23- La hora de la verdad (2/2)

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Miro al lado de mi cama y Rayan no está. ¿Se habrá ido otra vez?

Aparto el edredón para poder salir de la cama. Me coloco las zapatillas de estar por casa, la puerta de la habitación está entornada. Bajo las escaleras de casa y distingo a Rayan en la cocina.

Mientras me dirijo a la cocina escucho un leve estruendo, una botella de cristal por los suelos.

Corro hacia Rayan que tiene otra botella de Vodka en la mano.

Se la acerca a los labios.

Le quito la botella de las manos y este se queja.

—¡Devuelvemela! —farfulla con una voz más grave que nunca.

Niego con la cabeza, mientras me dirijo a la basura para tirarla.

Rayan me coge de la cintura y besa el lóbulo de mi oreja, haciéndome estremecer. El olor a alcohol invade mis sentidos.

—Devuelvemela... —dice esta vez mas cerca y más suave, hasta borracho me conmueve.

Me aparto.

—¡No, Rayan! —exclamo, sus ojos se abren como platos y estoy bien segura que no se esperaba esta reacción— Para de beber alcohol ¿Porque lo haces? —pregunto desconcertada.

Este baja la mirada y aprieta la mandíbula junto con sus puños.

—Por miedo... —murmura, no creía que "miedo" fuera la causa de su borrachera.

—¿Miedo? ¿A que?— digo acercándome más, levanto mi mano y le acaricio la mejilla.

—A perderte... —murmura, eso me deja en estado de shock.

Era tan tierno...

No entiendo nada.

—Me tienes aquí, contigo, no seas bobo —digo con calma— Ven aquí —lo acerco y le planto un tierno beso en los labios. Se que está borracho pero lo necesitábamos los dos.

Abro los ojos abruptamente, la luz me ciega los ojos.

Respira, respira, respira....

Maldito sueño.

Llevo ya cuatro noches seguidas teniendo el mismo sueño. Cuatro días que no veo a Rayan.

Intentaba evitar lo que pasaba en el sueño, pero no podía dejar de pensar en él.

Me seco el sudor y salgo de la cama. Como siempre, la de Nadia está vacía.

Abro el pequeño armario y saco una blusa blanca y unos tejanos largos comienza a hacer frío.

Han sido los peores días de toda mi vida. Los profesores me estuvieron poniendo dossieres para hacer de un día para otro, decían que era toda la faena que me había saltado igual que las clases. A partir de entonces no pienso perder el tiempo con Rayan algo que por ahora esta funcionando, Rayan no había asistido a ninguna de las clases en estos tres días, algo que me parece de lo más normal.

Hoy tenía que ir con mi madre, ya que teníamos que hablar lo del cumpleaños de este fin de semana. Tenía ganas de que llegase el día. Pero no sabia que decirle sobre lo de Rayan: "Mama, sabes me he reencontrado con Rayan, si aquel niño de Tarragona, y sabes que, siento algo por el que un no acabo de entender. ¿Podría venir el con su familia?". Era una total locura.

Cojo la bolsa con el material que necesito hoy y salgo de la habitación.

—¡No entiendo que te pasa! ¡Has cambiado Rayan! —escucho exclamar a ¿Caity? ¿Pero que...?

"Como conocí al idiota"[Editando]Where stories live. Discover now