CAPITULO 28

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Canción: Antes de Ti - Mon Laferte
(recomendado por triniq3)

- Ross, quiero un helado de chocolate.

- Ya has comido varios dulces Leah.

Estamos en un centro comercial y Dimitri cumple todos los antojos de Leah, parecen dos niños pequeños entrando a cuanta tienda de golosinas encuentran abierta.

- Yo te compraré el helado - responde el ruso.

- Nada de eso, no le des más dulce, vuelve hiperactivos a los niños - frunzo el ceño y me cruzo de brazos.

- Sólo será un helado, te compraré uno a ti.

- Yo no soy una niña a la que compras con un helado.

- Que difícil eres - rueda los ojos-. ¿Que quieres entonces? ¿Una cartera nueva o un perrito? - ríe con su propio comentario.

- A mi no me interesan esas cosas.

- Ross ¿mi vestido para la boda será rosa o blanco?

- No sé, ¿quieres que lo escojamos juntas?

- Si - asiente con su cabezita.

- Esta bien miraremos en un almacén de novias.

- ¿Qué hay del helado? - pregunta el ruso.

- Nada de helado - lo señalo con el dedo.

La boda, esta próxima, tanto Emma como Erica me han ayudado con la decoración, Emma desconocía que Harry era agente del FBI, se hicieron amigos en la cafetería, seguro con la única opción de sacarle información.

Estas semanas he estado tranquila, Melanie aún se recupera del shock del secuestro y se ofreció a ayudarme también con lo de las mesas y la recepción.

Mi vestido de novia aún no lo escojo, no quiero nada llamativo, quiero algo sencillo, algo hermoso y que me haga recordar el día más feliz de mi vida.

- Puedes escoger el vestido de novia si quieres - el ruso me toma de la cintura y me da un beso en la mejilla-. O puedo traer uno de Francia si es necesario.

- Ya te he dicho que no es necesario - Dimitri es un necio, hay cientos de almacenes en Seattle de novias y él insiste es traer un vestido costoso de otro lugar.

- Si cambias de opinión me dices - sonríe y me toma de la mano mientras entramos a un almacén junto a Leah.

El almacén esta repleto de vestidos de novia y lo único que hace el ruso es sentarse en una de las sillas de la esquina del lugar.

- ¿En que podemos ayudarla señora? - me dice una de las encargadas.

- Busco un vestido de niña para una boda, ella será la que lleve las argollas - Leah sonríe cada vez que recuerda que las va a llavar.

- ¿De que color es el vestido de la novia?

- Bueno yo aún no lo escojo - me encojo de hombros.

- Bueno es importante saber que color llevará.

- No he visto modelos aún.

- ¿Y el novio que color usará?

- Azul mediterráneo - contesta el ruso.

- ¿Él es su prometido?

- Soy su esposo, renovaremos nuestro matrimonio.

- Que romántico, pocas parejas lo hacen.

Esencia RusaWhere stories live. Discover now