Lección 8

6.7K 1.4K 142
                                    

Cómo dormir con alguien (pt.1)

Habían pasado unos cuantos días desde la situación del parque y YoonGi podía decir que estaba más cómodo con JiMin. Sin quererlo, se había estado acostumbrando más rápido de lo que tenía previsto, y debía admitir que las expresiones de JiMin parecían pegar con su físico. Habían sido realmente específicos creando a JiMin o al menos así lo creía él, quizás era por cuestiones de su propio fin; relacionarse con las personas, por lo que no podía sentirse bien diciéndole que las cambiara, parecía como si hubiera sido prescrito que fuera de esa manera.

—¿Qué tal las compras? —le preguntó YoonGi al rubio una vez dentro de la casa, dejando las bolsas sobre la mesa de la sala—. ¿Súper divertidas, huh?

—Claro que sí —le sonrió el rubio—, fue muy entretenido pasarla con usted, Hyung.

YoonGi soltó una risita, ya después tendría que enseñarle a JiMin qué era el sarcasmo.

—Me alegra escuchar eso —rápidamente, el pelinegro miró el reloj colgado en la pared de la cocina.

Ese día habían decidido hacer el mercado de noche para que JiMin conociera cómo se movía todo a esas horas, sin embargo, no había salido tan perfecto como se esperaba.

—Son las once.

—Es un poco tarde, Hyung —comentó JiMin, mirando el reloj..

—Considerando el hecho de que te fuiste caminando hacia una dirección que no era y que te perdiste, no debería ser sorpresa —lanzó un bostezo al aire—. Fue un buen rato el que estuve buscándote.

Parecía que JiMin había desarrollado lo que era "no querer hacer caso a una orden simple", ya que no sostuvo la chaqueta de YoonGi cuando salieron de la casa y se distrajo viendo diferentes cosas y, bueno, no era completamente culpa del robot porque YoonGi debería estar mucho más atento, pero él no creía que que fuera necesario estar constantemente pendiente del contrario. Esperaba el día en el que JiMin pudiera desarrollar independencia propia y él no tuviera que levantarse a comprar porque el robot lo haría por él.

—Ya dije que lo sentía —JiMin hizo una mueca rara, parecía de culpa pero YoonGi no creía que la estuviera haciendo bien—. ¿Deberíamos ir a dormir ahora? Para tener energía para mañana.

—No lo digas como si fuéramos a hacer algo mañana, y debemos guardar estas cosas primero.

—Oh cierto... —se acercó a las bolsas, comenzando con su labor—. ¿No haremos nada mañana? —miró curioso a YoonGi.

—¿Qué podríamos hacer mañana? —enarcó una ceja mientras dejaba la comida en su lugar. Sus estantes nunca se habían visto más llenos.

—Quizás... hum... No lo sé, Hyung —hizo un puchero.

YoonGi rió bajo y así continuaron hasta que la despensa y el refrigerador se encontraban completamente llenos. YoonGi bostezó, viendo que habían pasado unos quince minutos y se despidió de JiMin para irse a su habitación. Sin embargo, se quedó unos segundos observando al rubio quien, al ver finalizada su tarea, caminó hacia el sofá y se acurrucó, alistándose para dormir.

Bien, quizás YoonGi se sentía un poco culpable ahora.

Se suponía que ya debía estar acostumbrado a ver a JiMin dormir en el sofá, pero quizás el tiempo juntos había sido contraproducente porque cada día que pasaba la culpa se acumulaba en su estómago.

Él nunca fue bueno aguantando la culpa, en realidad.

—Eh, JiMin... —el nombrado se sentó y miró al pelinegro con ojos curiosos—. Yo... Uh... Quería saber si, bueno... ¿No te parece incómodo dormir en ese sofá?

El rubio ladeó la cabeza.

—Yo no puedo sentirme incómodo Hyung —le restó importancia JiMin, sonriéndole.

—Sí, tienes razón —se rascó la nuca y caminó hasta la entrada de su cuarto.

Sin embargo, a pesar de que sabía que a JiMin literalmente no le molestaba en absoluto dormir en el sofá y de que, lógicamente, JiMin no podía sentirse triste por eso, la humanidad de YoonGi le decía a gritos que eso estaba mal y que tenía que ser más empático con el chico, un poco más amable al menos.

Él era plenamente consciente de que no tendría sentido hacer algo al respecto, pero su cabeza no lo dejaba tranquilo ahora, mucho menos lo haría cuando quisiera acostarse a dormir. Así que, entre maldiciones bajas y pequeños gruñidos, caminó hasta quedar al frente de JiMin quien ya se encontraba nuevamente acurrucado en el sofá.

—Hoy dormirás conmigo.

JiMin miró a YoonGi con curiosidad.

—Pero Hyung, cuando llegamos usted me dijo que tenía completamente prohibido recostarme en su cama —explicó, YoonGi asentía e hizo un ademán con su mano—. Usted dijo, exactamente, "si te atreves a tocar mi cama, pedazo de chata..."

—Sé lo que dije —lo calló y soltó aire—. Pero siendo honesto me has ayudado mucho, entonces... no quiero que duermas incómodo.

—Hyung yo no puedo...

—Sé que no puedes sentirte incómodo, lo sé —insistió—. Sólo ven para que pueda estar tranquilo con mi conciencia.

—Pero Hyung...

—¿Quieres dormir conmigo o no? —preguntó un poco más alto.

De repente, se dio cuenta de lo extraño que había sonado eso y pudo sentir su cara ligeramente caliente.

JiMin pareció quedarse un segundo pensando, su mirada concentrada en el pelinegro quien esperaba ansioso una respuesta. YoonGi estaba a nada de reírse, porque pasó de "invitar" a "pedir", ¿es que acaso este robot era un manipulador?

—Sí quiero —JiMin sonrió, el hombre relajó los hombros y asintió, el calor de sus mejillas permanecía ahí.

—Está bien, vamos —murmuró, caminando en dirección a su habitación.

JiMin tomó su almohada y siguió al pelinegro, una cara de duda pintando su rostro. Si YoonGi le había pedido dormir con él era porque quería hacerlo, ¿cierto? Si él negaba la oferta, los sentimientos de YoonGi serían heridos y aquello podría ser malo, por lo que había hecho bien en aceptar.

Cuando entró a la habitación, vio a YoonGi acostarse y darle la espalda, la cama era pequeña, quizás para una sola persona, por lo que JiMin se acostó lentamente para no molestar a YoonGi, colocándose boca arriba como llevaba haciendo en el sofá.

—Hyung.

YoonGi hizo un sonido.

—¿Por qué las personas duermen juntas? —preguntó, sus ojos fijos en el techo.

—JiMin, no me voy a poner a explicar eso ahora, sólo duérmete —suspiró.

—Hyung, quiero saberlo —insistió—, usted había dicho que no podía dormir con usted, pero ahora sí puedo, ¿por qué?

—Porque sí —decía con los ojos cerrados, tratando de que el sueño le ganara para no tener que seguir respondiendo.

—Pero... no lo entiendo...

YoonGi suspiró, cansado.

—Las personas duermen juntas por muchas razones, JiMin —se acomodó para estar más cómodo, acurrucándose más y mirando la pared enfrente de él—. Normalmente es porque se quieren, pero esta vez... bueno, que dos personas estén en una cama es algo íntimo, pero tu y yo no estamos en ese contexto, sólo estás aquí porque me siento culpable dejándote en el sofá.

YoonGi se calló. Se había sentido un poco raro después de decir todo eso, pero no estaba seguro de por qué.

—Está bien, Hyung —dijo JiMin.

El pelinegro de repente comenzó a sentirse incómodo, el silencio reinó por completo y por ese segundo, esperaba que JiMin sacara otro tema o preguntara otra cosa... pero aquello no llegó, JiMin sólo le dio la espalda a YoonGi porque no quería seguir molestando.

—Buenas noches, YoonGi Hyung.

Y se apagó.

Sin escuchar que YoonGi también le había deseado buenas noches.

How To Train Your Robot | myg + pjmWhere stories live. Discover now