20. Hermoso.

44 9 58
                                    

Capítulo número veinte: Hermoso.

Especial por las 500 lecturas, el capítulo número veinte y el cumpleaños de Meli.

8 de octubre del 2030.

Carro de mis papás.

El primer pensamiento que tuve fue que había llegado a mi meta: había llegado hasta ese día sin volver a cortarme desde que Sarah habló conmigo.

Abrí los ojos adormilada y al instante me dí cuenta de que estaba en el carro de mis papás con mi cabeza en las piernas de Trisha.

Me enoje un poco porque últimamente todo el mundo me movía de mi lugar mientras yo dormía y entonces despertaba desorientada, pero recordé que ese día era mi cumpleaños número trece.

Chille y me senté en el asiento, sonriente, y Trisha se sobresaltó un poco.

—¡Soy una princesa y estoy de cumpleaños!— grité.

Mis papás voltearon su mirada y sonrieron.

—Feliz cumpleaños, hijo. Ahorita te felicitamos pero estoy siendo copiloto de Zayn y él está manejando, así que...— dijo Liam, viendo por el retrovisor cómo mi abuelita y yo nos abrazamos.

—Yo sí te puedo felicitar: feliz cumpleaños, Andrew. Te amo muchísimo... Ya son trece años viéndote crecer y convertirte en la preciosa persona que eres— me besó la frente—. Eres una niña muy valiente, Meli— murmuró en un tono de voz muy bajo.

Me estremecí y me mordí el labio— Te amo, abuelita.

Sonrió.

Me dí la vuelta, tomé mi tiara que estaba descansando sobre el asiento y me la coloqué, sonriente- Hoy soy la princesa- dije más bajo esta vez, y Trisha asintió, viéndome con una gran sonrisa en sus labios.

Miré a mi alrededor, curiosa, y Trisha negó con la cabeza- No puedes ver dónde estamos.

-¿Por qué?- fruncí el ceño.

Por lo que estaba viendo, nunca había estado en esas calles, ¿qué sentido tenía no dejarme ver si yo no sabía dónde estabamos?

-Es una sorpresa- dijo Zayn, conduciendo.

-Pero yo no conozco este lugar.

-Cuando estemos al frente, lo harás, créeme- intervino Liam.

Bufé y me levanté, y de alguna manera mágica me pase al asiento del copiloto y me senté en las piernas de Liam.

—Conociendolos, si no quieren que sepa a dónde vamos, trajeron una venda para los ojos, ¿no?— alce una ceja.

Liam sonrió y apoyó su barbilla en mi hombro- ¿Cómo lo supiste?

Sonreí complacida y espere mientras mi abuela le pasaba la venda a Liam y él me la ponía a mí.

-Oh, ¡feliz cumpleaños!- me felicitó abrazándome.

Tantee su cara, y le metí la mano en la boca sin querer.

Solté una risa y escondí mi cabeza en su pecho- Gracias, papá- murmuré.

Me quedé de esa manera, porque tenía sueño y Liam siempre ha sido tan grande como un osito y dormir en sus brazos es muy genial.

Él acariciaba mi panza, y después de un rato escuché que Zayn les pedía que dejarán de hablar para que yo pudiera dormir bien y entonces recordé cuando los trataba de mala manera y me sentí mal porque... ¡Son mis papás! Y entendí lo mucho que los amo y ellos me aman mí.

Meli.Where stories live. Discover now