Capítulo 47

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[Joel Pimentel. ]

-Andale mi amor. -insistió por quinta vez petra. 

Me estaba cansando, no quería ir a esa estúpida boda, la maestra Sonia y yo no teníamos la mejor relación alumno-maestra, y sería raro e incómodo asistir. Pero tampoco es cómo su tuviera ganas de ir. 

-Porfavoooor. -alargó la o.

Rodee los ojos y suspire.

-Esta bien. 

-Por eso te amó. -me abrazó petra. 

Le regresé el abrazó, su perfume era asqueroso.

A lo lejos pude ver cómo mi morenita entraba a la cafetería. ¿Mi? Sonaba muy descarado de mi parte.

Esperen, no venia sola. 

Un chico de cabello negro venía tras ella, y al parecer venían riendo de un chiste qué el le había contado, quería ir y golpearlo para que se le borrara esa estúpida sonrisa. 

-No sabes cuánto te amó Joel. -dijo petra separándose de mí. 

-Qué bueno, me da gusto.

–Dime algo qué me llegué al corazón.-pidió. —La sangre. –dije sin darle importancia, no podía despegar mi mirada de __________ y su nuevo amigo. 

- ¿Qué tanto miras? -preguntó. 

Pa k kieres saber eso jaja saludos.

-Nada. -despegue mi mirada por unos segundos y mire a petra. -Oye, ¿todos están invitados? -le pregunte.

-Solo los alumnos de la maestra. -dijo. 

- ¿Emiliano es su alumno? -le pregunté.

Sabía qué Emiliano asistía a las mismas clases qué _________ y si la maestra Sonia era su alumno quería decir qué ella también. 

-Si. -asintió. 

Perfecto. 

Me paré de mi mesa y me dirigí hacía el de la mesa de _________. Petra venía detrás de mí. 

Cuándo llegué ________me miró mal y el vato se veía confundido. 

-Hola, ¿no me presentas a tu nuevo amigo? -le pregunté a _________.

-No. -dijo sería.

-Abiel Flores. -se presentó por sí solo ya qué la morena no lo quería hacer. 

¿Así qué Abiel? Muy marica a decir verdad. 

-Joel Pimentel. -me presenté. -¿Ustedes irán a la boda de la maestra Sonia? -les pregunté. 

Joel estaba confundido, no sabía a qué me refería, pero __________ si. Y al parecer no quería hablar sobre el tema.

- ¿Qué boda? -pregunto Abiel. 

-De nuestra maestra, se va a casar. -le dije. 

Abiel volteó a ver a __________ y está le devolvió la mirada. 

- ¿Tú vas a ir? -le preguntó Abiel. 

-No estoy segura. 

-Es parte de la calificación. -les dije. 

-No necesitó ir para sacar buena calificación. -me reto. 

-Eso crees tú. 

-Ni qué fuera ciertas personas. -me dijo.

-Hay te hablan petra. -volteé a ver a petra y está miró indignada. 

Luego se le pasaría. 

- ¿Y entonces? -le preguntó Abiel a _________.

-Luego hablamos. -se paró de su asiento y se fue corriendo hacía el jardín. 

Abiel iba ir detrás de ella pero lo detuve. 

-Dejala, ella se comporta así de loca. -le dije. -Yo soy el único qué puede controlarla. -le di una palmada en el hombro antes de salir detrás de ella.

Salí de la cafetería y mire hacia todos lados y nada, me adentré más al jardín. 

Mire un árbol de naranjas y ella estaba trepado arriba de el comiendo algo. 

Me acerqué más. 

–¿Qué haces aya arriba?–le pregunté.

–Comiendo mandarinas.

–Pero es un árbol de naranjas.

–Si, pero subí mis mandarinas. 

Esta chica, era imposible no reír se sus ocurrencias.

-Largo de mi vista...te doy 100 varos sí te largas de aquí. -me dijo. 

-Ni la cantidad más grande lograra qué me valla de aquí. -le dije. 

Me aventó un pedazo de mandarina a la cara. -Dije largo. -gritó. 

- ¡_____________! -grito alguien a nuestras espaldas. 

Me gire, Abiel y petra venían corriendo hacia nosotros. 

- ¿Qué estas haciendo _________? -preguntó el chico a la morena.

-Me estoy bañando. -le dijo está haciendo qué el peli negro riera. 

-Baja de ahí. -le dijo Abiel. 

Ella rodó los ojos y empezó a bajar. ¿Enserio? El sólo llegó y le dijo que bajara y ella cómo estúpida le hace caso. Maldito. 

La morena bajo del árbol pero al parecer no podía tocar el suelo. 

- ¡Ay no! Me da miedo. -dijo está. 

¿Entonces cómo mierda subió?

Intenté acercarme a ella para ayudarla pero el peli negro se me había adelantado. Bastardo. 

El la ayudo a bajar y yo cómo idiota me quede mirando. 

-Entonces...¿Quieres ir conmigo a esa dichosa boda? -le preguntó Abiel a mí morenita. 

Está lo miro por unos segundos, los cuales para mi se hacían eternos. Mierda, deja de mirarlo así. 

-Si. -está asintió encantada. 

No me caes mal Abiel, pero si fuera una paloma serias la primera persona en la qué cagaria. 

Tanto pedo aquí que mejor le pongo Rebbeca a la rayis alv v:

Joel Pimiento Where stories live. Discover now