XIV

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Tanto Haruka como Sousuke se levantaron temprano para correr un rato, Sousuke le había prometido que lo ayudaría a recuperar su ritmo y eso haría, ambos corrían uno junto al otro por las solitarias calles, ya que aún no había amanecido.

― Cerca hay una piscina pública ― le comentó a Haruka cuanto se detuvieron, haciendo que sus ojos brillaran con intereses

― Podemos ir mañana, abren a las nueve ― le comentó Sousuke casualmente, a lo que Haruka asintió.

...

Al día siguiente llegaron a primera hora a la piscina, era una edificación pequeña, de paredes blancas. En la semana se llenaba de muchas personas, sobre todo en edad escolar, pero por ser un sábado temprano en la mañana, no había casi gente.

Ambos hicieron una fila de poco más de 10 personas y pagaron su entrada, les colocaron un brazalete naranja y con eso pudieron entrar.

Frente a ellos había dos piscinas, una para niños pequeños y otra para adultos, luego de observar el lugar se dirigieron juntos a los vestidores, Sousuke se encerró a cambiarse, pero Haruka simplemente se desvistió afuera, pues como siempre tenía su traje de baño debajo de la ropa, salieron de los vestidores y observaron que la piscina estaba prácticamente vacía por lo que podían nadar a sus anchas, en el área de los pequeños si había más gente.

Sousuke insto a Haruka a hacer primero unos sencillos estiramientos, que el mismo había practicado mientras estuvo en terapia, luego de ello, Haruka con prisa se zambullo en el agua y nado a gusto mientras era observado atentamente por Sousuke, su nado era hermoso como siempre, pero algo más lento de lo que Sousuke recordaba.

Sousuke se sentó en la orilla de la piscina y esperó a que Haruka terminase de dar la vuelta, notando su respiración algo agitada, en cuanto este tocó la pared.

― ¿Te sientes fatigado? ― preguntó preocupado.

― Un poco ― contestó Haruka con franqueza.

Sousuke preocupado se zambullo junto a él y le toco el pecho instándole a que respirara a su ritmo.

― Creo que tu problema es de resistencia, además de que en estos meses no te has alimentado de forma correcta, no te he visto tomarte los suplementos vitamínicos ― explicó Sousuke.

― Porque no lo hago ― contestó Haruka con voz monótona.

Sousuke suspiró, ― Debes cumplir la dieta que te indicó tu entrenador, está en una lista en pegada al refrigerador, en parte es mi culpa también, volviste a tus hábitos de sólo comer caballa y yo te complací, pero a partir de ahora debes alimentarte correctamente ― dijo con seriedad.

Haruka rio un poco ― No serías malo como entrenador.

Sousuke le sonrió, cuando ayudo a Nitori en Samezuka pensó en esa posibilidad, pero luego su lesión se agravó y tuvo que hacer rehabilitación. Trabajar con su padre no era algo que había tomado como primera opción, pero de algo debía vivir ya que su tratamiento fue costoso y para estudiar una carrera se necesitaba dinero; dinero que todavía no había podido ahorrar el suficiente.

Ser entrenador era algo que aún deseaba, él no podría nadar profesionalmente, pero si, ayudar a otros atletas con su mismo problema y en ese orden de ideas, la fisioterapia era una carrera que había llamado su atención mientras estuvo en rehabilitación, ese podría ser su camino a seguir.

Sousuke se deslizó en el agua siendo observado atentamente por Haruka, sólo realizó una vuelta, ya que, aunque el hombro no le dolía y no lo había hecho en un largo tiempo, los movimientos repetitivos no eran buenos para él, era solo que extrañaba esa sensación de estar en el agua.

Ecos de Amor (corregida el 20/02/2022)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن