Detrás de la Maldición - HuaLian

CAPÍTULO 30

Actualización 1/2

los ojos de los jóvenes se abrieron, todo su mundo se detuvo y lo único que escuchaban eran los lamentos de alguien, lo que los tenía fuera de sí era la sensación de sangre fresca en su boca

sus cuerpos empezaron a hormiguear por la nueva vida que recorría por sus venas, la energía y la fuerza que le entregaba esa sangre divina era tan poderosa como el dios de los vampiros, sus ojos se abrían cada vez más grandes cuando sus corazones empezaron a unirse.

El lazo que lo unían al humano se formó, era tan delicado y al mismo tiempo tan fuerte, su salvador era un humano y le debían la vida, ninguno rechazo ese lazo que se formó de forma involuntaria de ambas partes.

Pero el deseo al darles sangre para vivirlos era tan fuerte como su propia existencia.

Xie Lian estaba a punto de irse cuando las manos de esos jóvenes lo agarraron de sorpresa, el respingo que dio no hizo nada para detener su susto, el miedo al ver esas dos personas de pie casi le hace gritar.

- Su alteza no has salvado - dijeron al mismo tiempo los jóvenes

- ...

- nuestro lazo será eterno hasta que ya no existas en este mundo

- solo tú tienes poder contra nosotros.

- nuestra lealtad es para contigo - se arrodillaron con piedad

- esto...

- somos sus sirvientes.

- Nos salvaste la vida y por ello nuestra vida te pertenece

- alteza - llamaron, un escalofrío recorrió su columna al escuchar esa palabra

Xie Lian se sonrojó por lo sumisos que eran los niños, agarrando sus brazos de manera delicada para no dañarlos, él los levanta, no está acostumbrado a ser reverenciado.

- No es necesario que me den su vida, solo porque los salve, yo

- su alteza corre peligro

- el palacio de Hua Chengzhu te matará

- Tranquilos - se apresuró a decir - estoy bien y aunque quiera irme no puedo tengo un contrato con él.

- ¡Su alteza! - exclamaron, su intranquilidad lo altero, pero se tranquilizó, él sabía perfectamente su situación.

- No se preocupen, ustedes estarán bien, no importa que siempre los protegeré

la seguridad en sus palabras lleno de una calidez en los fríos corazones de esos jóvenes, sabían que era inútil persuadir a su salvador, era un inútil y un tonto por quedarse en la mansión, pero no lo dirían, ellos solo procurarían protegerlo de Hua Chengzhu.

Bien, no sé cómo llamarlos, ¿así que pueden decirme sus nombres? - ambos chicos se miraron.

- Ban Yue

- Pei Su

- ¡qué lindos! ¡Son unos hermanos encantadores! - sonrió Xie Lian

- no somos hermanos - dijo Pei Su

- ¿no? Entonces

- ¡somos amantes! - soltó Ban Yue

- ...

Xie Lian casi se desmaya, ¿amantes? ¿Cómo es posible? Eran tan pequeños...

Xie Lian siguió conversando con los "amantes" y descubrieron que estos podían caminar en el sol gracias a su lazo divino, aunque no querían que lo ayudaran para hacer las cosas de la casa, los chicos insistieron en ayudarlo.

Por otra parte, en el momento en que Xie Lian había salvado los cuerpos de Ban Yue y de Pei Su, el cuerpo de Hua Cheng se estremeció del enojo, no podía gritar ni moverse al estar en un estado vegetal a causa del día. Pero él sabía perfectamente que por culpa de Xie Lian esos mocosos están vivos y que si no los mataba esa misma noche, sus planes serían perjudicados.

Esos híbridos que nacieron de los demonios y dioses eran ta problemáticos para los vampiros, que ambas razas pelean para dominar al otro.

Por primera vez la mansión ya no se sentía fría, el calor de la chimenea era tan reconfortante para su cuerpo que le dio la energía para seguir ordenando.

Xie Lian llego al segundo piso, los niños que se encontraban durmiendo luego de comer su comida, el segundo piso de igual manera era oscuro y tal como en el primer piso, él abrió las ventanas y limpio las diferentes habitaciones que había en el lugar.

La extravagancia era deslumbrante para sus ojos, la tarde paso volando cuando llego a una habitación oscura.

La decoración era tan majestuosa que las cosas de la mansión quedaban, eran simples y vulgares.

Las paredes oscuras atraían un ambiente tenebroso, pero al tener cortinas rojas daba una sensación más pasional y sensual, incluso la cama se veía cómoda para dormir y hacer ciertas cosas como comer, ver películas y...

Xie Lian elimino ese pensamiento vergonzoso, sabía que Hua Cheng nunca le permitiría dormir con él en esa habitación.

Al final Xie Lian siguió admirando la decoración, las cosas plateadas, los adornos plateados eran tan llamativos que Xie Lian no pudo evitar extender su mano a una cadena delgada con una mariposa.

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volvi para luego desaparecer como Hua Cheng xd