2- La universidad

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Actualidad...

Llegaba tarde, estaba segura no me puedo ni imaginar lo enfadada que debía estar Eli al ver que no estaba llamándola por teléfono, ahora mismo. Miro la hora por segunda vez, son las 6:30, la universidad comienza a las 8:00, el primer día y seguro que llego tarde... El avión despega a las 7:00.

—¡Kayla! ¡Vas a llegar tarde!—grita mi madre desde la planta baja.

—¡Ya voy!— gritó cogiendo, la maleta, el bolso, las llaves y el móvil a la vez, le doy una última ojeada a mi habitación antes de salir por la puerta a toda prisa.

Bajo las escaleras de mi casa, como si mi vida dependiera de ello, al ver que iba a paso tortuga, me las apañe para bajar por la baranda. Como muchas de las veces hacia.

—¡Kayla! —vuelve a gritar, solo que ahora se escucha más fuerte por el simple echo de que estaba detrás suya.

—Ya mama, ya estoy aquí... —cojo dos galletas saladas y abro la puerta de casa.

—Vale, ¿ya lo tienes todo? —me pregunta por enésima vez hoy.

—Si mama, tranquila... —intento relajarla, por lo que se ve está, más nerviosa que yo.

Coge las llaves y su bolso y bajamos al local en el que se encontraba el Ford de mi madre.

Salimos del local a toda prisa solo faltaba media hora para llegar al aeropuerto y el viaje era de más o menos un cuarto de hora hasta llegar al aeropuerto.

Cada minuto que pasaba estaba más nerviosa.

Al menos la universidad no era como la ESO, y si llegaba tarde no pasaba "casi" nada, no me tendría que poner tan nerviosa pero es que lo estaba...tenía tantas preguntas en la cabeza...¿Cómo será mi compañera de habitación?¿Nos llevaremos bien?¿Como es la gente de allí?

Todas esas preguntas me daban vueltas y vueltas entre cortándome la respiración de ese modo.

Lleguemos en menos de media hora al aeropuerto, había mucha gente.

Bajo del coche, con los nervios a flor de piel.

—Te echaré de menos mama... —la abrazo.

—Y yo hija... —se le saltan las lágrimas.

—No llores, te vendré a visitar algunos fines de semana ¿vale? —le tranquilizo, mientras le froto la espalda con la mano.

—Vale cielo...pásalo bien con la gente que conozcas...y sobre todo no olvides portarte bien..—vuelve a abrir la puerta trasera para sacar mi maleta.

—Vale, lo mismo digo... —susurro a su oído mientras le doy un segundo abrazo.

—Ah, y otra cosa, hablame por el LapTop —asegura antes de volver al asiento del conductor.

—Vale, adiós que ya he llegado más qué tarde para la presentación —intento deshacerme de ella en el buen sentido, mientras me despido.

Se que si no lo hago perderé el avión, y no me haría ninguna gracia coger el de la tarde.

Entra en el auto mientras me adentro en al aeropuerto.

Mi madre desde el coche agita su mano en forma de despedida, la imito y me adentro en el edificio azul.

No me lo puedo creer, voy a montar en avión. Monté una vez pero cuando tenía tres meses. No me acuerdo de nada.

Seguí las indicaciones de los carteles que habían iluminados en las pantallas.

(...)

Él avión era muy acogedor, la gente poco a poco se fue subiendo en el. A mi lado tenia a una anciana, yo estaba pegada a la ventana. Ya que fue el sitio que me asignaron.

"Como conocí al idiota"[Editando]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora