El Pasante [SuLay/Layho]

Reconstrucción

   La respiración de Junmyeon se aceleró una vez que se dio cuenta de lo que había pedido, una completa locura, lo sabía, pero ¿alguien lo podía culpar por hacerlo? Quizá era una petición muy ambiciosa, incluso, estaba seguro de ello; pero su mente no entendía de límites en ese momento, sólo deseaba sentir la piel de Yixing contra la suya, y su voz susurrada directamente a su oído, y no a través de un teléfono móvil.

—No cambias Junmyeon —comentó Yixing con cierta gracia, Junmyeon podía imaginarlo sonriendo con melancolía mientras escuchaba sus pretensiones estúpidas—. Siempre deseando imposibles y creyendo que esto es un cuento de hadas —le acusó incluso si no parecía molesto.

—L-lo siento Yixing, yo sólo...

   No pudo completar la frase porque se sentía estúpido y avergonzado, luego de lo ocurrido debía saber que no podía tener todo lo que deseaba, la vida no siempre era justa.

—Me gusta eso de ti —interrumpió Yixing—. Eras tan optimista cuando estábamos juntos, creías que estaríamos juntos por siempre como en los cuentos de hadas. —Sus palabras se escuchaban amargas—. Tu optimismo me lastimaba y daba esperanzas en partes iguales —confesó.

    Junmyeon cerró sus ojos intentando controlar la reacción de su cuerpo ante esas palabras, evitando recordar cuando hacía planes para ambos mientras estaba en brazos de Yixing, o cuando el propio Yixing de vez en cuando le advertía que la vida no siempre resultaba como se planificaba, pero en ese entonces Junmyeon era ignorante y creía que podía lograr todo, incluso tocar las estrellas, y por eso no le hacía caso a su novio.

—Yixing —le llamó—. ¿Alguna vez dudaste de elegir entre tu madre y yo? —cuestionó de repente, sabiendo que no era correcto y que ponía a Yixing en una situación muy complicada.

Para su sorpresa, Yixing contestó de inmediato.

—Por supuesto Junmyeon, hasta el último momento.

   Y Junmyeon quería gritar porque hubiese preferido que Yixing le mintiera diciendo que jamás dudó, así sería más fácil resignarse una vez más a su destino, y su corazón no palpitaría con esperanza. Parecía estúpido por alegrarse al saber que Yixing lo amaba tanto como para dudar si elegir entre su madre o él. Era egoísta, pero no lo podía evitar, no le salía de otra forma.

—¿Qué haremos nosotros ahora? —cuestionó con temor. Esa era la duda que estaba atragantada en su garganta.

—No lo sé con exactitud —admitió con sinceridad Yixing—. Pero creo que deberíamos mantenernos alejados por un tiempo —recalcó con pesar para la desgracia de Junmyeon.

Las palabras fueron como ácido para Junmyeon.

—¿Por qué? Todo se fue a la mierda, mi papá no aceptará a tu madre nunca más —le recordó, y por un momento se sintió feliz de lo ocurrido esa mañana.

—Ambos debemos arreglar nuestras vidas. Tú apenas llevas un día fuera de casa, así que no pienses en mí, sino en tu futuro, un lugar propio donde quedarte, y hacer algo que te guste.

   Junmyeon mordió su labio inferior, sabiendo que el otro tenía razón, pero aún con resistencia para aceptarlo. Él podía hacer todo eso junto a Yixing.

—Pero eso lo podemos hacer juntos —sugirió desesperado.

—No lo entiendes Junmyeon. Nuestras vidas están destruidas, tú empezando de nuevo y solo. Yo intentando recuperarme junto a mi madre, Joonsang fue una constante en nuestra vida durante años, esto no es fácil, también debemos empezar desde cero. Además tengo un empleo del que ocuparme. No puedo estar contigo en este momento —razonó con dolor evidente.