Ecos de Amor (corregida el 20/02/2022)

IX

Decir que Sousuke estaba nervioso con su cita con Haruka era decir lo poco, tenía las manos sudadas y un latido incesante en el pecho, respiraba profundo tratando de calmarse mientras se vestía en su cuarto, sería su primera cita después del accidente, después de que Haruka había aceptado al menos darle una oportunidad, y no tirar por la borda su relación, sabía que era una oportunidad única la que se le presentaba y no lo quería arruinar.

― ¿Estás listo? ― pregunto a Haruka cuando se acercó hacia donde él estaba.

― Si ― contesto Haruka en un susurro, porque la verdad, él también estaba bastante nervioso, no estaba seguro de cómo actuar, porque nunca había ido a una cita con alguien y estaba seguro de que el que lo buscase cada vez que iba a terapia no contaban como citas.

Ambos salieron del apartamento y caminando se dirigieron hacia la estación de trenes que los llevaría hasta el acuario, esperaron un poco y ambos abordaron, se sentaron juntos y esperaron llegar a su destino. Entre ambos reinaba el silencio, pero no era incomodo, ya que ninguno de los dos era muy dado a conversar en los viajes, preferían más bien quedar absortos con la vista que les ofrecía Tokio. El tren se detuvo anunciándoles que habían llegado a su destino, caminaron un poco por las calles y entraron a un pequeño local a desayunar, pidieron Okonomiyaki y se sentaron en una de las mesas.

― Estoy hambriento ― Dijo Sousuke.

― Yo iba a preparar el desayuno, pero me dijiste que se nos haría muy tarde ― le reprochó Haruka.

― Lo sé, lo sé, pero era mejor si salíamos temprano.

― ¿Y a dónde vamos? ― preguntó Haruka con curiosidad.

― Ya te dije que es una sorpresa ― menciono Sousuke guiñándole el ojo, lo que hizo que Haruka apartase la mirada. ― además, ya vamos a llegar ― siguió diciendo Sousuke ignorando la punzada que sintió en el pecho debido al rechazo.

...

Haruka se quedó viendo admirado la cúpula de vidrio que se erigía ante él, solo había visto la fachada de ese acuario en televisión. Se dirigieron a entregar sus entradas y comenzaron el recorrido por las instalaciones, vieron una exhibición de pingüinos y de numerosas aves y peces, era un recorrido largo y sentían que no les iba a alcanzar el día y parte de la tarde para recorrerlas todas.

Haruka se quedaba admirando todo lo que veía y se dejaba guiar por Sousuke, quien de vez en cuando le sujetaba la muñeca para enseñarle una de las exhibiciones, a lo que Haruka solo se dejaba hacer.

―Yamazaki...

― Mmm ― murmuro Sousuke, todavía no se acostumbraba que le siguiese diciendo por su apellido

― ¿Yo había estado aquí antes? ― es decir ― ¿contigo? ― preguntó Haruka.

― ¿Porque lo preguntas? ― inquirió Sousuke.

―Porque sabes exactamente donde están las exhibiciones ― Haruka era bastante observador y había notado que los demás tenían ciertos problemas para ubicarse a pesar de los numerosos letreros, pero Sousuke sabía exactamente a donde ir.

― Bueno... ― Sousuke se agarró la nuca frustrado, ― sí, es de nuestros lugares favoritos.

"Era" pensó Haruka corrigiéndolo solo en su mente.

Sousuke suspiro frustrado, tal vez debieron haber ido a otro sitio, un lugar que no hubiesen visto ninguno de los dos, pero ya estaba hecho.

― No les des tantas vueltas, Haru ― trató de confortarle.

― Para ti es fácil decirlo, tu vida no se borró ― decía Haruka con tristeza.

― ¿Quieres descansar un rato? ― propuso Sousuke antes de que siguieran con el recorrido, si es que seguían caminando.