42

196 21 3
                                    

POV Aiden

Nada mas entrar a mi casa me he encontrado con una carta. No sé de quién será, no sé de dónde viene ni de qué hablará. Solo sé que nunca nos llegan cartas, excepto las facturas de la luz o del agua, y menos aún cartas con unos sobres tan bien cuidados, que dan pena hasta abrir. Esta carta será de alguien rico y teniendo en cuenta eso solo se me ocurren dos personas: Brooke y la tía Molly. La tía Molly no creo que sea puesto que ella tiene un gusto un tanto peculiar y este sobre es demasiado normal para venir de ella así que solo me queda Brooke y eso no puede ser nada bueno.

Podría dedicarme a investigar, no se me da mal ¿No crees?

Ja, ja no sueñes.

Después de estar una hora mirando fijamente la carta para ver si por algún casual se desintegraba decido abrirla.

Querido Aiden,
Bueno mejor nos dejamos de formalismos que ni a nosotros nos agradas y estamos seguros de que tampoco te agradamos a ti. La cosa es que creemos que Brooke y tu no os deberíais ver. Tu pasado no es muy bueno, por no decir un espanto, y si sales con Brooke destruirás la reputación de los Jones: La hija de los Jones es novia de un delincuente, ¿Seguirá la hija de los Jones el mismo camino que su novio?.

Por esta misma razón le hemos prohibido a Brooke que os veáis. Ahora te queremos decir a ti que si te vuelves a acercar a nuestra hija vas a acabar mal. No es una amenaza, es un hecho.

Un cordial saludo

Frank y Beyley - padres de Brooke.

¿Están a coña no? No me pueden prohibir ver a Brooke, simplemente no pueden.

Justo en ese momento suena mi movil y suelto un sonoro suspiro al ver que es Brooke quien me llama.

- Br...

- Aiden tenemos que hablar - me dice sin dejarme saludarla.

- ¿Esta noche, a la una, en la puerta del conservatorio? - le pregunto.

- Vale - responde en un susurro sin energía. - Te quiero.

- Yo te quiero más - digo para justo después colgar y no empezar una conversación típica de novios de a ver quien se quiere mas.

(...)

Ya han pasado diez minutos desde que es la una y Brooke aun no ha venido. En estos diez minutos no he podido hacer otra cisa que preguntarme una y otra vez las mismas preguntas: ¿Le habrán pillado sus padres o no quiere verme? ¿Opinará igual que sus padres? ¿Por que llega tarde?

De repente algo, bueno, mas bien alguien, me tapa los ojos y no puedo evitar sonreír.

- Brooke - murmuro.

En seguida junta nuestros labios y ya no me cabe ninguna duda de que es ella. Nos separamos por falta de aire, aunque si fuese por mi no me separaría de ella en ningún momento.

Eso ha sido muy cursi... Y muy acosador...

- Aiden, tengo que explicarte - dice Brooke.

Nos separamos del todo y nos sentamos en el puente mientras que mojamos nuestros pies en el lago.

- Yo... Quiero decir... Mis padres han estado investigando sobre ti y...

- Creen que soy un delincuente - la interrumpo.

Brooke se gira para poder mirarme a los ojos, pero yo me limito a mirar hacia el frente.

- No...

- Sí - le vuelvo a interrumpir. - Me lo han dejado bien claro en la carta.

- ¿Qué carta? - pregunta confundida.

En cuanto le doy la carta la abre y empieza a leer. Su cara va cambiando mientras lo hace, de confusión a enfado. En cuanto termina se levanta y grita frustrada mientras camina en círculos y da una patada a un árbol.

- No me lo puedo creer - grita. - Tu no eres ningún delincuente.

- Pero ellos creen que sí.

- Me da igual lo que ellos crean, yo se quien eres de verdad y eso es lo que me importa - vuelve a gritar.

- Brooke...

- Aiden escuchame - me pide sin dejarme hablar. - Yo no opino lo mismo que mis padres ¿Vale? Eres alguien genial, especial. Ellos no tienen ni idea de lo que has pasado y has tenido que hacer así que no tienen derecho a juzgarte ¡No te conocen! - me dice. Hace una pequeña pausa antes de volver a hablar. - Y yo puedo hacer lo que quiera con mi vida y lo que quiero en mi vida es a ti. Joder, no te quiero, te amo. Me has enamorado demasiado bien. No podría estar sin ti - murmura esto ultimo. - Te amo - repite otra vez en un susurro apenas audible.

Me acerco a donde esta ella y la abrazo. Ahora mismo solo la quiero tener más y más cerca de mí, no quiero que nos separemos ni por nada ni por nadie. No pienso dejar que sus padres nos separen. Nunca.

- Te amo ¿Me has oído bien? Te amo más que a nada en este mundo - le digo en modo de respuesta. - Te prometo que nunca te voy a dejar. Nunca.

Enseguida Brooke empieza a llorar en mi hombro.

Vida Imperfectamente Perfecta.Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum