Investigación

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   Junmyeon no quería abrir los ojos, incluso cuando escuchaba un ruido molesto. Se revolvió un poco más sobre el colchón que no le era familiar pero que aún así era bastante cómodo. Cuando chocó con otro cuerpo, logró recordar dónde estaba y quién dormía a su lado. Abrió sus ojos casi contra su voluntad, y ahí estaba él, Zhang Yixing, frotándose los ojos. También se dio cuenta de que el ruido molesto provenía del móvil de Yixing, posiblemente lo usaba como despertador.

—Apaga eso —se quejó.

   A los segundos dejó de escuchar el sonido terrible que lo había despertado. Yixing aún no parecía estar despierto por completo, sus ojos posiblemente se cerrarían de nuevo en cualquier momento, y Junmyeon también quería seguirlo, pero entonces recordó que debía ir a su casa antes de que se le hiciera demasiado tarde. Para su sorpresa, fue Yixing quien habló primero.

—Buenos días. —Su voz era ronca, y su acento era más evidente, le recordaba aquella mañana en la que también despertó en esa cama—. ¿Dormiste bien?

—Mejor que nunca —declaró, aunque fuese una exageración—. Buenos días. —La respuesta de Yixing fue sólo una sonrisa, pero eso le bastaba—. ¿Puedo besarte?

—¿Por qué me lo preguntas? —cuestionó Yixing soltando una ligera risa.

—Ya sabes, por el mal aliento al despertar —explicó.

   Junmyeon siempre había encontrado asqueroso besarse con el aliento mañanero, incluso rechazó los intentos de algunas ex novias, simplemente le parecía de mal gusto. Pero ahora que veía a Yixing con sus ojos caídos, su sonrisa atractiva y el cabello alborotado, estaba dispuesto a romper esa regla, y besarlo hasta que sus pulmones se lo permitieran.

   Fue Yixing quien tomó la iniciativa de besarlo, y sí, el mal aliento no era nada agradable, pero la sensación de los labios de Yixing sobre los suyos lo hacía valer la pena, incluso, el mal aliento poco a poco pasaba a segundo plano.

—¿Eso fue muy desagradable? —bromeó Yixing antes de besar su mejilla.

—No mucho, podríamos hacerlo de nuevo —sugirió lamiendo sus labios de forma inconsciente.

—Parece que te gustó demasiado —comentó riendo, para luego fijar su mirada lejos del rostro de Junmyeon—. Creo que tienes un problema.

   Junmyeon no entendía a qué se refería hasta que siguió la mirada de Yixing, quien observaba su entrepierna, la cual tenía un bulto; él quería maldecir y que se lo tragara la tierra. Estaba seguro de que ese bulto no había sido provocado por los besos, tampoco era tan débil, lo más probable era que se tratara de una erección matutina.

—Lo siento, es una erección matutina —declaró abochornado, aunque no comprendía el motivo, era algo habitual en hombres.

—¿Necesitas ayuda? —ofreció Yixing con una sonrisa que no representaba cosas inocentes.

—¿Crees que nos dé tiempo? —preguntó incierto. La oferta era tentadora.

—Por supuesto —contestó frotando su palma sobre el bulto, ganándose un gemido de Junmyeon—. Vamos Junmyeon —suplicó, aumentando el movimiento sobre la erección.

   Los métodos de Yixing eran bastantes efectivos, pensó Junmyeon mientras intentaba controlar su respiración, sólo alguien con mucha fuerza de voluntad sería capaz de negarse, y Junmyeon nunca destacó por eso, no con Yixing.

—Si —suspiró, dándose por vencido.

   Yixing apartó su mano. Sin perder tiempo, se las arregló para quitarle sus pantalones cortos de algodón y junto a ellos su bóxer. Junmyeon estaba completamente expuesto ante Yixing una vez más, y no es como si le molestara a esas alturas, cuando las manos de Yixing paseaban sobre sus muslos.

El Pasante [SuLay/Layho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora