DON'T BELIEVE [JIHAN]

Epílogo

Tan exhausto, habían planeado su boda todo un mes, llenos de tensión, pero por fin había acabado, todos los invitados de habían marchado y solo quedaban la pareja de esposos, la madre de Jisoo y Soonyoung, esta vez Hansol se había marchado con Seungkwan a casa de Jeonghan y Jisoo, donde se hospedaban una breve temporada antes de volver a los Estados Unidos junto con la señora Hong.

—Mis queridos— La madre de Jisoo abrazó a sus dos enamorados polluelos— Tienen que irse ya a descansar— Dijo al separarse. —Soonyoung y yo cerraremos—

El nombrado al escuchar ser mencionado levantó su cabeza de la mesa de aperitivos, migajas de alfajores de desbordaban de su repleta boca, mientras sostenía un brownie en una mano y una copa de vino tinto en la otra.

—Mmm— Asintió apoyando el comentario de la madre.

Jisoo levantó una de las comisuras de sus labios y le agradeció a su madre, Jeonghan hizo el mismo proceso y salieron del gran recinto de celebraciones de bodas, un taxi de confianza los llevo a un lujoso Hotel a 45 minutos del lugar, a pesar de haber tantos hoteles aún más cerca debido a que los recién casados siempre optaban por primero ir a un hotel a pasar la noche y al día siguiente marcharse a su luna de miel si así lo deseaban, pero este quedaba mucho más cerca del muelle, irían en Yate a la isla Jeju, y es que Jisoo se había obsesionado con ver la Cascada de Cheonjaeyeon desde que le preguntaron adónde quería ir.

—Estoy tan cansado que podría dormirme sobre un camino de rocas calientes— Dijo cuando ambos se sentaron en el coche, pasando Jisoo su mano por los hombros de su esposo y Jeonghan reposando un brazo en el muslo del otro.

Jeonghan lo miró con rareza.

—Ya sabes, esas negras lisas que sirven de curación— Dijo entre comillas.

Jeonghan soltó una carcajada sin abrir la boca y luego acomodó su cabeza en el cómodo hombro de Jisoo.

—No puedes estar cansado cuando lleguemos— Comentó ligeramente bajo.

Jisoo pasó su mano por el cabello de Jeonghan y esbozó una sonrisa sin la necesidad de que Jeonghan se diera cuenta.

— ¿Y eso debido a que?— Cuestionó cerrando sus ojos con tono travieso.

—B-bueno...— Han se puso nervioso y jugó con el anillo de matrimonio en su dedo anular.

— ¿Quieres que tenga sexo contigo?— Jisoo habló en un tono para nada personal.

Jeonghan se separó de repente y le echó un ojo al conductor, pero este no parecía inmutarse en la conversación que mantenían detrás, después vio a Jisoo con odio y este solo rio y le pegó un mano plazo en el pecho por venganza.

—Auch— Sollozó

—Socarrón— dijo entre dientes y se acomodó nuevamente en el hombro.

Jisoo lo abrazó pasando un brazo por sus hombros y lo estrujó.

—Amo cuando tus mejillas se tornan de color rojo, amo más saber que eso lo causo yo— Amaba al Jisoo sin filtro, en realidad, amaba a todos los "Jisoos"

Esperando tranquilamente en el pecho de Jisoo y se relajó intentando descansar un poco antes de llegar y olvidando sus nervios, sabía que algo ocurriría esa noche, y no era el único, Jisoo pensaba igual.

El hotel era hermoso, decorado con paredes de mármol dándole un vibra moderna, su piso no era del todo grande pero sí que consistía con numerosas decoraciones colocadas en el lugar perfecto para darle esa sensación de perfección al lugar, pasando de la sala a la cocina, echándole un ojo a todo, llegó hasta la habitación, la cama era gigante, siendo el centro de atención, y a cada lado había unas mesitas de madera blanca vintage. Con cortinas color beige que cubrían la ventana completamente, y un pequeño candelabro con luz agradablemente leve hacia la habitación un lugar perfecto para él.