Te Protegeré [ChanBaek Mpreg/Psicológico]

Capítulo XXXII. Enfermedad

어반자카파 (Urban Zakapa) _  I Hate You 

#ChanYeol#

Me había dicho mentalmente que no debía llorar una vez que entrara a ver a BaekHyun pero había sido completamente inevitable, dándole la razón a KyungSoo y MinSeok sobre la forma en la que ahora se encontraba, sin imaginarme que hubiera sido más de lo que imaginé.

Me acerqué a él a paso lento, queriendo retener lasa lágrimas pero sabía de antemano que eso iba a hacer algo imposible así que sólo traté de no dramatizar en el momento.

BaekHyun estaba recostado en la camilla de la habitación, con su vientre hacia arriba bastante abultada pues faltaban algunos días para el nacimiento de mis mellizos, las sábanas no cubrían completamente su cuerpo ya que estaba enredado en las piernas y estómago del menor, reía con una gran sonrisa observando el techo una y otra vez sin dejar de mover la cabeza, su cabello estaba pegado a su frente gracias al sudor que emanaba y que incluso estaba cubierto de ello a pesar de no hacer calor, sus ojeras estaban más marcadas de los que una vez había visto, tenía marcas rojas en algunas zonas de su cuerpo que eran visibles, sus ojos estaban dilatados, saltados y opacos, también su piel era pálida y podía ver que en algunas partes de su cuerpo estaban pegadas a su hueso por falta de nutrición. Hablaba solo y de manera infantil, con un tono de voz bastante aterrador y agudo que me ponía la piel erizada.

Cualquiera que lo viera, diría que está loco.

   — B-Baekkie... — Lo llamé casi en un susurro, pero aún no se percataba de mi presencia, simplemente hablándole al techo con risas fuertes, burlonas y sardónicas que me daba miedo.

— No CheolYeo — rió más fuerte, moviendo su cabeza de un lado contra la camilla haciendo que al mismo tiempo su cabello se despeinara más — No puedo decirle al idiota de ChanYeol que nos besamos varias veces — Se silenció así mismo colocando su dedo índice en su boca y haciendo el sonido de sshh para poder seguir riendo.

Me dolía tanto que actuara como una persona fuera de sí, y probablemente me enojaría por la confesión tan repentina que había escuchado pero Cheolyeo era una alucinación, y prácticamente Baek había besado al aire.

Me acerqué más a él retirándome las lágrimas que aún resbalaban por mis mejillas para poder tomar su mano, al cual actuó rápidamente volteando hacia a mí presenciándose serio y quitando mi agarre de su cuerpo con los ojos demasiado abiertos.

De cerca se veía en peor estado.

Comenzó a reír de nuevo mirándome a mí y después a la habitación, y viceversa.

  — BaekHyun, ¿Qué te hiciste? — Obligaba que me viera tomando su rostro con mi mano derecha pero seguía moviéndose de un lado a otro sin detenerse ni un sólo segundo — ¿Qué te ha pasado?

— Me dejaste — Carcajeó — ¿Recuerdas? — Sonrió — Me desechaste como a la basura, ¡Pero no te preocupes! Ya golpeé mi estómago muchas veces para que ya no tengas más excusas para abandonarme ¿Te gusta mi idea?   — Ilusionó como un niño pequeño.

  — No te lastimes Baek, tampoco a nuestros bebés por favor. No quiero que sufran daños — Volví a llorar pensando que ya se habían secado mis lágrimas.