¿Qué tal si lo hacemos aquí y ahora?

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-Creo que deberías detenerte. –Murmuré viendo como el peli-azul raspaba sus ojos con sus propios puños cerrados.

Mingyu inmediatamente me obedeció y se orilló a un lado de la oscura carretera.

Para mi sorpresa habíamos salido demasiado tarde de la casa de mis abuelos, ocasionando que cuando estuvimos en medio de la carretera bajara la noche.

-¿Por qué estás tan cansado? –Pregunté hacia mi compañero.

-Estas noches no estuve durmiendo muy bien. –Dijo pasándose las manos por sobre la cara con desesperación.

-¿Qué? ¿Por qué no has dormido bien? –Pregunté subiendo un poco el aire caliente del auto, la noche se había vuelto demasiado fría- ¿Es porque estuvimos durmiendo en una cama muy pequeña?

-Es porque he dormido contigo. –Dijo fijando su mirada en la oscuridad que se esparcía alrededor del auto y como los vehículos viajaban a gran velocidad a unos metros de nosotros.

-¿Qué? ¿Qué tiene que ver eso? –Interrogué frunciendo mi ceño.

-Antes de ayer te subiste sobre mí y yo te aparté. –Dijo mirándome directamente.

-¿Así que has querido follarme desde hace unos días? –Mingyu pestañeó unas cuantas veces, casi sin poder creérselo.

-Dios... que guarro has sonado. –Me mordí un poco el labio inferior, no sabía si debía tener ese tipo de confianza con Mingyu en estos momentos.

-Mingyu... -Lo llamé cuidadosamente y él se dio vuelta para mirarme- ¿Alguna vez lo has hecho en un auto?

-No creo record... ¿¡Qué estás pensando!? –Yo reí infantilmente en cuanto se giró para mirarme.

-¿Qué tal si lo hacemos aquí y ahora? –Pregunté tragándome toda la timidez que tenía.

-¿¡Qué!? ¿Ahora? –Preguntó y rápidamente me subí sobre su regazo, intenté acoplarme entre su pecho y el manubrio del auto.

Tome la manilla que estaba a un costado del asiento y lo hice bajar un poco, lo suficiente para poder moverme sobre el peli-azul sin sentirme muy apretado.

-Wonwoo, no creo que...

Llevé rápidamente mi boca hacia sus labios para callarlo, no quería que me pusiera escusas; de algún cierto modo yo también lo necesitaba.

-Yo no creo que...

-¿Por qué te opones? –Pregunté alejándome de Mingyu, él siempre era el que iniciaba estos encuentros sexuales.

-Es que... bueno, ahora somos novios y yo...

-Solo hagámoslo Mingyu. –Dije acercándome para besarle delicadamente el cuello para ver si de esa manera se relajaba un poco.

-Wonwoo....

-¡Mingyu! –Me alejé de él; el peli-azul ser elevó un poco sobre los codos.

-¡Está bien! –Dijo gritando con fuerza para luego sonreírme con picardía-. Hagámoslo.

Para mi sorpresa el pali-azul rápidamente me caso la chaqueta y la deslizo por mis brazos para luego tirarla hacia el asiento en que yo estaba sentado antes. Me tomó fuertemente del trasero para acomodarme mejor sobre él.

Sus labios se acercaron hasta mi cuello para besarlo y morderlo con dureza, después de unos segundos pude sentir como sus manos frías se introducían por debajo de mi camiseta y rosaban mi piel.

Sus dedos helados se detuvieron especialmente sobre mis pezones, jugando suavemente con ellos mientras que su boca seguía moviéndose contra mi cuello.

From what to what? [Meanie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora