Te Protegeré [ChanBaek Mpreg/Psicológico]

Capítulo XXVII. Decadencia

  Soyou (소유) (Sistar) X Baekhyun (백현) (EXO) - Rain (비가와)   

#ChanYeol#

Baekhyun cerró sus ojos sosteniéndose fuertemente de MinSeok ya que Luhan tenía las manos ocupadas con el niño, al parecer todos estaban en modo alerta pero mis padres no se movían de sus lugares, incluso Yoora. Simplemente mirando con cuidado a cada una de las cabezas debajo de ese techo, probablemente impresionándose de la cantidad de personas en mi departamento.

— ¿Qué hacen aquí? ¿Cómo supieron dónde vivo? — pregunté con cierta autoridad oral. Una vez que hablé, BaekHyun corrió a mis brazos, rodeándolos en mi cintura y ocultando su rostro en mi pecho en modo de protección. Algo que sin duda correspondí protegiendo a mi novio.

— Sólo vinimos a ver cómo estabas, pero al parecer tienes visita. — Habló Yoora sin dejar de mirar a JongDae de manera lujuriosa.
Y MinSeok pudo notarlo.

— Váyanse, no tienen derecho alguno a venir. No los quiero aquí.

— No nos iremos hasta hablar contigo, el enfermo puede irse de aquí — Mi madre alzó la voz, caminando unos cuántos pasos hacia ellos pero JongIn y KyungSoo la detuvieron, poniéndose frente a ella.

— No se acerque señora Park, y mejor lárguese de aquí antes de que llame a la policía. — KyungSoo habló con el mismo tono de voz.

— Cómo se atreve a hablarle así a mi esposa, enano maleducado — Gritó mi padre queriendo golpear a Soo con el ceño fruncido, bastante enojado. Pero antes de que tocara al más bajo, JongIn lo empujó.

— No voy a permitir que toque a mi novio con sus sucias manos, señor.  — Enfureció JongIn, cambiando su voz a una más gruesa, más intimidante y haciendo énfasis en la palabra mi.

— Por favor ChanYeol, ayúdame — Suplicó Baekhyun con la respiración agitada, los ojos cristalizados y la voz temblorosa al igual que sus piernas.

Tenía miedo al igual que BaekHyun, porque todos comenzaron a discutir entre sí; 

KyungSoo y JongIn contra mi padre.

Mi madre con  Sehun y Luhan.

y Yoora con MinSeok gracias a JongDae. 

No sabía qué hacer ahora, porque al parecer yo era el único que podía manejar la situación de todos los presentes y no podía con todas las voces gritando entre las cuatro paredes mientras Baek me lloraba, aferrándose a mi camiseta. Quedé en un estado de trance en el que no podía articular palabra alguna o mover mis piernas para cambiar de sitio y separarlos tan siquiera, me había quedado congelado por tanto tiempo que reaccioné demasiado tarde.

Mi cabeza daba vueltas sobre sí mismo, debatiendo entre quién separar primero o si debería dejar desapercibido el que todos se estaban alzando la voz para ocuparme de mi novio, ya que la actitud que estaba empezando a tomar mientras conforme él y yo veíamos a todos enfurecer, se hacía cada vez más complicado. Y tenía la idea de lo que le ocurría.