El Nerd.

XXIX

-Valery-

Me encuentro justamente en el día en que menos quería estar.

Los adornos en la escuela me hacen querer salir huyendo de ahí, pero tengo una misión que completar antes de correr fuera.

Muchos chicos van de un lado a otro viendo las decoraciones y el evento que se realizará hoy para el día de las madres.

Gracias a dios no soy del comité de alumnos, pobres imbéciles.

Las primeras clases transcurren normal, a excepción de que no hacemos nada, aunque pensándolo bien, yo nunca hago nada.

De clase en clase los alumnos que asisten son menos, y para el receso el día escolar a acabado, las madres empiezan a llegar y todos se preparan en el auditorio para el show que ofrecerá la escuela en este día de mierda especial.

No entiendo, si querían dar una sorpresa deberían haber contratado quien, y no puesto a un grupo de mocosos haciendo actos mediocres.

Bueno, después de todo no puedo burlarme en paz si yo he estado ayudando a uno de esos actos, pero tengo que admitir no tan mediocre.

La gente va llegando y para cuándo preciso en encontrar una silla todas se encuentran ocupadas he incluso hay gente de pie.

Tanta gente junta me da una sensación de repulsión, y peor aún cuando veo tanta señora menopausica sonriendo y fingiendo que sus errores son ahora un orgullo, vamos, seamos sinceros, la mayor parte de todos los jóvenes son productos de una vil noche de calentura prematura y otros tantos una pasada de copas, he incluso me atrevo a adivinar son parte del problema que amarro a muchas a una vida de mierda.

Aveces me preguntó que pensara cada mujer en este mundo para quedar embarazada de tanto niño estúpido, hoy en día no estamos para estar sobrepoblado la tierra con más escoria de la que ya hay.

Cuando veo a gente tan imbécil medito que si ellos fueron los espermas más astutos como abran estado los otros.

Talvez si hubiera más sexo oral sería más fácil evitar esto.

Y hablando de sexo, creo que eso me hace falta para quitarme de encima estos nervios de mierda.

Mientras camino saliendo de todo el montón de madres y algunos hijos alguien me toma del brazo y me jala hacia adentro de lo que parece ser un salón de mantenimiento, las ventanas están algunas empolvadas y por lo tanto no entra toda la luz del sol y la claridad es poca.

Dentro de todo ese desastre de cajas y otros utensilios está un chico alto, con la ropa que ya me parece familiar y con esa cabellera y ojos tan clichés pero aún así igual de atractivos.

-No...no puedo sa...salir, siento que so...son muchas personas, ¿y si... Si algo sale mal? ¿Si...s..se burlan de mi?...

Luke parece desesperado hablando sin parar y tartamudeando mientras camina de un lado a otro viendo a todos lados menos a mí.

Parece que tendrá un colapso si no se calma.

Tomo a Luke por los hombros y luego le propinó una buena cachetada para que deje de hiperventilarse, talvez es algo brusco pero que importa, no estuve trabajando con el todo este tiempo solo para que a la mera hora me diga que siempre no.

El se soba la parte afectada pero se ha calmado y ahora me ve con el ceño fruncido.

-¿Por qué hiciste eso?

-Parecía que en cualquier momento te daría un ataque al corazón si no respirabas -digo mientras me subo y bajo los hombros ante su mirada de reproche - Te diré algo, no perdí mi tiempo y aguante tus inseguridades y estupideces solo para que hoy te de un maldito ataque de pánico y mandes a la mierda todo mi esfuerzo y el tuyo, ¿Me has escuchado?, Saldrás aya afuera, irás detrás del escenario y esperarás tu turno para presentarte, luego saldrás, harás tu mierda de cantar y luego te sentirás orgulloso de no ser un maldito cerebrito cuatro ojos por una vez en tu maldita vida ¿Esta bien?