos pensar mejor—pedí.

—Marchando.

En la primera gasolinera que vio aparcó, así aprovechábamos también para poner gasolina al minibús.

Estuvimos unos 5 minutos ahí fuera, cada una con su tema.

Ona y yo, las más afectadas, estábamos apartadas de todas. Nos encontrábamos abrazadas y en silencio, demostrándonos que estábamos la una para la otra siempre, en los momentos buenos y en los malos.

Por otra parte, estaban Mapi e Ingrid, las cuales intentaban animar a las demás mientras pensaban como arreglar el marrón en el que nos habíamos metido.

Cuando volvimos a subir al minibús, de golpe se me iluminó la mente, teniendo una idea que no sabía si funcionaría pero era mejor que algunas que había propuesto Jana.

—Chicas—todas las presentes en el vehículo dirigieron su mirada a mi—. Creo que tengo una idea.

Algunas suspiraron de alivio y otras esperaron ansiosas a que volviera a hablar.

—Podríamos borrar la historia y como que yo suelo subir muchos vídeos para mis seguidores, podría subir un vídeo contanto lo que ha pasado—propuse.

Todas se miraron entre ellas y luego asintieron.

Era el plan más lógico que podíamos usar.

—Eres la mejor, mi amor—murmuró Ona mientras me cogía por las mejillas y me besaba.

Yo le seguí el beso hasta que nos separamos por falta de aire.

—¿Sabes que tu vas a salir también, no?—le pregunté obvia a mi chica.

Entonces ella me miró aterrorizada y negó con la cabeza.