25. Alucinando

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Capítulo 25

Evan

Nada ni nadie podría quitarme la sonrisa jamás que me cargo desde mi cita con Amelia.

Después del concierto, la lleve a su casa y me dejó con la promesa de que había que repetirlo. Y cumplió con su promesa, y esta última semana ha sido una de las mejores de mi vida.

Me había empeñado en ser alguien importante en la vida de la chica y tengo miedo de decir que lo he conseguido. Porque ahora ella es indispensable en la mía.

Habíamos tenido momentos profundos y otros cuantos muy simples, fuimos a un montón de lugares pero también estuvimos un montón de tiempo simplemente disfrutando de la compañía del otro. Me sorprendía lo mucho que podías conocer a una persona en tan poco tiempo, pero aun más me dejaba en shock lo mucho que habíamos conectado.

Abro la puerta de la cafetería para llevar a la pelirroja a su casa al terminar su turno. Ésta había sido nuestra rutina desde el día de la primera cita. Y no podía pedir ninguna otra cosa para ser feliz.

Ya no quiero a nadie a mi lado si no es ella.

Una sonrisa aparece de inmediato en mis labios al verla salir detrás de la cocina lista para irnos.

—Hola estrella de rock. —le doy un beso en la mejilla y tomo su mochila para dirigirnos al auto. Platicamos un poco de su día, del mío y de cosas banales, justo como usualmente lo hacemos, trayendo a la plática nuevos temas y chistes para no hacerlo monótono.

—Me encanta esto. —digo después de un pequeño silencio sin pensar mucho en mis palabras. Me mira expectante pero no dice nada, simplemente trata de ocultar una sonrisa apretando los labios.

Una vez en su apartamento, cuando tiene la puerta lista para detener mis palabras, me da un beso en la mejilla y me dice aquello que hace que mi mundo explote en fuegos artificiales nuevamente.

—A mí también me encanta estar contigo

Ni siquiera conozco tu nombre (Coffee Shop #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora