Capitulo 80

1K 48 0
                                    



Me desperté de un sobresalto, encontrándome con el amanecer entrando por la ventana, Estefan seguía dormido sin inmutarse de mis movimientos, salí de la habitación sin hacer el más mínimo ruido, fui al baño del pasillo, cepille mis dientes y recogí mi pelo alborotado, baje las escaleras con una misión en mi cabeza.

Hacer el desayuno.

Tenía un largo tiempo que no hacía y de cómo hacerlas no me acordaba para nada, quería ser una buena novia que prepara desayuno a su novio como en las pelis, así que esta misión tenía que ser porque si. Al llegar a la cocina comencé a sacar lo necesario para hacer panqueques, huevo, harina, azúcar y todo lo que mi cabeza no acordaba sino al rato, empecé a mezclar, a preparar, a quemarme, mientras que las ultimas se hacían comencé a preparar el desayunador, puse los platos, los vasos y todo lo que se le podía echar a las panqueques, saque el jugo de naranja y los vertí en los vasos, cuando me doy vuelta para sacar las ultimas soy rodeada por Estefan, haciendo que me asustara.

—Sorpresa—susurro en mi oído haciendo que me piel se erizara.

—Buenos días.

—Buenos días, cielo—respondió besando mi cuello— Debo admitir que me has dado un susto de muerte

— ¿Yo? —pregunto dándome la vuelta, encarándolo, a la vez colocando los platos en el desayunador.

—Sí, tú... espera—me cogió del rostro y con su mano la deslizo por mi mejilla—Tienes harina.

— ¿Por qué te he dado un susto de muerte?

—No te vi en la cama y todo lo que ha pasado, me asuste—explico alzándose en hombro.

—Solo me desperté temprano—los dos nos sentamos y cuando íbamos a empezar a comer lo detuve—Solo quiero decir que tengo tiempo que no hago esto y puede que no sepa bien...

—Calla—sonrió y comenzó a comer frunciendo su ceño—Deberías probar esto...

— ¿Está mal? —pregunte colocando un pedazo en mi boca, tenía que admitirlo estaba bueno.

— ¿Qué tengo que hacer para que cocines esto todos los días? —preguntó volviendo a comer otra y otra y otra.

—Nada.

Los dos comenzamos a comer en silencio, él dándome sonrisas picaras y yo tratando de calmarme.

— ¿Qué vamos a hacer hoy? —preguntó dejando el plato limpio.

—Podemos ir al parque de atracciones—susurre pensando que seria una mala idea.

—Me gusta—su mirada quiso demostrar lo contrario.

—No importa si no vamos...

—Hal...

—En serio...

—Me gustaría visitar a tu padre—sus palabras fueron un gran golpe para mí.

— ¿Qué?

—Llevarle unas flores, hablarle...

—No creo...

—Por favor—estaba confundida las palabras se habían escapado de mi cabeza.

—Está bien—dije luego de varios minutos de silencio.

—Sé que es incomodo e inoportuno para ti pero si deseo tener un futuro contigo tengo que hablar con él... aunque no este físicamente—sus palabras me eran un puñado de confusiones.

— ¿Planeas un futuro conmigo?

—Es lo que deseo, realmente—susurro sintiéndose incomodo—Lamento haberte sorprendido con lo de tu padre.

—No lo lamentes...—el teléfono comenzó a sonar, me levante del desayunador y conteste, encontrándome con risas, olas y niños gritando—Buenos días.

—Hola, hija ¿Cómo estás? —oír a mi madre me lleno de calma por un instante.

—Es mi madre—susurre a Estefan quien asintió—Estoy bien ¿Y tú? ¿Y los niños?

—Aquí en la playa hicieron unos amiguitos y cuéntame ¿Mi plan funciono? ¿Ya se arreglaron?

Mire a Estefan quien no quitaba sus ojos sobre mi—Si, si funcionó y si lo arreglamos.

— ¡Ay qué bueno, estaba preocupada por los dos! ¡Qué bueno! —comenzó a chillar—Bueno cariño, que bueno que están bien, solo quería saber si se habían reconciliado, nos vemos—y colgó, mire el teléfono y lo puse en su lugar.

— ¿Está todo bien?

—Ni te lo imaginas.



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Holala, lo prometido es deuda. 

Lamento haberles dejado sin cap toda la semana, realmente lo lamento. 

Pero a eso, hoy les subire hoy. 

Klsmdoknsodnoa.

No olviden comentar, votar, compartir y hacer cualquier cosa con esta historia. 

Graciaaaaaaaaaas por leer y entender. 

No olviden que los adoro. 

Gracias, gracias, gracias. 

Imperdible amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora