Capitulo 141

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Septiembre llegó, los días fueron para mejores, la casa había vuelto a ser como antes aunque con algunos cambios, mi madre aun tenía en la cabeza querer hacer cambios y yo solo ofrecí cambiar el color de las paredes y cambiar las cosas de lugar, la mente de mi madre era muy extensa, Estefan tuvo que dejar de llevarme a la escuela por su inicio en la universidad, eran una hora y cuarenta minutos de la casa a la universidad, como mi madre decía que era mucho tiempo manejando le había convencido de quedarse allá, solo nos veíamos los fines de semana y los días en los que salía muy temprano de clases y eso era muy poco tiempo, aunque no me gustase estaba feliz por él, estaba haciendo lo que le gustaba, había quedado en el equipo y no dejo de repetírmelo por una semana.

Habían pasado dos semanas sin habernos visto, estábamos en exámenes y solo teníamos tiempo si acaso de llamarnos en las noches, tenía que aprobar todo si quería ir a la misma universidad que Estefan según la promesa que había hecho con mi madre, no tenia siquiera que protestar y sinceramente me había arrepentido de ello.

Tenía que verlo, si o si.

Aproveche el día del aniversario de la escuela para ir a visitarlo, tenía que admitir que la universidad era grande comparado de lo que me imaginaba, pregunte en su facultad donde me indicaron que estaban practicando.

Baje las gradas viendo a todos los jugadores con aquellos trajes inmensos, me pare en la primera fila para observar como jugaban. Habían personas sentadas también viendo el juego.

— ¿Qué haces aquí? —me voltee a ver a un chico que me miraba incrédulo.

—Vengo a ver a alguien.

— ¿Eres de aquí? —deje de mirarle y señale a Estefan.

—Vine por él.

—Tú debes ser la novia de Estefano—dijo él como si hubiese puesto una pieza en el rompecabezas—No deja de hablar de ti, ya pensábamos que era mentira.

—No, aquí estoy.

—Sí, ya veo—asintió— ¿Quieres ir a verle? Es muy bueno yo sería el primero en votar para que sea mariscal, teníamos tiempo que el equipo no ganaba.

—Lo sé, él todo lo hace bien—dije recordando sus palabras en la habitación de Zad— ¿Juegas con él?

—Sí pero me lesione el tobillo la semana pasada, tengo reposo—bajamos unas escaleras—Estamos practicando para la semana de campeonato.

—Les deseo muy buena suerte—susurre aun sintiéndome emocionada, él se sentó a mi lado, estaba en el campo viéndolo todo mucho más cerca, no sabía diferenciar un extra point con un field goal pero si me sobresalte cuando Estefan llegaba a la zona de anotación, los del equipo junto con los que estaba rodeada empezaron a aplaudir y a gritar su nombre, me uní a ellos, hasta que aparecieron.

—Siempre es lo mismo—dijo el chico a mi lado, supongo al darse cuenta de mi cara cuando las porristas se acercaban a Estefan ofreciéndoles agua en esos uniformes diminutos—Es muy bueno y eso no solo llama la atención a los entrenadores sino a las chicas.

—No ayudas—susurre sintiendo mi ceño fruncido.

—Solo ve—y eso hice, se detuvo antes aquellas hormonales, estaba casi muy cerca de mí, aun no se había percatado de mi presencia.

— ¿Qué no entienden nada de los que le digo? —dijo acelerado— ¡Ya tengo novia, lárguense! —gritó haciendo que se dibujara una enorme sonrisa.

—Siempre es lo mismo—volvió a repetir el chico a mi lado—Deberías ir allá y demostrarle quien es la que manda.

Lo mire.

—Me caes bien.






Hola mis amores, les recuerdo a quienes estén comentando y votando les dedicare un cap, cap.

Muchísimas gracias por estar.

¡7.9k de besos, abrazos y mucho amor!

Los adoro

Imperdible amorWhere stories live. Discover now