Capítulo #7

2.8K 244 81
                                    

Me bajo en el suelo cuando estábamos adentro

Me baje la playera y me acomode mejor el pelo. Mire a mi alrededor y pude observar a varias chicas bailando o mejor dicho perreándole a chicos.

《Ella no ta' enamora' de mí no! no!

Pero le gusta como yo le doy. Si! Si!

Yo la pongo a volar

Cuando yo le doy besos

Pero no ta' enamora' de mí no! No!》

Decía la canción.

Al parecer aquí era puro perreo intenso y no cumbion loco como el que bails mi abuelito. Si él estuviera aquí estuviera golpeando al dj con su bastón para que pusiera la de "17 años, el listón de tu pelo o de la cómo te voy a olvidar" se quitaría la camisa y sacaría a mi abuela a bailar con él, tan solo de recordar todas mis navidades me dan ganas de tomar cloro. Yo ni siquiera sabía cómo bailar esa cosa a lo que le llaman perreo.

- ¿No quieres bailar morenita? --pregunta el estúpido de mi derecha.

- ¿Contigo? --lo mire con asco.

- ¿Quién más querría bailar contigo? -se burló.

-Ven acércate, ---le indique con la mano para se acercará. Él se acercó--- ¡NO! --- grité.

-Pendeja.

-No me hagas enojar. -lo mire con cara de "No me toques ando chida".

-Mira, a quí la que...

No pudo terminar porque alguien llego a interrumpir, mire mejor y era un chico de pelo negro y gracias al reflejo de las luces pude ver sus ojos color esmeralda. No pues este es europeo, se veía.

-¿Que pasa loco? -dijo chocando las palmas con Joel.

-¿Que onda papi?. -dijo Joel.

-Tus fiestas son lo más sin duda- me había equivocado, este por su acento pude ver que es Cubano.

El ojiverde por fin se dio cuenta de mi presencia.

Me miro de arriba abajo poniéndome incómoda. Detrás de el apareció una rubia y también me miro.

- ¿Y está quién es? ---pregunta con un tonito que me molesto y con un acentito estúpido de gringa.

-Está tiene nombre, me llamo ______. -le sonríe con hipocresía.

- ¿Ella ser tu nueva puta? ---pregunto a Joel. ---Porque tiene nombre de puta.

La sangre subió a mi cabeza. ¿Me acaba de llamar puta?

No cabe duda de que es tan puta que le tiene que andar llamando puta a otras para sentirse menos puta.

- ¿Qué dijiste pendeja? -me acerque más a ella.

- P-u-t-a. -me dijo en la cara con descaro

-Te deformare la cara que ni en cirugía se te arreglara. --dije por último y la tome de los pelos de elote que tenía para arrancárselos uno por uno.

También tomo los míos y empezó a jalarlos.

-¡PUTAZOS, PUTAZOS, PUTAZOS! -grito la gente.

Y aquí empieza una pelea entre una gringa y una mexicana.

Joel Pimiento Where stories live. Discover now