Vida Perfectamente Imperfecta

FINAL

Sí.

Voy a ir. Tengo que ir.

No me voy a echar atrás, no otra vez.

Pienso recuperar a Aiden, el sigue siendo todo para mi y este tiempo en el que hemos estado separados solo me ha servido para darme cuenta de todo lo que le necesito. Le quiero demasiado como para dejarle escapar y se que estoy siendo egoísta, pero por una vez en mi vida voy a serlo y no puedo pasar nada. Suficiente he sufrido para que pase algo. Me lo merezco, nos lo merecemos.

Después de repetirme mi discurso una y otra vez para convencerme de ello llamo al timbre de la casa de Aiden. No pasa ni un minuto antes de que un Aiden sin camiseta y con el pelo despeinado abra la puerta.

- Yo... Eh... Esto ha sido una tontería- empiezo a decir sin saber que hacer. - Siento haberte despertado, no debería haber venido.

Estoy a punto de marcharme cuando su mano me detiene agarrando mi brazo. No me da tiempo a pensar en lo que esta pasando porque enseguida mi cabeza esta recostada en su pecho y sus brazos me rodean como si no me quisieran soltar nunca. Yo inconscientemente dejo de hacer fuerza y dejo que me abrace mientras las lágrimas empiezan a caer por mi mejilla.

- Te he echado de menos - me susurra sin soltarme.

Siento como una especie de sensación de calor se apodera de mi pecho y como las estúpidas mariposas aparecen de nuevo en mi estomago como no la habían hecho desde que nos separamos. Yo también le había echado de menos, pero no me salían las palabras para decírselo.

Sin darme cuenta Aiden me lleva hasta el salón y se sienta en un pequeño sillón dejándome que me siente en su regazo.

- Q-queria pedir-dirte perdón - digo sin poder evitar tartamudear.

- No me tienes que pedir perd-

- Sí que tengo, te aleje de mí pensando que te iba a hacer más daño si me quedaba a mi lado, pero me he dado cuenta de que era al revés.

- Yo te tengo que pedir perdón, Brooke, por no darme cuenta que necesitabas espacio y tiempo, que necesitabas ver todo con perspectiva. No siempre le pasa algo como te paso a ti a alguien y yo no supe ver lo mal que estabas. Lo siento.

Como no, lágrimas caían por mis mejillas. No podía dejar de llorar, temía quedarme sin lágrimas por todo lo que estaba llorando. 

- Te amo Brooke - añade tras una pequeña pausa. - Te amo más que a nada en este mundo, no te puedes imaginar todo lo que te he echado de menos.

Sin poder evitarlo beso a Aiden. Enseguida el me corresponde el beso profundizándolo y cuando nos separamos me aleja un poco de él para poder ver mi rostro. 

- Deja de llorar por favor, no sabes lo que me duele verte llorar - dice a la vez que me empieza a limpiar las lágrimas con sus dedos.

Todo era demasiado bonito para estar hablando de nosotros y no se hace esperar algo que lo fastidie todo y Aiden sin querer me mete el dedo en el ojo al intentar limpiarme las lágrimas que seguían cayendo.

- Ay, lo siento , Brooke, perdón - empieza a decir deprisa. - En serio que lo siento yo no quería... ¿Estas bien?

- Tranquilo - le contesto riendo y dejando que me vuelva a abrazar. 

- Somos un desastre- murmura.

- Y que lo digas...

Sin apenas darme tiempo sus labios están sobre los míos moviéndose apasionadamente. Y en ese momento me doy cuenta de que por mas besos que nos hayamos dado ese será el que marque un antes y un después en nuestra relación. Sé que a partir de ahora todo va a salir bien si estamos juntos y que nadie nos conseguirá separar. Porque con él mi vida es perfectamente imperfecta y no la cambiaría por nada. Solo él y yo, nosotros.