Esencia Rusa

CAPITULO 1

Canción: gangsta's paradise - coolio

Entro en aquella cafetería, escuchando la peor noticia de la semana, me había quedado sin empleo, la razón era que las ventas habían sido nulas en los últimos dos meses y esto había sido el detonante para que el señor Leny cerrará el negocio de toda su vida,el cual había funcionado por cerca de diez años en una de las calles de Seattle.

¿Que vas a hacer Rossalie? Oh Dios, si hay algo que no esperan son las rentas y aunque maneje un precio bajo en el apartamento en el que me quedo, la regla de pagar a tiempo sigue en pie.

Tampoco quiero abusar de Melanie, ella es la mujer que me crió y que me ha enseñado los más importante de la vida, es como mi madre, porque mi verdadera progenitora me abandonó en un orfanato cuando era sólo una bebé.

Melanie se enamoró de la pequeña niña de ojos azules verdosos que dejaron en la entrada, me educo como si fuera su hija, y cuando cumplí diesiocho me dio su apellido,Hilton, y no es el de los hoteles.

Pero cuando eres huérfana, nadie te adopta y cumples diesiocho, no te queda de otra que abandonar el orfanato. Mi "nana" como le digo de cariño, me ofreció quedarme junto a ella y su esposo Ron, pero no quería incomodarlos y más cuando tienen cuatro hijos. Así que opte por conseguir un empleo por mi cuenta y fue cuando empecé en esta cafetería, tres años trabajando y ahora mi única oportunidad se cierra al igual que sus puertas.

- ¿Porque no miras el periódico Ross? Tal vez salga algún empleo allí - me dice Erica mi única amiga, ella también es huérfana al igual que yo, a diferencia que ella escapo del orfanato, por irse con un chico de diesisiete antes de que ella tuviera la edad legal, ahora viven en la casa de él, aunque más que casa, es un garaje.

- Lo intentaré - digo tomando el periódico de una de las mesas de la cafetería.

- Chicas es hora de cerrar el negocio - Leny lo dice con nostalgia, se cuán difícil es para él esto, es un hombre trabajador y un buen jefe.

- Lo lamento tanto Leny.

- Yo lamento que no tengas ya empleo Ross.

- Bueno.. acá dice que necesitan una chica para un almacén de ropa de dama, podría funcionar - me encojo de hombros.

- Buena suerte con ello - mi amiga me da un abrazo. - Nos vemos más tarde Ross, tengo que pagar el semestre de la Universidad.

Mi sueño es estudiar botanica, sólo hice una pequeña carrera de secretariado, pero eso no era lo mío, amo las flores, son hermosas, mis favoritas son las rosas amarillas.

- Vale Erica, yo intentaré no morir en el intento.

- Te aseguro que te contratarán en cualquier sitio eres muy trabajadora.

- Gracias Leny échare de menos este lugar.

Una vez salgo de mi antiguo trabajo, recorro las calles de Seattle hasta donde esta la dirección del almacén.

- ¿Cuánto por la noche linda? - un asqueroso hombre para su auto enfrente, odio que lo hagan, a donde vaya me saludan con cosas vulgares, no soy mercancía para que hablen acerca mío de esa forma.

Me dan asco, ojalá existiera un hombre que me mirara de diferente forma. Pero todos los idiotas piensan en sexo.

¿Dónde quedo el romanticismo? En los libros Ross - Responde mi pequeño subconsiente.

Muy bien hemos llegado Ross- me digo así misma, veo atraves de la vitrina unas cuantas chicas acomodando maniquíes, así que entro y el sonido de una pequeña alarma resuena en el almacén.