One Shots {Larry Stylinson}

24. "Friends"

- Se que te sientes un poco solo bebé, pero aún eres joven y puedes conocer al hombre de tu vida más rápido de lo que esperas – Louis acaricio los rizos de su amigo y lo acuno en su pecho como acostumbraban desde pequeños - Además siempre me tendrás a mí, solo tienes que llamarme y estaré ahí para ti –

- Lo sé y por eso te amo tanto Lou – Murmuro con nostalgia restregando su nariz en el pecho del castaño quien sonrío ante lo tierno que era su mejor amigo.

- Yo también te amo pequeño, por eso es que quiero que consideres muy bien lo que harás –

- Lo pensare muy bien Lou, es solo que deseo tanto tener un bebé creciendo en mi vientre, no me importa si debo hacerlo solo. Sabes que siempre he querido ser padre y disfrutar de la experiencia de estar embarazado – Comentó con ilusión acariciando su pancita e inflándola un poco a propósito.

- Estoy seguro de que tu sueño se cumplirá cariño y yo seré el mejor tío de todos, tú serás el papá gruñón y yo seré el tío genial que lo lleva de campamento o a jugar fútbol – Harry rió con entusiasmo y se envolvió aún más en los brazos del mayor.

- Eso suena como el plan perfecto –

Un año había pasado desde esa significativa conversación y el rizado seguía sin avanzar nada, no había conocido a nadie que valiera la pena y cada segundo consideraba más la idea de someterse a una inseminacion artificial.

Pero últimamente una idea aún más loca cruzaba por su mente y aunque trataba de eliminarla siempre volvía a ocupar sus pensamientos. Cada vez que veía a su mejor amigo quería proponerle la idea de que fuese el padre de su hijo, no como una relación seria pero sí que fuese él quien lo embarazara.

Louis sería el candidato perfecto, era muy guapo, confiaba a profundidad en el y su bebé saldría muy lindo si pensaba en los genes de ambos combinándose, pero cada vez que recordaba que el mayor no le apetecía formar familia o al menos no ahora esa idea quedaba descartada, seguramente se negaría por completo a su idea.

Así que no ayudaba mucho que su mejor amigo estuviese acariciando sus costados y besando su mejilla con dulzura mientras lo consolaba pues recién veían una película muy triste y el rizado se sentía muy emocional. Sabía que su relación con Louis no era muy común, no todos los amigos eran así de cercanos y tan cariñosos. Parecía que no podían despegar sus manos el uno del otro, pero nunca le había parecido extraño o al menos hasta ahora.

Pues con ninguna de las parejas que había tenido fue tan apegado, a penas le gustaba que lo tocaran mucho pues se sentía empalagado, pero con Louis era todo lo contrario, siempre buscaba más y más del toque del mayor. Y así había sido desde niños, el mayor siempre lo había cuidado y lo había mimado.

Aún recordaba lo consentido que era con tan solo 8 años, a esa edad se había conocido con su mejor amigo y habían congeniado al instante, nunca había sido un niño caprichoso y de hecho nunca lo fue con otra persona que no fuese Louis. El ojiazul peinaba sus rizos cuando se lo pedía, le compraba todos los chocolates que quisiera, lo cargaba a todo lado cuando el ojiverde estaba demasiado cansado como para siquiera dar un paso, el hecho de que fueran vecinos facilitaba todo, Louis trepaba casi todas las noches a su cuarto y le cantaba hasta que se durmiera o simplemente le daba besitos tiernos en sus mejillas hasta que el sueño lo atrapara.

Sabía que el mayor se había perdido muchas cosas de su infancia, o al menos las había reemplazado por pasar tiempo con el. Aquellas tardes en donde la mayoría de niños de 11 años jugaba al fútbol en el patio de su casa o salía a la piscina si estaban en verano, Louis las pasaba con un pequeño rizado entre sus brazos, mientras este le enseñaba a bailar. Harry nunca olvidaría cuanto le encantaba subir a su casita del árbol y practicar con el ojiazul todos los pasos que aprendía en su clase de baile. Prefería mil veces a Louis como su compañero de baile pues nunca le había gustado bailar con las niñas, eran demasiado gritonas y escandalosas. Además, siempre le había gustado sentirse seguro en los brazos de Louis mientras lo giraba acorde el le indicaba.