No es demasiado tarde... "Jelena"

Capitulo 29

Justin P.O.V

El dolor de cabeza me estaba matando, y ya no podía más con la sed. Los rayos de sol traspasaron las cortinas de mis ventanas, dándome justo en la cara, haciendo de esta mañana algo peor. No recordaba casi nada de la noche anterior, y mucho menos entendía cómo es que había llegado a mi habitación. Con esfuerzos me puse de pie, tomando mi celular del buro que estaba junto a mi cama. Una llamada perdida y un mensaje de la misma persona.

Ariana 9:23am

¿Crees que podamos vernos? Necesito hablar contigo.

Justin 10:58am

Seguro. Te veo en dos horas en la cafetería de siempre.

Me encamine a la regadera para tomar una larga ducha. Cuando salí me puse unos jeans, una sudadera y mis tenis. Baje a la planta baja de mi casa. Victoria estaba preparando el desayuno, pero cuando me vio dejo lo que estaba haciendo.

-"¿Sucede algo?" Vacié un poco de agua en un vaso.

-"¿En serio lo estas preguntando?" Se limpió las manos con una toalla. –"En esta casa hay reglas, y si Max tenía que respetarlas, contigo no es la excepción" Me miro enojada.

-"¿Es por lo de ayer?" Deje el vaso sobre la mesa. –"Lo siento, sé que no debí..."

-"Si, no debiste pero lo hiciste"

-"No volverá a suceder. Lo prometo" Volví a beber el agua.

-"Claro que no volverá a suceder, o estarás castigado" A veces odiaba ser el menor. -"¿Ocurrió algo importante ayer?" Hablo más tranquila.

-"No que yo recuerde... ¿Por qué?" Serví un poco más de agua.

-"Ariana se fue muy temprano, y no estaba del mejor ánimo"

-"No lose, quiere verme en media hora" Bebí del vaso. -"¿Saldrás hoy?" Victoria había sido muy constante en sus salidas los fines de semana, pero cuando le preguntaba a donde iba, siempre era la misma respuesta "Tengo que resolver algunos asuntos"

-"No, hoy solo quiero relajarme en casa"

-"¿Me prestas las llaves de tu coche?" Bebí el agua hasta el fondo. Victoria saco las llaves de su bolso para dármelas.

No desayune, quería llegar a tiempo a la cafetería, y saber qué es lo que ocurría.

Después de un trayecto no muy largo, por fin llegue al lugar. Estacione el coche al otro lado de la calle, y baje caminando a la entrada. Ariana estaba sentada junto a la mesa del ventanal. Ni siquiera se puso de pie para saludarme, y cuando intente darle un beso en los labios, giro su rostro provocando que se lo diera en la mejilla. El mesero se acercó, solo pedí una jarra de agua porque la sed no cesaba, y un poco de fruta picada. Ariana ya tenía un café que había pedido momentos antes. Pase unos diez minutos intentando sacar un tema de conversación, pero ella no estaba muy dispuesta, y sus respuestas eran muy cortantes, así que decidí ir al grano.

-"¿De qué quieres hablar?" La mire a los ojos, percibiendo que algo estaba mal.

-"Justin... ya no puedo seguir con esto"

-"¿De qué hablas?" Mi corazón comenzó a acelerarse.

-"Ya no quiero seguir con lo nuestro...".

-"Eso quiere decir que..." Me quede callado tratando de procesar todo.

-"Tenemos que terminar" Bajo la mirada.

En el tiempo que llevábamos de relación me había encariñado demasiado con Ariana, y aunque últimamente lo nuestro no funcionaba, tampoco era mi intensión abandonarla. La situación era bastante dolorosa, pero podía entender sus motivos, yo había dejado de cuidarla, y ya ni siquiera hacia lo imposible para verla. Mi corazón se contrajo al ver las lágrimas correr por sus mejillas. Dolía, dolía saber que yo era el culpable de su dolor, y tal vez el causante de esta ruptura. Mis sentimientos se habían salido de control, y no era justo para ella seguir haciéndola creer que era la única para mí, cuando ya no lo era.