sus pequeños pero increibles detalles

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Después de esa noche que nos reímos tanto de esos tipos, los demás días fueron especialmente lindos. Sobretodo porque ella hacia que mi estancia valiera la pena.

Solía ser muy atenta conmigo, una noche de tantas que se quedo conmigo en el hotel en el que me hospedaba; después de salir de su trabajo fue a buscar a su hija y luego se fue al hotel, me dijo que había olvidado comprar algo para que tomara la niña así que me la dejo encargada un rato, para mi mala suerte me toco una incomoda situación con la pequeña, ya que como todo bebé se hizo en su pañal, por un momento no supe que hacer, pues ya habian pasado años desde la ultima vez que le cambie el pañal a una niña tan pequeña, por un momento había olvidado como hacerlo así que me pasó por la mente dejar a la niña así hasta que su mamá llegara a cambiarla, pero como la nena lloraba mucho, no quise dejarla así de incomoda, así que como pude la limpie y cambie su pañal, por un momento me emocioné y prácticamente le dije...

Yo: si tu mamá quisiera y no tuviéramos prácticamente el mundo en contra, yo podría cambiarte los pañales día, tarde y noche... Te cuidaría a ti y a tu mami, las amaría muchísimo mas al estar juntas.

No se porque pero ese momento que estuvimos solas la nena y yo era como si me entendiera porque se reía conmigo.

Luego de unos minutos tocaron a la puerta, a lo cual pregunté quien era, y me respondieron que abriera que la ayudará, reconocí de inmediato la voz y me asuste cuando dijo que la ayudará pensé que algo malo le había pasado.

Cuando abrí la puerta me lleve tremenda sorpresa, estaba ella parada en la puerta con un hermoso arreglo de rosas y un peluche, me quede sin palabras pero muy emocionada. Ella solo me dijo son para ti. De inmediato las tome y las puse en una repisa frente a la cama.

Ella se recostó en la cama con la niña y yo seguía en shock de la emoción, solo me quedaba parada frente al arreglo contemplando y sintiendo el aroma de esas hermosas rosas, luego me alejaba y abrazaba el peluche que me había regalado.
Sentía su mirada sobre mi, pero por varios minutos no la volteaba a ver pues yo seguía emocionada con ese detalle tan lindo de su parte.
Después de un rato me recoste con ella y le dije.

Yo: gracias, es un detalle muy lindo de tu parte.
Antonia: de nada, te mereces eso y mas.
Yo: me emocioné mucho cuando te Vi con el arreglo, pero me emociona mas la idea de que hayas sido la primer persona que me regala flores, ahora puedo decir que empiezan a gustarme... Bueno siempre y cuando seas tu quien me las regale.

Ella me abrazo regalandome una linda sonrisa y nos dispusimos a dormir, fue una linda noche.
Al día siguiente se levantó súper temprano pues tenia que llevar a su hija a casa de su mamá y después se iría al trabajo, por lo que me había pedido que si porque no me quedaba a dormir en casa de su mamá los últimos días que me quedaban de estancia, a lo que le dije que si.

Durante el día fui a ver a mi cuñada y le pedí que si dejaba que mi sobrina me acompañara al hotel para que me ayudara con unas cosas, a lo que ella accedió.

Al volver a casa de la mamá de mi cuñada todos se me quedaron viendo cuando llegue con el arreglo de flores y me empezaron a cuestionar, que si quien me las había dado, y cosas asi; a lo que les conté como habían sido las cosas y todo con lujo de detalle.

Dos horas antes de que Antonia saliera de su trabajo me comencé a arreglar para ir a buscarla.
Cuando la Vi la abrace y le di un beso y comenzamos a caminar de vuelta a su casa.

Al día siguiente como le tocaba descanso, me dijo que la acompañara a ver a una de sus amigas pues tenia que recoger un pedido, la acompañe pero nunca me dijo a casa de que amiga, hasta que llegamos a la casa de la dichosa amiga recordé quien era, nunca la había visto físicamente pero sabia quien era pues Antonia me había contado ciertas cosas, como que cuando no andábamos ella le recordaba mucho a mi, que por el mismo motivo anduvo un tiempo con ella pero no porque la quisiera sino por que solo ella le recordaba a mi, y lo que mas me hizo recordarla es porque Antonia me había dicho que esa chava siempre había querido andar con ella y hasta la fecha así sigue siendo.
Antonia me la presento y me dio la mano a lo cual correspondi el saludo aunque no de muy buena gana.
Nos fuimos de ahí pero en el camino yo iba muy callada a lo que Antonia se dio cuenta y para animarme Vi que se detuvo en un local a comprar algo, yo andaba tan distraída que no me fije que vendían en el local, solo espere un poco mas adelante a que saliera Antonia... Cuando la Vi salir solo Sonreí, se acerco a mi y me dijo:

Antonia: son para ti, quita esa mala cara, ella es solo una buena amiga y de ahí no pasará no te preocupes... Yo te amo a ti.

Sonreí de nuevo y tome las rosas que me había comprado en el local, ella me tomo de la mano y seguimos caminando hasta llegar a su casa, obviamente las rosas no me iban a durar para toda la vida, pero era un detalle que quería conservar así que espere algunos días hasta que se secara la flor y la guarde en un cuaderno en el cual le escribía cosas a Antonia.

Esas maravillosas vacaciones aunque quisiera no iban a durar por siempre, mi cuñada, mi sobrina y yo teniamos que volver.
No quería dejar de ver tanto tiempo a mi amada Antonia y ella tampoco a mi, por lo cual me prometió visitarme cada fin de semana.

UNA VIDA, UN AMOR (lesbianas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora