Te Protegeré [ChanBaek Mpreg/Psicológico]

Capítulo XVI: Sonrisa

  Suzy - Ring My Bell  

#ChanYeol #

Mis ojos ya habían adquirido ojeras desde hace un par de días, mi cansancio sobrepasaba más allá de un siesta, mis piernas flaqueaban y dormía cuando tenía tiempo, aunque fuese unos cuantos minutos.
El padre de BaekHyun había corrido a mi novio de casa por lo que tuve que gastar todo mi dinero, y con ayuda de Sehun, para comprar un departamento después de que mi amigo me ayudara a recibirlo en su casa por unas noches. Los departamentos que se encontraban cerca de la escuela y los lugares públicos necesarios para nosotros eran muy caros, por lo que me fue difícil encontrar uno perfecto para Baek y para mi. Por suerte, después de buscar por unas cuantas horas pude rentar uno.

Me escapé de casa empacando mis cosas necesarias para llevarlas al nuevo departamento y que por fortuna, mis padres o mi insoportable hermana Yoora no se percataron de mi ausencia. Al principio, pensé que se me dificultaría un poco las cosas ya que era la primera vez que viviría independientemente de mi familia además de que mantendría a BaekHyun, pero resultó exactamente lo contrario a lo que había pensado.

Hoy era sábado, por lo que podría estar todo el día en casa con Baek sin que sus padres no le dieran permiso de salir o escuchar a mi madre o padre sermoneándome sobre cosas que ya estaba cansado de escuchar. Ahora mismo, nos encontrábamos cocinando unas galletas de chocolate y azúcar, unas donas de vainilla como las que le había regalado un día en el instituto y un plato de Bingsu de mango, y que por cierto era delicioso.

  — ¡Deja de comerte mi Bingsu, Yeol! — se quejo mi novio con un lindo puchero, quitándome el sabroso postre de mis manos para llevarse grandes bocados a sus labios. — Te recuerdo que yo soy el de la idea.

  — Pero yo fui el que lo preparó... — susurré como un niño pequeño y a lo que Baek sonrió como las pocas veces que lo hacía.

— Pero yo y tu hijo tenemos hambre, así que deja de comerte mi Bingsu porque no pienso darte más. — Me sacó la lengua juguetón y reí rodeándolo con mis brazos sin hacerle daño a la zona de su barriga. — Yeol, tengo ganas de hacer el...

  — No se diga más, vamos a la habitación — Lo tomé de la mano y lo arrastré hacia nuestra alcoba sin perder tiempo. Una vez llegando a aquella dirección, lo obligué a dejar el postre en la mesita de noche para poder recostarlo en la cama y comenzar a besar su cuello.

  — Yo iba a decir: Yeol, tengo ganas de hacer el postre que Luhan una vez me preparó. Pero tu perversión hacia mis palabras incompletas me agradan — rió. 

No me importaba haber malpensado, ya tenía ventaja ahora por lo que no quise desperdiciarlo. Sólo lo habíamos hecho una vez, y aunque esta en estado de gestación, aún podíamos seguir haciéndolo mientras se podía. Me encargué de hacer una ola de besos por toda la zona de su cuello mientras mis manos tocaban su piel debajo de su camisa y tratar de quitársela cuando ascendía poco a poco.

Hubo unos cuántos jadeos y gemidos pequeños que salían de su boca semi-cerrada como la primera vez que nos entregamos por lo que no me detuve en ninguno de mis movimientos, sobre todo porque la seguridad de BaekHyun se mantenía elevada a diferencia de la última vez. 

— Y-Yeol, a-apresúrate... — me pidió entre susurros mientras su espalda se curvaba un poco. 

Obedecí a cada una de sus súplicas sin dejar mi cuidado para que no se lastimara a cambio de unos suaves y pequeños toques por sus manos, unos besos lindos y sonoros de sus labios, unos gemidos fuertes y excitantes de su voz y un cuerpo volviéndose a unir con el mío.