Esencia Rusa

CAPITULO 34

Cancion: Daft Punk  - Instant Crush

Nuestros labios vuelven a juntarse, mis manos se deslizan por su cabello rubio mientras me sube encima de él, llevándome hasta el mueble de la sala.

- ¿Sabes que a las mujeres embarazadas se les despierta más su deseo sexual en ese estado? las hormonas están al tope.

- ¿Entonces serás mi juguete sexual? – sonrió y vuelvo a besarlo, sintiendo sus caricias, no apoya su cuerpo totalmente en el mío,esta manteniendo una distancia prudente entre los dos, una de sus manos se desliza por la seda de mi vestido llegando al borde de mis bragas. Su dedo traza caricias cerca de mi zona intima, mientras me retuerzo en el mueble.

- Estás tan húmeda, tan mía – susurra a la vez que muerde el lóbulo de mi oreja y sus besos trazan caricias por todo mi cuello-. Siénteme - una de sus manos toma la mía y la coloca dentro de su pantalón, sintiendo su miembro-. Siente como me vuelves de tan solo tenerte cerca, siente como quisiera poseerte y sentirte una y otra vez mía de nuevo.

- Dimitri – susurro en prácticamente un gemido-. Quiero que lo hagas, hazlo – susurro moviendo mis manos a través de su erección, lo que provoca que duela mi zona intima, quiero que me haga el amor, que este dentro de mí, sentirlo de nuevo.

Sus labios me devoran ferozmente la boca, quita mi vestido y lo arroja a un lado, sus dedos se deshacen de mi sostén y con una de sus manos acaricia uno de mis senos. Me arqueo, los tengo tan sensibles, que su roce me produce escalofríos.

- Lucen un poco más grandes de lo habitual y eso me encanta – una sonrisa se dibuja en sus labios, los junta a mi pezón y comienza a succionar. Oh Dios, voy a perder el control de nuevo. Mis piernas se enrollan en su cintura y lo jalan hasta mí-. Hazlo por favor – vuelvo a hablar.

Se quita su camisa y deja al descubierto su cuerpo, mis manos lo acarician, lo sienten tan duros como si fuera un piso de mármol, abdominales perfectamente diseñados, diseñados para deleitarme de tan solo mirarlos. Baja sus pantalones junto con su ropa interior, dejándolos a un punto medio. Su miembro es bastante generoso, me recuesto de nuevo en el sofá entrelazando mis manos con las de él. Vuelve a posesionarse manteniendo su pecho elevado sin rozar mi vientre.

- No quiero aprisionarte, lastimaría a los bebés – sonrío, piensa en ellos, piensa en nuestros hijos. Me besa lentamente en la boca y se hunde de un solo movimiento en mi interior, el estar tan húmeda le permite más acceso dentro de mí.

- Ah – gimo cuando siento un poco más fuerte su movimiento, tiemblo en sus brazos como sui fuera la primera vez que tenemos sexo.

- ¿Por qué te colocas nerviosa? – susurra cuando me siente temblar.

- Tú me desestabilizas – sonrió-. Eres indescriptible en la cama.

- ¿Acaso soy intimidante? – dice levantando una ceja y siguiéndose moviendo.

- Eres perfecto – respondo en un susurro.

Movimientos lentos, pausados, mi cuerpo experimenta sensaciones que no haba sentido antes, no sé si sea producto del embarazo, pero me encanta la forma en que maneja las posiciones, hace que me siente encima de él mientras me estimula, me muevo a través de su miembro, lo escucho decir algunas obscenidades mientras me aumento solo un poco más rápido el ritmo entre los dos. Sus labios se detienen en mi vientre y lo besa.

- ¿Sabes que los amo? Aún no los conozco y ya los quiero conmigo - sonrió con ello es tan perfecto, es tan él que no se que haría sin mi esposo, es mi complemento y mi felicidad.

Nos detenemos mientras me abraza y me ayuda a levantarme pata colocarme el vestido.

- Ojala todas las cenas terminarán así.