Eres Tu [Camren Fic]

Capitulo 17

Capitulo 17.

Lauren*

Me quedé helada, no esperaba ese cambio repentino en Camila. De todos modos no quise darle mucha importancia, tampoco había sucedido nada así que quizás lo de que ella echaba de menos estar con Ally era cierto. Su taxi iba enfrente del nuestro, Dinah y Normani iban discutiendo a saber por qué razón. Dinah y Normani siempre debatían hasta el más minimo detalle, a veces era divertido escucharlas.

"no te preocupes Laur, seguro que no es nada. Sonríe princesa"- me había dicho Dinah al oido cuando Camz había optado por Ally.

Lo peor de aquello era que no iba a dormir con Camila, y si no dormía con ella mis horas de tenerla solo para mi se reducian practicamente a nada. Bajamos del taxi y entramos en el nuevo hotel, esta vez viajabamos para una semana porque teníamos que grabar un video. El clima de esa ciudad era bastante frío y además este octubre en general venía congelado. Me gustan los colores del otoño, no tengo un motivo, pero me gustan. A la mañana siguiente disfrutaría del olor a castañas asadas y a chocolate, lo tenía claro, pero era tarde y nos fuimos directamente a las habitaciones.

DINAH: ¿Estás bien Laur? - Normani se había metido a la ducha y no podía oirnos. - Jamás te he visto tan callada.

LAUREN: No, solo pienso... Estoy bien, sí.

DINAH: Va, en serio, animate, no sé qué le picó a Camila, pero seguro ya se le pasará. Habla con ella -empecé a deshacer la cama para meterme en ella - lo mismo has hecho algo que le ha molestado y ni siquiera lo sabes. Es muy de Camila callarse las cosas que no debe y decir las que debería callar - sonreí con esa afirmación tan cierta.

LAUREN: ya, bueno -me metí en la cama - hablaré con ella mañana, supongo.  - Dinah me guñó un ojo - ¡Te emociona más todo esto a ti que a nadie! - le tiré un cojín.

DINAH: Soy la jefa de las Camren Shippers ¿recuerdas?

Camila*

Ally dormía placidamente en la cama, estuve mirando el techo por un buen rato. Si Lauren hubiese estado ahi seguro que no estaríamos durmiendo aún. Sonreí. "Camila no sonrías, has decidido acabar con esto." Cerré fuerte los ojos. "Bueno, has decidido acabar con esto si Lauren no muestra interés." Rectifiqué para convencerme a mi misma. Y entonces presentí que eso me iba a costar más de lo que debiera. Estaba casi segura de que Lauren ni se había inmutado por lo del cambio de habitación, si se había decepcionado en un primer momento pero en seguida pareció que le daba igual. Riendo y haciendo bromas con Dinah, con sus estupidos secretos y sus chistes que solo ellas entendian... Mierda, Camila, ¿estas celosa de Dinah? No. O sí. Por eso de los secretos acabé recordando cuando Lauren me había pedido que lo nuestro fuera un secreto. Si lo nuestro hubiese sido algo, no me hubiese importado, pero su actitud me confundía. Además, ella ni siquiera confiaba en mi para confesarme el motivo de su llanto, de sus palabras, de sus cambios de humor... Lauren no me tenía en consideración y estaba claro que Dinah sí sabía lo que le sucedía. Entonces caí. Dinah sabía lo nuestro.

ALLY: Camila por dios deja de moverte -su voz de dormida me despertó de mis pensamientos. - vas a romper la cama. 

CAMILA: lo siento, Ally...  duermete, ya paro. 

No sabía por cuanto tiempo iba aguantar sin llorar si seguía comiendome así la cabeza, así que decidí intentar dormir. Realmente estaba cansada y no dormir no me iba a ayudar a estar de mejor humor. Me estaba empezando a cansar de mi actitud de llorona. Por dios, esque Lauren podía hacerme feliz un día y completamente desdichada al siguiente. Lo último en lo que pensé antes de caer dormida fue en el mar verde de sus ojos.

Ally*

Camila se había movido toda la noche y yo sabía que estaba triste. No sabía el motivo, pero lo intuía. Algo en el corazón de Camila no andaba bien y eso me ponía triste. Antes de que se despertase fui a la cafetería del hotel y compre unos bollos y chocolate. Cuando subí me la encontré dormida aún. 

ALLY: Mila... -la moví un poco intentando no tirar lo que traía. - Mila cielo, mira que te traigo.

Camila se dio la vuelta y abrió los ojos perezosamente. Cuando vio lo que traía volvió a cerrarlos para después aspirar fuertemente.

CAMILA: Oh, dios, Ally! -se incorporó y se quedó sentada- ¿Por qué eres tan buena? - Me dio un beso en la mejilla y me abrazó. Casi tiré todo. 

ALLY: Cuidaaaado - posé el desayuno en la mesita. - No sé, Mila te noto triste. Y el chocolate siempre te anima. -me miró con una amplia sonrisa - Bueno, y la pizza, pero no me pareció buena idea desayunar pizza.

Las dos nos reimos con mi comentario. Camila me hizo un hueco a su lado en la cama y desayunamos juntas y riendo. Por la ventana vi la calle fría y la gente andando con chaquetas largas y gorros. Eso me recordó uno de los videos que sube Mila a Vine y me empecé a reir.

CAMILA: ¿A que vino eso? - su cara divertida y curiosa me hizo empezar a reir más. 

ALLY: Recordé un video tuyo - Mila me miró extrañada - El de las chaquetas, ese de que te encuentras a alguien que no te cae bien y te tapas... - la miré a la cara - Jamás me hagas eso Camila.

La sonrisa de Camila no podía ser más amplía, de todos modos no estaría del todo contenta hasta que esa sonrisa fuera completamente sincera. Y me daba igual lo que tuviese que hacer  porque odiaba ver a mis niñas tristes o preocupadas. Ellas debían ser felices, tan felices como lo soy yo por tenerlas. Ay, que cursi sonó eso, bueno... así es Ally, y pienso seguir siendolo por mucho tiempo, porque realmente todo aquello que estaba viviendo con ellas me parecía un hermoso sueño. Un regalo de Dios o algo por el estilo.