Adoración Secreta, libro 2 Bilogía Secretos, Borrador

Capítulo #24, Final

Canción: Tú Me Caíste del Cielo. Río Roma

¡Y, llegamos al capítulo final! #Theorella se despide ♥!

Muchísimas pero muchísimas gracias a las que me acompañaron hasta aquí, hasta el final, cuatro meses escribiéndoles sobre ellos y desde la perspectiva de Theo, es la primera vez que hago una novela completa donde solo narra el protagonista, no ha sido fácil créanme y si me preguntan no se si lo vuelva a hacer la verdad, prefiero escribir desde el punto de vista de las chicas jejeje, igual con Theo, no me sentí incómoda pero si sentí muchas veces que debía soltarse mas conmigo, igual como lo saben esta novela en un borrador y está sujeta a cambios y miles pero miles de correcciones cosa que a veces siento que algunas personitas no leen, por eso es muy normal que se encuentren miles o mas bien millones de errores, jajaja.

Algo que les quiero aclarar, si son de aquellas que me han leído mis otras historias saben que amo los finales felices así mis personajes pasen situaciones extremas, ellos encontrarán el camino a la felicidad. Lo ocurrido con Fiore, no fue crueldad, no, era una manera de demostrar que ser madre no es parir un hijo, no, es mucho mas que eso. Lo pensé mucho antes de pasar esa escena a la pc porque mis historias están resumidas en mi libreta secreta en donde plasmo estas, incluso consulté a mis Betas (quienes me ayudan con la corrección, incluso a mi preciosa, Nena), si incluía esa parte o la cambiaba, dos de ellas dijeron que si, que así debía quedar mi historia y no cambiarla por no herir los corazones de mis lectoras, y pues no,  no cambié nada, incluso el final, así quedó desde hace meses cuando la escribí en mi cuaderno ♥

¡¡¡Este final se lo dedico a todas, con todo mi amor, GRACIAS INFINITAS, que Dios las bendiga, las adoro, nos leemos en el epílogo!!! Y recuerden:

"Los tiempos de Dios son perfectos, seamos pacientes porque no hay mal que dure mil años ni cuerpo que lo aguante, mantengan esa Fe, brillando"

Kate ♥

 Cuando ella, mi luz de amor, mi Fiorella quedó embarazada tuve otra percepción de lo que implicaba convertirme en el padre de un ser y de un ángel tan puro como lo sería su madre, ella quien con las pulsaciones de sus latidos en cada beso que me regala era lo mejor de mi vida.
Cuando nos dieron la inesperada y repentina noticia  no tuve la mejor reacción que se supone un padre debería tener al enterarse de tan extraordinario y  nuevo acontecimiento, no lo hice entonces porque mi estado de vulnerabilidad por ella con nuestro hijo en su vientre aumentaba el doble de riesgo para ellos, y ese temor opacó por completo la felicidad del momento tras enterarnos de la buena nueva porqué tuve un mal palpito con nuestro pequeño, en ese momento si las cosas hubiesen sido de otra manera habría gritado como loco de felicidad extrema y absoluta,  pero el miedo por unos segundos detuvo la dicha de la majestuosa noticia, para mi desgracia, estuve en lo cierto, mi pesadilla se hizo realidad el día que mataron a nuestro pequeño bebé de once semanas, el día que su pequeño corazón dejó de latir dentro del vientre de mi mujer. Ese día nos cortaron la alegría de saber si sería un niño o una niña, nos dejaron con los brazos vacíos y con las ganas desmedidas de abrazar, besar, jugar y llenar de amor a ese ser que no llegó a nacer, lo peor y aun más terrible y que me heló la sangre por completo fue el hecho de que a mi ángel  le arrebataran la posibilidad de volver a concebir.

Ahora el panorama de tener un hijo mío, un hijo propio, me hacia sentir molesto, ¿por qué? Porque era de esa maldita mujer, era de Scarlet. 

Fiorella aun me mantenía abrazado, tal vez pensando que me encontraba mal o asombrado ante ese hecho, lo cierto era que yo estaba temblando, pero de rabia.