o n c e

55.1K 4.6K 1.9K
                                    

30 de noviembre de 2014; cumpleaños de ChaeHyun. 

O tambien podríamos llamarlo el día de mi venganza.

Y no exactamente por lo ocurrido en la clase de la profesora Park, (que terminó sin ser tan malo) la razón era que ese mismo día cuando las clases acabaron, ella junto a todos mis amigos se organizaron para acorralarme y mojarme. 

La verdad es que hasta ese momento no había nada de malo aún porque ya es una costumbre dentro de todos los alumnos de la preparatoria y ya me esperaba algo así. Mi venganza se debe a que no utilizaron agua común, ¡me mojaron con agua de sabor, café, té y ve tú a saber que otras cosas! Cuando llegué a casa mi pelo se podía confundir fácilmente con un nido de pájaros, y ni hablar de mi uniforme.

Y bien, ¿Cual seria mi venganza? Mojaria a ChaeHyun con una simple botella de agua natural... Mezclada con diez cucharadas de azúcar.

{...}

Antes de salir de casa me aseguré de llevar la botella dentro de mi mochila porque conociéndome no sería de extrañarse que me diera cuenta de que la deje en mi casa una vez que ya llegue a la escuela y no puedo regresar por ella.

El día en la escuela transcurrió normal, SooAh esta vez fue la que informó a la profesora Park del cumpleaños de ChaeHyun y yo mantuve la botella de agua escondida en mi mochila.

—¿Te van a celebrar en tu casa? —le pregunté durante el receso.

—No creo. Les quiero pedir de regalo una visa y pasaporte.

—¿Pasaporte? —ella asintió con la cabeza.

—¿A dónde quieres viajar? 

—A muchos lados. —fingió una voz misteriosa, provocando que las dos riéramos.

El fin de clases tan ansiado llegó, y debido a que ChaeHyun era amiga de varios de los chicos del salón SooAh les pidió que la agarraran para que no se escapara. Le vacíe la botella entera en la cabeza y algunos otros después le quitaron un poco el efecto del azúcar en su pelo echándole agua pura.

—¡YangMi, no jodas! —gritó mientras se secaba y tocaba su pelo.

—¿Qué? —pregunté haciéndome la desentendida y conteniendo la risa.

—Ahora si te pasaste. —se notaba a leguas lo furiosa que estaba.

—¡Ah! —exclamé ofendida y con la furia empezando a burbujear dentro de mí— ¡Tú me mojaste con té y le dijiste a los demás que me mojaran con lo que quisieran menos agua! ¿Y yo no puedo echarte agua con azúcar?

—Ugh, cállate. —recogió sus cosas del suelo y comenzó a caminar hacia su casa.

—Ja. —mire incrédula cómo se alejaba.

—Te dije que esa enana me caía mal. —giré a ver a WooKyung quien estaba sentada en la banqueta esperándome y acababa de ver todo el espectáculo.

—Sólo está de mal humor. —la justifique mientras yo también recogía mis cosas y WooKyung se acercaba a mí.

—Aún así. —replicó ella.

Me quede callada, no tenía ánimos para tratar de convencer a WooKyung de que ChaeHyun no era mala persona. Lo único que quería hacer era llegar a casa y tirarme en la cama.

Aunque no puedo porque tengo demasiada tarea que hacer, y tambien una disculpa en la cual pensar.

{...}

Eran más o menos las 5:30 de la tarde y yo ya me encontraba en pijama acostada en mi cama viendo un dorama hasta que el timbre de la casa sonó y momentos después mi hermano ingresó a la habitación.

La Primera Vez. [En Edición]Where stories live. Discover now