4. Viviendo Juntos

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Tiempo Cronológico ➡ Cuatro años antes del Epilogo.

No quiero al mundo, te quiero a ti…

Cuando Alec termino la secundaria decidió que no quería iniciar la universidad, aun.

Hablo con Jonathan Morgenster (Alec se pregunto porque todos en esa familia tenían diferentes apellidos) el chico había estado en muchos lugares y lo comprendió cuando le dijo que aun no estaba listo para la universidad, le ofreció hasta que viajaran juntos por un tiempo si eso le ayudaba.

Alec lo pensó mucho, lo hablo con sus padres (les costo mucho aceptar al principio), lo hablo con sus hermanos y lo hablo con su novio. Esa fue la primera vez que discutieron.

Sabía que la idea de viajar con otro hombre por un año le molestaba mucho a Magnus, pero quería que entendiera que era lo que necesitaba, alejarse de todo por un tiempo para aclararse así mismo.

La noche antes de que se fuera, Magnus le hizo el amor con tal delicadeza que por un minuto Alec podía imaginar su vida junto a el.

Durante cada semana de ese año llamo a su novio y a sus hermanos, no quería que ellos pensaran que los había dejado de lado, más su novio que últimamente estaba lleno de inseguridades, había tenido que jurarle muchas veces que el y Jonathan dormían en habitaciones separadas y que no le atraía en nada el chico.

Bueno, era cierto que el chico tenía una presencia imponente y que era muy atractivo, pero el amaba a su novio y por nada del mundo iba a dejarlo.

O engañarlo.

En el viaje de dio cuenta de que Jonathan era bisexual (lo cual significaba peligro para el), disfrutaba de la compañía de hombres y mujeres, incluso o había visto en cosas bastantes… subidas de tono.

Y cuando descubrió eso, se sorprendió al no sentir la necesidad de estar con el, pues en su vista el chico era únicamente el hermano de Clary, no podía verlo de una forma romántica ni nada.

Cuando volvieron su familia le había hecho toda una celebración, su hermanito lo había abrazado como si no lo hubiese visto en diez años en lugar de solo uno, se sorprendió de ver que Jace e Isabelle también lo abrasaban de esa forma.

-Alec, no vuelvas a irte, Isabelle estuvo cocinando y fue horrible- le rogo el rubio sacándole una carcajada.

-Quítate- Isabelle lo empujo para abrazarlo-. Por el ángel, no desaparezcas tanto tiempo, tenía que ser la responsable y eso no es lo mío.

-Ya volví, tranquila- la abrazo más fuerte y se dio cuenta de que en verdad los había extrañado.

-Tu novio esta en tu habitación- le susurro para que nadie más los escuchara, Alec se sonrojo y suspiro, en serio quería ver a Magnus.

-Iré a desempacar- informo al resto de la familia que solo asintieron mientras que Izzy le guiñaba un ojo.

Se apresuro a subir a su habitación, quería tanto abrazar y besar al moreno que parecía que corría hacía su cuarto cual desesperado. Cuando lo vio allí, sentado en su cama leyendo uno de sus libros sintió que el corazón iba a salírsele por la boca.

-Hola- su voz salió muy baja que pensó que no lo abría escuchado pero cuando lo vio levantar la vista, sintió escalofríos al toparse con esos ojos que había extrañado tanto.

-Alec.

Su novio se levantó y lo abrazo con fuerza, entre sus brazos Alec se sintió verdaderamente en casa, cuanto lo había anhelado, su voz acogedora, su cálido ser y el amor desbordando por sus ojos. No quería volver a separarse de el nunca más.

Secretos a voces (AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora