11. Venganza.

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(N/A: no quería hacer este capítulo así, pero creo que es necesario para que entiendan bien todo lo que pasó. después de este capítulo intentaré hacerlos como estaban destinados a ser)

Capítulo número once:

2 de octubre del 2029.

Escuela.

Nara James.

Confident de Demi Lovato comenzó a sonar en mis audífonos en el momento en que Andrew entró a la escuela y, honestamente, no podría haber elegido una mejor canción para ese momento yo mismo.

Tenía el cabello más liso y largo de lo que recordaba, también las pestañas más largas y los labios más rosados. Tenía ropa diferente a la que usaba normalmente: un jean ajustado y un suéter rosa.

¿Qué le había pasado en el día que estuve sin verlo?

Pero no era solo eso lo que lo hacía lucir mejor.

Era su actitud.

La manera en que entró confiado, sabiendo que se ganaría todas las miradas en ese lugar, fue lo que hizo que las chicas lo envidiarán y los chicos olvidarán completamente el bullying que le hicieron a Andrew por ser gay.

En vez de entrar cabizbajo, entró con la cabeza en alto, sintiéndose como el maldito rey de ese lugar.

En el momento en que mi sándwich a medio comer cayó al suelo, Bethania levantó la vista de su teléfono, mirándome confundida. Dirigió su mirada a donde yo estaba mirando, y abrió los labios sorprendida.

Andrew se posicionó a un lado de Aaron, un chico de su salón, y comenzó a hablarle de manera coqueta. Jugaba con su cabello y se acercaba mucho a ese niño.

Fruncí el ceño.

—¿Viste a Andrew?— dijo Chloe, quien había corrido hacia mí.

Connor llegó tras ella.

Suspiré— Sí, pero... no entiendo qué hace con ese niño— murmuré.

Chloe frunció los labios— Tú eres mil veces más lindo— dijo.

—No es eso, es que Aaron es un egocéntrico y James un amor— le recordó su gemelo.

Habían tantas personas rodeando a Aaron y a Andrew que ya no los podía ver.

Me levanté y, sin decir nada, me acerqué a el grupo de personas que rodeaban a mi novio.

—Quitense, ese que está ahí es mi novio— ordené, olvidando todos mis modales.

Todos se hicieron a un lado, y me senté a un lado de Andrew, tomándole la mano posesivamente.

—Hola, nené. ¿Viste el regalito que estaba en tu cuarto?— le sonreí.

Frunció el ceño y apartó su mano de la mía— ¿Hablas de la entrada que me regaló mi nuevo novio?

Mi sonrisa se fue al instante, dejando una expresión seria.

—¿Cómo dices que dijiste?

—Sí— abrazó a Aaron por los hombros—. Él no me dejará por la fea de mi prima— me guiñó un ojo.

No sé cómo, ni por qué, pero de alguna manera mi puño llegó al ojo de Aaron, y yo terminé en dirección.

∆∆∆

Meli.Where stories live. Discover now