UNA VIDA, UN AMOR (lesbianas)

la noche que conoció a mi peor pesadilla

Aquellos días realmente fueron muy dichosos, al volver del viaje, pasamos a visitar a su tía y nos quedamos una semana más ahí. Me gustaba estar ahí, no teníamos que ocultar lo nuestro de nadie, eramos libres frente a su familia, y no hay nada mejor como el sentirse aceptado.
Ese agosto fue un mes que siempre voy a recordar, demasiada felicidad para ser verdad, me satisface la idea de que realmente disfruté esos días, sin saber lo que venía. Nada dura para siempre, y como era de esperarse, a nosotras se nos daban los momentos de felicidad, pero con ello también venían malos momentos, aunque a estas alturas me doy cuenta que tan solo eran pruebas. Como no lo pude ver de esa manera.

Después de esas dos hermosas semanas con ella, cada quien tomó rumbos diferentes, otra vez, teníamos que volver a la realidad.
La próxima vez que la vería, sería en diciembre, y aún faltaba mucho. Afortunadamente el tiempo se fue casi volando, quería pasar navidad con ella, así que decidí irme una semana antes.
Cuando estuve allá, le sugerí que si íbamos a un antro, que invitara a su hermana Erika y a su novio, y a mi cuñada Damaris.
Esa noche todo iba muy bien, salíamos de un antro y nos íbamos a otro, hasta que decidimos ir a un antro gay, pedimos botellas de whisky, estábamos esperando el show de la noche; y ahí estaba, la bailarina empezando su show, nosotros de un lado admirando a la chica, y del otro lado una mesa con puras chicas que no tenía mas de 19 años y una que otra un poco mas grande. Ojalá hubiese sabido lo que venía, quizás muchos malos momentos me hubiese evitado, si tan solo lo hubiese notado esa noche.

Después de que terminó su show la bailarina, nos pusimos a bailar, hubo un momento en el que estaba bailando con ella, después mi amigo, el novio de Erika se acercó con Damaris y me dijo que si bailaba con el y mi cuñada con Antonia.
Después de varios minutos vi que una chica de aquella mesa se les acercó y le pidió a Antonia bailar, yo me hice la tonta pensando que la rechazaría pero al contrario, ella aceptó y además enviaron a otra chica para bailara conmigo. Acepté bailar con la chica y mi amigo se sentó, pensé que si Antonia me veía con otra chica le darían celos, pero estaba tan entretenida la platica que no se fijo con quien estaba, me dio tanto coraje eso, y me le quede viendo hasta que me miró y notó mi enojo, vi que se despidió de la chica y yo hice lo mismo con la chica con la que Bailé.
Me fui en dirección al baño y minutos después tocaron mi puerta, tarde en abrir y al salir vi a Antonia platicando con la chica y me molestó aun más, la miré y ella me dijo

Antonia: voy al baño entra conmigo.

Me negué y le clavé la mirada a la otra chica y se fue, entonces entré a baño con Antonia, hizo lo suyo, iba a abrir la puerta cuando me abrazó por la espalda y me dijo

Antonia: me excita verte enojada sabias?... Estamos aquí solas quiero hacerlo aquí contigo.
Yo: pueden tocar e interrumpir, además estoy molesta contigo, bailaste con otra y prácticamente te dio el beso en la boca.
Antonia: ella no me interesa, ninguna me interesa, sabes perfectamente que si me considero bisexual es porque solo me gustaste tú y me enamoré.

Entonces la besé, me encanta cuando ella es tan apasionada, esa combinación de adrenalina y ganas de hacerla mía ahí mismo era tan excitante, me hubiese encantado terminar ahí lo que empecé, pero era de esperarse que tocarían la puerta para ocupar el baño.
Salimos juntas y nos fuimos a sentar, en ese momento sus hermanas nos empezaron a burlar que si porque tardábamos tanto y nosotras solo nos reíamos, luego de un rato Erika me habló y me dijo que una chava se le había acercado para pedirle el número de mi novia, pero no se lo dio, le pregunté que si quien era la susodicha y me señaló a una chava que no era ninguna de las que estaban en la mesa de enfrente.

Esa noche comenzó lo que yo no sabía, se convertiría en una pesadilla con el paso de los meses. Hasta la fecha pienso que si pudiera evitar aquella noche seguramente lo haría.

Fue una noche larga y dentro de lo que cabe divertida, mi cuñada se emborrachó, y le hacíamos maldad eso fue divertido.
Pasaron los días hasta la noche del 24 de diciembre, pensé que ella estaría conmigo, pero mi sorpresa fue grande cuando la vi con un hermoso vestido que la hacia lucir como una diosa, y justo de tras de ella venía una chica de unos 16 años, en cuanto la vi,  supe que no estaría conmigo esa noche.

Antonia: no voy a quedarme, tengo que volver a mi casa, solo vine a felicitar a mi mamá. Por eso él mandó a su hermana a que me acompañara, para que no me quedara.

Yo solo le dije que estaba bien, que disfrutara la noche, aunque por dentro estaba tan enojada, pero sabia que no era su culpa...

Esa noche mi cuñada, Erika y yo nos fuimos a casa de su novio, osvaldo. Ahí cenamos y tomamos unas cervezas, después nos fuimos a casa de su vecina donde estaba muy bueno el ambiente, yo seguía molesta aún, así que tomé cada vez más pero no me lograba sentir mareada, creo que era por estar bailando también. Después como a las 4am íbamos a llevar a mi cuñada a su casa, cuando íbamos llegando sus vecinos la hablaron y nos metimos todos y seguimos bebiendo hasta que como a las 6 am, osvaldo dijo que llevaría a Erika a dormir porque estaba muy borracha, y era chistoso verla así, se reía de todo.
Damaris y yo nos quedamos hasta las 8, y fuimos a casa de una de sus amigas que vive cerca de donde estábamos, cuando llegamos apenas se estaban levantando, y el marido de su amiga nos dijo que lo acompañáramos con una botella de vodka, esa fue mi perdición, estuve una hora más hasta que me dio sueño, y decidí irme a casa de osvaldo, pues ahí me quedaba a dormir.
En cuanto llegué, toque cama y me quedé dormida, como a las 12pm escuché ruido y me desperté, vi que osvaldo iba a llevar a Erika a su casa, así que se me ocurrió la brillante idea de decirles que si veían a Antonia le dijeran que ya me había ido.
Yo seguí durmiendo hasta como a las 4 y me metí a dar un baño, cuando a la medía hora, llegaron osvaldo y Erika, los saludé y me dijeron que cuando Antonia preguntó por mi, ellos le dieron mi msj, y que se había emborrachado porque pensó que había sido cierto, yo me reí y no les creí, y me dijeron que era cierto y que Antonia estaba en el baño, inmediatamente salí a verla y la vi.

Era la primera vez que la veía así de tomada, y se veía tan tierna, aunque me sentía mal de que se pusiera así por mi culpa.

Ella me vio y me abrazó y me dijo

Antonia: no te fuiste!!! Perdoname por no quedarme a noche, sabes que te amo y quería estar contigo.
Yo: lo sé, tranquila. Pero porque tomaste tanto. Jamás te había visto tan borracha.
Antonia: es que pensé que te habías ido por mi culpa, y mis tíos me hablaron para acompañarlos a comer y empecé a tomar pero solo y me emborraché.
No quiero que te vayas.
Yo:no me iré, pero quiero que duermas un poco, para que se te baje, no puedes llegar así a tu casa.
Antonia: esta bien pero solo si te acuestas conmigo y me abrazas.
Yo: no tienes que pedirlo, cuando despiertes, ahí estaré a tu lado.

Durmió 3 horas y como prometí estuve cuando despertó, para después irse.