X

6.7K 427 26
                                    

-Luke-

-¡Bienvenido! -escuche una voz conocida mientras me giraba a verla.

Parada frente a mi estaba mi tía que corre hacia mí y chilla mientras me abraza.

Sonrió y le devuelvo amable el abrazo, pero después de unos minutos siento que se está pasando un poco...

-Madre, déjalo ya, lo estás asfixiando no se irá -habla una voz burlona detrás mío.

Ella me suelta y yo giro a ver la sonrisa que me ofrece Ashton.

-Hola Ashton -logro decir mientras le tiendo una mano.

-¿qué tal pequeño hemmings? -dice mientras me jala y me da un abrazo y unas palmadas en la espalda.

Nos separamos y el me ayuda con mis maletas mientas salimos del aeropuerto.

Mientras vamos de camino a casa mi tía no para de hablar y de vez en cuando hacerme una que otra pregunta hacerca de mi familia.

Le comento que mi madre estuvo apunto de no dejarme ir, y se puso a llorar en el aeropuerto, ella me cuenta que le hizo algo igual cuando ella decidió irse a vivir a California junto a su esposo.

Dejamos el tema de lado ya que no quería hablar de él difunto marido y el padre de Ashton, ya que tenía menos de 2 años su fallecimiento.

En cuanto llegamos nos bajamos del auto y Ashton me ayudó a bajar mis cosas de la maletera del coche.

La casa era realmente no muy grande ni muy chica, perfecta diría yo, por lo menos tomando en cuenta el número de personas que la habitaban, y si a eso le sumamos mi estadía ahora éramos 3.

Entramos y una sala nos recibía, caminábamos por el corredor y pasábamos la cocina y junto a esta las escaleras se hacía presentes, lo que me sorprendió fue que a un lado de estas había una puerta, Ashton me indico que las habitaciones estaban arriba y me guió a la mía, dejó mis cosas allí y me dejó solo para que me familiarizara con mi nuevo "espacio".

Me moví por la habitación viendo todo y tocando a mi paso.

Una cama, un gavetero, un estante donde seguramente pondría los poco libros que traje conmigo.

Había una ventana en un costado junto con un espacio donde estaba metida que me dejaba sentarme (no recuerdo cómo se llama, pero espero hayan entendido Lol )

Me acerque a abrir esta y me topé con la vista de la calle a un costado de allí y el cielo despejado.

Me levanté y fui en busca de Ashton, con el cielo así hoy las estrellas serían visibles pero lamentablemente no traje mi telescopio y quería preguntarle si el tenía uno.

Baje las escaleras y escuche ruidos de lo que parecía ser la puerta a un lado de estas.

Abrí y para mi sorpresa unas escaleras se presentaron frente a mi, baje despacio y estás daban a un sótano, debí imaginarlo...

Allí se encontraba Ashton en un cojín mullido frente a un plasma que dejaba ver un videojuego, el cual supuse Ashton juegaba pero entonces me sorprendió hablando.

-No... no espera, acaba de bajar... si, ajá... jódete Michael...- dijo mientras reía, entonces se quitó una especie de diadema con un micrófono, que hasta ese momento notaba, dejó a un lado el control y se giró a verme.

-¿qué pasa primo? -dijo mientas sonreía -¿te gusta? -volvio a hablar señalando el lugar.

Mire la pequeña habitación donde las paredes de madera se cubrían por posters de bandas, videojuegos y varias estanterías con trofeos y otras cosas, luego un sofá y frente a este, dos almohadas mullidas, de las cuales Ashton ocupaba una.

-Es... genial -dije sin saber que más decir.

-Lo se, es el espacio de Ashton, aunque podemos compartir -dijo haciéndome señas para que me acercara.

Me señaló el otro mueble mullido y tome asiento.

-¿Cómo lo conseguiste? -pregunte mientras veía la pantalla y trataba de recordar el nombre de aquel videojuego en pausa.

-Bueno, cuando mi papá vivía este sótano era el lugar donde guardaba las herramientas y cosas así, pero después de su muerte mi madre decidió dar todo lo que estaba aquí, y solo se quedó con algunas cosas, el lugar quedó desocupado y luego de un poco de chantaje emocional, taran, estamos aquí -dijo abriendo los brazos para señalar el lugar.

Me reí un poco por su expresión al decirlo.

-y bien, ¿qué quieres jugar? -dijo tendiendome un control.

-¿De casualidad tienes... FIFA? -dije tomando el control y el giro rápidamente a verme con cara de '¿me estas jodiendo?' -¿qué? -dije alzando los hombros -ok, veamos que tienes -dije mientras me estiraba a ver unos juegos apilados en la mesa al frente de nosotros.

Después de casi toda la tarde jugando videojuegos con Ashton tuvimos que levantarnos he ir a comer por qué sino la madre de Ashton nos mataría o bajaría a por nosotros y no de muy buena forma, era algo que me recordaba a mi madre.

Señora Liz, no es fácil de olvidar...

Después de comer y platicar un poco más con mi tía, decidí subir a arreglar mi ropa, el cielo ya estaba oscureciendo y decidí acercarme a la ventana, mire la luna despejada y cuando baje la mirada antes de cerrar la ventana me pareció ver a alguien pasar por allí, traía una capucha en la cabeza que no me permitía ver su rostro, y una sudadera grande que tampoco me permitió definir si era un chico o una chica.

Me asome un poco más y entonces cuando se detuvo en la esquina de la calle la puerta del cuarto se abrió y  yo me gire un poco exaltado a ver.

Se trataba de Ashton quien se reargo en el marco de la puerta y me regaló una sonrisa, aunque pude distinguir que está era un poco forzada.

Regresé la vista rápidamente a la calle pero la persona había desaparecido, me quedé buscándola con la mirada pero una voz llamo mi atención.

-¿qué miras? -dijo acercándose.

-Nada -conteste rápidamente, no quería que me tratara de loco, y prefería dejar pasar lo anterior.

El asintió y se dirigió a la cama para tomar asiento.

-Oye, estuve hablando con Jake, y me dijo que algo había pasado, aunque no me dio detalles, solo quería saber...

-No, porfavor -dije mirándolo serio, e interrumpiendolo.

-Pero...

-Porfavor, no quiero hablar de eso, vine aquí para empezar de cero, acabo de llegar y no quiero volver a lo mismo -dije mirando denuevo a la ventana.

-Esta bien, pero cuando quieras hablar, sabes que somos amigos, familia, no te presionare, si me buscas sabes dónde estoy- dijo antes de salir.

Mire la puerta y volvi la vista a la ventana antes de cerrarla.

Suspiré y me recosté en la cama mientras el sueño y cansancio del viaje me cobraba factura.

El Nerd.Where stories live. Discover now