Meli.

26. Amigos.

Capítulo número veintiséis: Amigos.

25 de marzo del 2031.

Bar.

—¿Cómo es estar en el Twitter de un famoso?— le pregunté a Shawn.

Se encogió de hombros y me tendió el teléfono.

—Velo tú mismo.

Sonreí complacida y comencé a bajar por sus notificaciones.

Shawn no parecía ser él mismo, pero esta vez no estaba borracho...

Levanté la vista del teléfono de Shawn y seguí su mirada, entonces entendí todo: estaba viendo a Niall.

-Niall no trajo a ninguna persona- observó esperanzado.

Lo miré, sintiéndome apenada.

En sus ojos se reflejaba lo mucho que extrañaba a Niall.

-Vino con Josh, pero él debe estar en el baño.

Cualquier pizca de sentimientos positivos se fue de la cara del canadiense.

-Oh...

Ví a un chico que llevaba una copa en cada mano y se dirigía a Niall.

-Él es Josh- señalé.

Me salí de Twitter y me metí en la cámara: eso tenía que quedar grabado.

Escupió la cerveza- ¿Él?

Asentí— Tú eres mejor— admiti.

Shawn negó con la cabeza varias veces, mostrándose abrumado- Yo me he acostado con él- murmuró.

Ladee la cabeza, confundida.

-Pero para acostarte con alguien tienen que estar casados, ¿no?

Asintió rápidamente sin prestarme atención- Sí, sí, Josh y yo nos casamos... ¿Cuánto tiempo llevan?

Me encogí de hombros e hice cálculos mentales.

-Algunos meses.

Se quedó con expresión neutra, pero pude ver cómo apretaba los puños.

Se mordió el labio.

—Quedate aquí, bebé— me pidió Shawn levantándose y dejando la cerveza en la mesa con tanta fuerza que algunas gotas cayeron en mi brazo.

Hice una mueca y lo ví dirigirse a Niall y Josh.

A mitad de camino - cuando yo ya estaba emocionada y preparada para grabar la pelea -, mi papá Liam paró a Shawn.

—¿Qué pasa?— le dijo al verlo alterado.

-Ese maldito idiota le fue infiel a mi pequeño duende- dijo con la voz temblorosa por la furia.

-Tú también le fuiste infiel- observó.

Sonreí. Eso me dolió hasta a mí.

-Sí, pero yo... Yo...- comenzó a llorar.

-Ven, hermano, todo está bien- lo tranquilizó mi padre guiandolo a la barra.

Hice una mueca, decepcionada.

Yo estaba esperando una pelea.

Bajé la cámara y ví el vídeo.

No había grabado nada debido a que estaba apuntando a otro lado del bar.

-Bueno, algún día aprenderás a grabar, pero vas bien- dijo Sarah a mis espaldas.

Me exalte. No sabía en qué momento había llegado ahí.