DON'T BELIEVE [JIHAN]

22.Final.

Jeonghan se removió en la cama, tapó sus oídos ignorando los golpes y cuando la voz gritó tan fuerte no tuvo otra reacción que abrir rápidamente los ojos, su respiración comenzaba a acomplejarse y tapaba su boca para no ser escuchado por Jisoo, pero la simple distorsión de su respiración y de los gritos lo despertó tan rápido.

—Jeonghan— se sentó en la cama en fracciones de segundos y tomó el rostro de su pareja en sus manos, Jeonghan lo miró a los ojos y lo único que podía percibir Jisoo en ellos era terror. —Vamos amor, no pasará nada, todo estará bien—Se levantó de la cama y tomó la cintura de Jeonghan para llevarlo consigo, a su lado y que no se separaran.

— ¡Jisoo!— Soonyoung bajó las escaleras y se topó con las dos familiares figuras de su hermano y Jisoo, suspiró levemente y luego vio hasta la puerta— Jisoo llama la policía, dile que eres del caso de Jeonghan, vendrán rápido— Jisoo retrocedió y e hizo un amago de sostener a Jeonghan y llevarlo consigo—No, él se vendrá conmigo—

Los golpes de la puerta se escuchaba mucho más fuertes que antes, y la manija empezaba a ser manipulada, intentando de alguna manera ser abierta por fuera.

— ¡Voy a romper la maldita puerta si no la abres ahora!— Grita Hyojin y Jeonghan tiembla en su lugar.

Jisoo inspecciona brevemente a Jeonghan y luego suelta su mano, corre a la habitación y marca a la policía.

—Ven— Soonyoung extiende su mano y Jeonghan la sostiene fuertemente— Abriré la puerta— le habla más bajo que los últimos portazos que se escuchaban.

A Jeonghan le dolía el pecho, esa sensación de quemarle complicaba más su respiración que luchaba por controlar y después de un gesto Soonyoung simplemente quitó el seguro y la puerta se abrió.

Hyojin tenía la cara enrojecida y su cuerpo subía y bajaba en una respiración fuerte y constante, entró a la casa y Junhui, quien andaba cabizbajo, la siguió como perro al amo.

— ¡¿Dónde está el chico­?!—Se dirigió a Jeonghan, siendo para él la pregunta. — ¡Responde, que sabes hablar!— Jeonghan asustado se encogió y bajó la vista negando la cabeza levemente, Soonyoung lo podía sentir temblar detrás de él.

Desesperada caminó hasta donde el, ignorando a Soonyoung y agarró a su hijo menor del cabello jalándolo lejos y sosteniéndolo de esa manera frente a ella, Junhui quien continuaba apartado pero consiente de la situación movió su vista al suelo para ignorar lo que pasaba y Soonyoung quien no le dio tiempo de reaccionar antes de que apartaran a Jeonghan de él.

—Soy tu madre y a mí me miras a la cara cuando de hablo— susurró en su cara, jaló su cabello y lo pegó más a ella hablándole en el oído— ¿Dónde está­?, no me hagas buscarlo—

—Mamá, tienes que parar— Soonyoung intentó sonar estable pero su voz salía tartamudéante, Hyojin tenía a Jeonghan es sus manos y cualquier error de parte de él podía costarle algo.

—Él es mi hijo y está bajo mi custodia, puedo hacer lo que quiera con el—

—Es cierto que es su hijo, señora Yoon, pero está casado y ya no está bajo su custodia— Jisoo entró a la sala con sus manos en el bolsillo y cabeza en alto.

—Mira quien tenemos aquí— Hyojin soltó el cabello de Jeonghan dejándolo con un nudo inexplicable y despeinado, este corrió junto a Soonyoung y le echó un vistazo a Jun que seguía inmóvil en una esquina, que le hizo Hyojin al pobre de Junhui para tenerlo así.

—Señora Hyojin, pida disculpas y váyanse antes de arrepentirse— Jisoo habló fuertemente.

La cara de Hyojin se tornó asqueada, quien se creía el, ella era su madre y tenía total derecho en Jeonghan, o su corta mentalidad creía eso.