Capítulo 35

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El agua de la cascada cae violentamente al cuerpo de la albina, su torso desnudo era mojado por el frio chorro de agua mientras que la otra mitad del cuerpo estaba sumergida en el lago, su cabello largo y mojado se apega a su piel, dos largos mechones cubrían sus senos.

Algo entre sus ropas comienza a brillar, _____se acerca buscando entre sus ropas, encontró el collar de libélula que le perteneció a su hermana, la plata brillaba debido al resplandor de la luna llena. Lo contemplo por unos minutos y suspiro resignada.

Creo que es momento de dejarte ir...-cubrió la libélula de plata con ambas manos, cerró los ojos por unos segundos, suelta el collar dejando en unos bolsillos y abre los ojos.

Se sienta en el borde del lago manteniendo sus piernas en el agua, su desnudes es cubierta por su cabello su mirada se posa en el reflejo de la luna en el agua cristalina, las ondas del agua no permitía que la imagen de la luna permanezca intacta.

Veo que espiar es uno de tus pasatiempos...-el agua refleja la figura de Sesshomaru, la albina se cubre con su Haori.

Hm...-la chica ríe ante la inmutable actitud de Sesshomaru.

¿Hace cuánto estas espiando?...-la chica permanecía sentada en el borde, su mano izquierda era el agarre del haori.

¿Por qué tendría que contestarte?...-el inu-yokai, frunce el ceño.

¿Entonces has visto todo?...-la chica alza una ceja, esperando a que Sesshomaru confirmara su teoría, el peli plata desvía la mirada en respuesta.

Nunca pensé que tuvieras un lado acosador...-la risa suave de la albina, hace que el corazón de Sesshomaru se estremezca.

No creas que eres la gran cosa...-la risa de la albina es silenciada por la frialdad del chico.

Inmediatamente el pecho de ____ se contrae, un sentimiento de tristeza y decepción la invade, aun así sonríe débilmente para no mostrar debilidad.

Porque eres mucho más que eso...-el aliento del peli plata hace que la chica respingara por su repentina presencia y se estremezca con aquella voz profunda. Nerviosa ____ se voltea a mirarlo, encontrándose aquellas doradas puertas del alma, que estaban más intensos que veces anteriores.

Mujer, ¿Qué me has hecho?...-la mirada del chico baja, a los finos labios de la chica. La respiración de ambos era agitada, sus corazones palpitaban descontroladamente como se quisiesen salir de sus pechos, la distancia de ambos logra alcanzar un pequeño roce en los labios.

Sesshomaru toma las mejillas de la albina, acortando la distancia y adelantando aquella unión tan esperada, ambos se fundieron en aquel inocente gesto, las manos de Sesshomaru continuaban en las mejillas de la chica, en cuanto las de ellas buscan firmeza en los bordes del Haori del Inu-Yokai.

Las piernas de la chica se encontraban fuera del agua, causando que el efecto del agua poco a poco dejara de tranquilizar los instintos de _____, Sesshomaru la toma de la nuca con su mano izquierda profundizando el beso, comienza a ejercer un poco de fuerza, dejando el cuerpo de la chica acostado en el césped, con su mano derecha Sesshomaru recarga su peso para no aplastarla.

Sesshomaru...-susurro algo jadeante, el chico vuelve a besarla con devoción, no podía contener las ganas de unir sus labios. Le era imposible tenerla cerca y no poder besarla, tan cerca pero tan vez tan lejos.

Sesshomaru estaba descansando sobre un árbol, ignorando todo a su alrededor, hasta que el inconfundible aroma de _____ lo saco de si, al verla tan sumida en sus pensamientos, ocultó su aroma entre las hojas le de los árboles, cuando la nubes dejaron al descubierto la luna llena, ella comenzó al liberarse de sus prendas.

Sesshomaru permanecía estático con una mirada indiferente, el cuerpo desnudo de la albina lo invitaba a ser tocado por sus grandes y agiles manos, un estremecimiento hizo temblar el cuerpo de Sesshomaru, la chica seguía sin ser capaz de detectarlo, se metió al lago.

Cuando el torso desnudo de la chica salió a la superficie, un gran deseo despertó en el siéndole casi imposible controlar su instinto, otro escalofrío lo estremece para concluir en la zona de su entrepierna, su respiración cada vez era más pesada, sus garras rasguñaban el tronco del árbol, evidencia del descontrol que sufría en ese momento.

Su mirada se posó en el cuerpo de la albina, sentada en la orilla del lago, no pudo más y se acercó pareciendo indiferente a la situación que vivía internamente, luego de unas sufribles palabras con la albina, que para él se le hizo eterna aquella insignificante conversación, la besa con intensidad dejándole en claro sus motivos.

El beso se rompe por la falta de aire por parte de ambos, el corazón de ambos martilleaba en busca de más contacto, el chico le dio una mirada intensa, llena de deseo.

Esto hizo que la albina mordiera los labios del peli plata, secándole un ronco gruñido, Sesshomaru se separa un poco para mirarla un tanto desesperado, la chica sonríe pícaramente algo poco común en ella, sus instintos sexuales comenzaban aflorar.

La luna llena no tenía intención de ser cubierta por las nubes, esto despertaba el deseo en el interior de la albina, quien para ella era algo natural pero para Sesshomaru era algo nuevo de ver en la chica. Nunca había visto esa faceta seductora y deseosa en la albina.

La ropa comenzó a estorbar a ambos, el deseo que desprendían los llevaban al punto de la desesperación, sus instintos animales se dejaron fluir en una ambiente oscuro y caluroso. Sesshomaru, exploraba cada centímetro de su cuerpo, dejando marcas en el camino al igual que algunas heridas que fueron hechas por la excitación y el salvajismo de su bestia interna.

_____ gozaba de las caricias que le brindaba el joven Yokai, sus uñas se incrustaban en la tersa piel de su compañero, en un momento de cordura, la chica expande una barrera en el lugar para no ser interrumpidos o escuchados por algún individuo, cuando las caricias se acaban, Sesshomaru la besa con salvajismo y desesperación llevándola al éxtasis.

El peli plata acariciaba los muslos de la chica y los apretaba, poniendo a la chica más deseosa de lo que estaba, las uñas del chico provocaron diminutas heridas, una de sus manos viajo a los pechos de esta apretándolos con brusquedad, sacándole un gemido ahogado a su compañera, repitió la acción un par de veces como distracción y guiar su otra mano a zona intima de la chica.

La albina al sentir la mano intrusa del albino en su intimidad, suelta un pequeño gruñido en advertencia, Sesshomaru le pareció algo divertido, dejo sus zona intima para envolver los pechos de la chica con sus manos, mientras la besaba se abría paso a su interior, el placer que provoco aquella primera unión, hizo que ambos se estremecieran y soltaran un sonoro gemido.

Los primeros movimientos fueron lentos y profundos, permitiendo que ambos pudieran sentirse a la perfección, las manos de la chica eran aprisionadas por las de Sesshomaru, quien estaba concentrado en las embestidas que le propinaba a su compañera para después concentrase en los ojos de ____, libera las manos de la chica y poder tomarla de la cintura, brindando estocadas rápidas y más profundas. Los rasguños, mordidas y los besos salvajes también eran parte de aquel acto de amor, un gemido y gruñido hicieron mella en la cabeza del otro, quedando grabadas con fuego en sus memorias.












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