WINGS ➳ j.b

➳011

Once

Cuando vi salir disparado el taxi donde se encontraba Soph, agarre mi pelo con frustración, y patee un poste que se encontraba ahí, dándome un dolor terrible en el pie.

Vi como el taxi desaparecía del mi vista y entre a la empresa con las manos en los bolsillos, cada uno de mis empleados me miraba con cara de "¿y a éste que le pasa?".

No es que llegara todos los días feliz, solo que jamás me paseaba por los demás pisos a esta hora, solo salía a las dos —hora de colación— y cuando salía del trabajo —a eso de las siete—.

Cuando me dieron las dos de la tarde, corrí fuera de la oficina a buscar mi auto, debía pasar a buscar los trajes de Kate, que serían para una cena que tenía la empresa en tres días, pase por ellos, era un vestido rojo con un escote pronunciado y un corte hasta un poco más arriba de la mitad del muslo, ella se vería preciosa.

Debo admitir que la forma en la que conocí a Kate fue bastante idiota y extraña, bueno no tanto, me pase de copas en la primera fiesta que hacia la empresa y termine tirándomela en el estacionamiento, nada romántico, tampoco quería que lo fuera.

Kate era una persona realmente agradable, pero era egocéntrica y envidiosa, eran sus únicos defectos, ella era realmente linda, cuando desperté en el auto me quede embobado viéndola, estaba solo tapada con mi chaqueta en el asiento trasero, ella despertó y se rio, fue como que si estuviera acostumbrada a eso, ah se me olvidaba, no se tiene respeto a hacia ella misma, antes de mí se acostaba con cualquiera, no me extrañaría que me hubiera engañado unas cuantas veces, pero tampoco me ponía celoso o me enojaba, porque no la amaba, quizá la quería pero solo un poco.

Mi tipo de chica era completamente diferente a Kate, por eso no la soporto mucho, porque la idea de que yo estoy aquí con ella y que Sophie este con otro rehaciendo su vida, me rompe el jodido corazón.

Era completamente diferente a mi Sophie, ella era respetuosa con todos, yo fui su primera vez, de lo que me encuentro realmente orgulloso, recuerdo que al otro día ni siquiera quería mirarme a la cara, me miraba y se sonrojaba, era realmente tierna.

No me di cuenta que el semáforo estaba en verde y unos cuantos vehículos me tocaban la bocina y yo iba con una sonrisa idiota en la cara, baje la mirada y seguí sonriendo.

Llegue a la casa y Kate estaba en el sofá viendo algo de "mentirosas pequeñas" o una mierda así.

—Kate te he traído el vestido, hoy saldré, y volveré tarde. —mi tono de voz era lo bastante relajado.

— ¿Dónde iras? ¿Con quién iras? ¿Puedo ir? ¿Por...

— ¡Joder cállate!, basta con las preguntas, saldré, solo eso te diré. —la rete con la mirada— Llegaron las invitaciones, ahí están.

Las tire sin cuidado alguno al sofá donde ella estaba sentada. Le puso pausa a la serie y me miro queriendo intimidarme.

—Recuerda que estas en mi casa, estúpido.

Me acerque enojado hasta quedar a unos centímetro de ella, Kate estaba sin tacones, por lo que era justo de mi porte.

—Esta es más mi casa que tuya, no porque le pagues a alguien que haga tus mierdas serás la dueña de mi casa, si quiera te echo y te pongo de patitas en la calle. —le di una sonrisa retorcida.

Estaba enojada, tomo su bolso, puso sus tacones y paso por mi lado, minutos después sentí su auto largarse.

Le di la tarde libre a la ama de llaves, y le dije a Kira, mi secretaria que no iría en la tarde, hoy no tenía nada que hacer, por lo que me tire a dormir.