TMR.

Capítulo veinticuatro.

Creo que todos los humanos hacemos cosas buenas para compensar las malas. Yo lo hago, pero hay otras que simplemente llegan, son sentimientos. Es como si comparara la vez que tuve mi primer Hámster y creí que estaba embarazado, su nombre era Sr. Coliflor, esto porque no me gustaba la coliflor y pensé que si le ponía ese nombre a algo que quería me gustaría, no funciono, tampoco lo hizo Sr. Tarea, ni Sr. Primer novio.

Ese día me había tenido que quedar en casa por un pequeño resfriado, no tenía nada que hacer por lo que me puse a observar detenidamente a Sr. Coliflor, ahí noté que estaba más dormilón, panzón y comelón de lo normal, le conté a Ethan mis sospechas, él también se emocionó y esa misma tarde justo después de llegar de la escuela me anuncio que le había dicho a la maestra que llevaría una de las crías, eso sonó muy bien para mí, no sabía cómo cuidar un bebe hámster así que le prometí que en cuanto naciera se lo daría, entonces él lo llevaría a nuestro salón y de ahí todo estaría perfecto.

El problema es que mi Hámster no estaba embarazado, simplemente tenia genética sensualosamente barrigona (Por no decir que rodaba en vez de caminar).

Cuando papá me dijo eso me sentí mal, Ethan quedaría como un mentiroso, le diría a John y él no me dejaría volver a vestir y peinar a su gato así que esa misma tarde escape de casa y fui por la ciudad a buscar un Hámster. No encontré ninguno pero cuando venía de regreso vi algo junto a un basurero, tenía once años y muy pocos conocimientos sobre animales por lo que se me hizo fácil tomar la rata tamaño perro de ahí y llevarla con Ethan, él tampoco se dio cuenta así que lo llevo a la escuela. La rata asusto a la maestra y mordio a uno de nuestros compañeros, cuando volví a la escuela la maestra me pusó un trabajo para diferenciar mamíferos y junto con Ethan tuvimos que dar una presentación en clase de biología.

Sí que suena ridículo si lo digo de esa forma pero trato de dar una idea. Siento que las cosas van demasiado rápido, no puedo detenerme a pensar. Hace unas semanas falte a la universidad por unos días, creí haber encontrado algo pero al parecer solo perdí el tiempo, el problema fue que tuve que trabajar más para no perder temas y recuperar clases, lo peor es que esos no son todos los problemas, de hecho he estado considerando el cambiarme el nombre, en lugar de Vainilla me hare llamar Problemilla, no, no, mejor Problemainilla, no, no, mejor Provaniblema ese me gusta, seguramente a mamá no le gustaría o tal vez sí, me diría que me queda por que suena como una enfermedad, eso me dijo cuándo le dije que me quería llamar Pibunia.

Pero mi principal desvelo ahora no es eso, es Ali, la quiero mucho pero Joaquín no me aceptaría cerca, yo tampoco me quería acercar a él pero lo hice, lo hice por Ali, el problema es que ahora creo que también lo estoy haciendo por el::: Y por mí.

Escrito mientras: Lloro en mi cuarto una calurosa noche de verano. (En realidad como una hamburguesa mientras veo los Simpson pero lo anterior sonaba mejor).

-Vany.

N/A: ¿Alguien mas extrañaba las notitas?