The Chains. (Camren)

Capitulo 37

Omnisciente.

Entrar por la ventana de la mansión no era la mejor idea de su vida, sabiendo que en cualquier momento podía caerse, pero si valía la pena por estar con su persona favorita en el mundo.

Camila había discutido una vez mas con su papá por el tema de los homosexuales, al parecer en cada comida el hombre sacaría el tema provocando la rabia e ira de la morena, pero esta vez fue fuerte, ella estuvo a punto de gritarle que amaba a una mujer pero Sofía intervino antes de que su hermana cometiera esa locura, su hermana comprendía que decir eso en medio de una pelea solo traería un gran alboroto que decirlo con calma.

Camila subió a su habitación esa noche frustrada, triste, cansada de todo lo que pasaba, la única persona que la podía ayudar era su novia, Lauren. La misma que ahora logro entrar por la ventana sin morir en el intento.

Lauren camino despacio tomando a Camila en sus brazos dándole todo el apoyo que la morena necesitaba, Camila  se engancho a ella como un Koala, apoyo su cabeza en el cuello de su novia para asi por fin sentir paz y tranquilidad, Lauren era su lugar seguro, sabía que a su lado nada le pasaría todo estaría bien y podrían seguir en la burbuja que estaban viviendo estos cuatro meses que llevaban juntas.

-Ya no lo aguanto, de verdad no lo soporto.- Camila se separa para mirar sus ojos verdes, Lauren asintió tomando asiento en la orilla de la cama.

-Debemos buscar una solución a esto amor, no podemos seguir así, no puedo seguir viendo como cada vez terminas mal por algún comentario de él.- con una mano acaricia su mejilla.

-Es que llega un punto en que ya no lo soporto, de verdad es desesperante.- suspira.

-Hablare con papá mañana temprano.- Lauren besa su mejilla. -Y en la noche le diremos a Alejandro.- dice totalmente decidida.

-¿No encuentras muy precipitado?- Camila temía por ambas, mas por Lauren que por ella.

-No lo encuentro nada, estoy cansada de tener que estar contigo a puras mentiras, de verte llorar, de que él sea un intolerante de mierda, solo quiero estar contigo, así que hablare con papá.- Besa su mejilla.

-Iré contigo.- Camila sonríe por primera vez desde que Lauren llego. -Haremos esto juntas, si queremos luchar lo haremos juntas.- unieron sus labios en un beso lleno de ternura.

Se separaron para mirarse a los ojos, Camila sonrió coqueta cuando su mano viajo hasta la chaqueta de su novia la lanzó a un lado de la habitación.

-Amor...- Lauren agachó la cara avergonzada. 

-Ya entendí.- beso sus labios sonriendo. -Solo durmamos juntas esta noche.-

-Esta bien cielo.- Camila se puso de pie no sin antes volver a darle un beso a su novia.

*
*

La mañana demostraba lo que Lauren sentía, el cielo parcialmente despejado con las nubes adornando lo que parecía un día lleno de libertad.

El viento corría levemente dejando que el calor no fuera tan pesado. Ambas mujeres caminaban tomadas de la mano hacia la entrada de la mansión Jauregui.

Lauren había coordinado con su papá para hablar, solo rogaba que el hombre entendiera que amaba a Camila y que ella estaba dispuesta a todo con total de estar junto a ella, pero necesitaba a su padre porque sabía que el podría lograr convencer a Alejandro, también que su papá la podría defender a muerte en las peores situaciones. Solo necesitaba su apoyo.

-Papá.- Lauren lo abrazo, siendo correspondida de inmediato por el hombre.

-Te estaba esperando.- le sonríe, dirige su vista a la chica a su lado. -¿Camila?- dice confundido. -Pensé que ya no estabas bajo la protección de mi hija.- ahora las mira a ambas con total confusión. Camila estaba demasiado nerviosa pero Lauren tomo su mano dándole la confianza que necesitaba.

-Sobre eso queríamos hablar contigo.- el hombre asiente ante las palabras de su hija invitando a ambas a tomar asiento en el living.

Clara apareció con los vasos de jugo de natural, a petición de Lauren que le había pedido que estuviera presente esa mañana, su mamá era de crucial importancia en este momento, si ella estaba de su lado aun tenían posibilidades de enfrentar a Alejandro sin la ayuda de su papá, por lo que la presencia de la mujer que le dio la vida era fundamental esa mañana.

-Se que no entiendes nada, créeme que hasta para mí es raro creer que esto es real.- Lauren hablaba firme, segura de sus palabras y acciones, no debía temer porque sabía que su padre solo aceptaría si ella estaba decidida. -Pero así son los caminos de la vida.- Mike asiente mirando las manos entrelazadas de las dos chicas. -Estoy enamorada papá, amo a Camila con mas que mi propia vida, por esta razón vengo a contarte que yo y ella estamos juntas, llevamos unos meses juntas y nos amamos.- Mike sonrío por un momento pero luego volvió su rostro serio.

-Sabes que puede pasar si Alejandro se entera, el te lo dijo Lauren.- el tono de Mike era mas de preocupación, el amaba a su hija y no quería que nada malo le pasara.

-Lo se papá, lo sabemos.- hace una pausa. -Por eso estamos aquí, porque queremos decirle a Alejandro sobre nosotras, pero para eso necesitamos apoyo, de tu ayuda.- lo mira a los ojos. -Se que puede ser una locura pero papá quiero un futuro con Camila, la amo, pero no quiero un futuro donde tengamos que escondernos por el miedo.- 

-Señor Jauregui.- Camila habla por fin. -Conozco a papá, es un hombre muy terco pero si algo se que usted es el único que papá de verdad temé, por eso necesitamos su apoyo.- Mike asiente. -No quiero que terminemos en tragedia, conozco las amenazas de mi padre hacía Lauren, pero el debe entender que esto es amor y usted es la única persona que puede lograr eso, porque ni mi mamá ha podido hacerle entender que el amar a alguien de tu mismo sexo no es un error.- termina sus palabras ante la sonrisa de Lauren. 

-¿Que dices papá?- Lauren lo miro con suplica.

-Tienen mi apoyo, pero Lauren debemos tener un plan B si esto no resulta.- Lauren asiente sonriente, mientras Camila veía absolutamente todo con un mejor futuro.

-Había pensando en eso.- toma un respiro. -En los peores de los casos tendremos que irnos lejos, el plan es irme a mi cabaña con Camila por unos días, esperar a que el se calme y volver.-

-¿Y si no se calma?- Pregunta su madre ahora con preocupación.

-Me iré con Camila a California, seguiré trabajando contigo pero desde allá, luego nos moveremos a Brasil para terminar en Australia.- explica a sus padres. -En Australia no tendrá opción de rastreo ya que es la zona que solo los Jauregui manejamos.- explica. -Nos quedaremos ahí hasta que las cosas se calmen, cualquier cosa papá tendré que volver.-

-¿Si el las llegará a encontrar?-

-No lo hará, tengo fe de que no será así papá.- Lauren sonríe triunfante. -Pero esperemos que no tengamos que poner un pie afuera de Miami.-

-¿Sinuh sabe sobre esto?- Preguntó Mike.

-No, pero lo sospecha bastante.- hablo Doña Clara. -Al parecer ambas no son muy cuidadosas cuando les baja el amor en la mansión Cabello, me contó que encontró tu camiseta entre la ropa de Camila así que eso fue suficiente evidencia.- Camila estaba roja de la verguenza, Lauren reía bajo.

-¿Que dice sobre esto?- ahora fue Lauren la que pregunto.

-Lo apoya, pero como todos tiene miedo a la reacción de Alejandro.-

-Su reacción es el problema.- Lauren suspira. -Si tan solo fuera como tu papá.-

-Créeme que a mi tambien me costo aceptar tus preferencias, pero tenga fe y confianza de que el las aceptara, al final del día ama a su hija mas que nada y tu Lauren eres casi como una hija para él, asi que relajense y confien mas en lo positivo que en lo negativo.- ambas asiente, viendo como el hombre se ponía de pie. -Lauren necesito hablar contigo en mi oficina.- la chica asiente.

Camila le sonríe a su suegro para ver como los dos Jauregui desaparecían del lugar. Al menos el futuro tenia esperanza desde ahora.

*
*