Capítulo 34:

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Marqué una vez más el número de Niall mientras iba al volante. Y como de costumbre, saltaba el contestador.

Suspiré y presioné el botón para dejarle un mensaje.

-Niall- dije luego de que sonara el contestador nuevamente. ¿Porqué no me respondes? Necesito hablar contigo hace una semana- suspiré y estacioné mi pequeño auto frente a la cafeteria donde trabajo- Te quiero, ¿si? Llámame cuando puedas.

Me bajé del auto frustrada. La última vez que hablé con Niall fue en aquella videollamada donde se lo vió muy raro. Desde entonces me corta las llamadas y no me responde los mensajes. No se que demonios sucede.

-¡Kurt!- exclamé simpática cuando entré por la puerta de la cafetería- ¡Has vuelto!

Él me sonrió desde el mostrador mostrando toda su hilera de dientes.

-Gracias por cubrirme Thea- se apoyó en la barra y le entregó el café a una chica- Cuando necesites algo no dudes en pedirme.

-¿Como has andado?- dije dando vuelta por la barra y dejando mi mochila atrás del mostrador- ¿A donde viajaste?

-Fui a Argentina, a visitar a mi familia- dijo sonriente y con una chispa en sus ojos- Luego recorrí un poco de Brasil.

-¡Oh, que hermoso!- dije sentándome en la caja ya que eso era lo que me tocaba ahora.

-Es bellísimo- dijo suspirando- Estoy ahorrando para poder irme a vivir allá- me contó y yo le sonreí- No sabes lo mágico que es Thea, la gente es tan... feliz.

-¿Tú padre vive allá?- pregunté curiosa mientras le cobraba el café a un señor.

-Sí, así es- dijo él y le sonrió a una chica- ¿Y tú cómo estás? Oí que One Direction se fue de gira.

-Sí, así es- dije suspirando y jugando con la etiqueta de un vaso- Los echo mucho de menos, ya casi dos meses.

El asintió comprensivo.

Seguimos charlando mucho tiempo más. Adoraba a Kurt, había sido mi novio a los once años y había sido genial. Pero ya sabes, éramos niños así que no quedó ningún resentimiento por parte de los dos.

Miré mi teléfono y lo prendí con la esperanza de tener algún mensaje de Niall.

No me dí cuenta de que Kurt me estaba observando con nerviosismo.

-¿Que sucede?- fruncí el ceño hacia él con confusión.

-No, nada- dijo el rápido y comenzó a hacer un café de una manera muy extraña- Hace demasiado calor, ¿no crees que hace calor?- le preguntó a la chica cuyo café estaba preparando. La chica lo miró raro.- ¿Podrías ir a apagar la calefacción a la parte de atrás?

-Kurt- dije sería- ¿Que sucede?

Él, sin querer, miró de reojo él televisor plano que se lucia aun costado. Es así cuando me dí cuenta de la noticia que estaban pasando.

"Niall Horan ha sido visto salir de la mano de una chica en un hotel de Nueva York."

Mostraban imágenes de Niall, mi Niall, saliendo de un hotel y cubriéndole la cara a una chica de cabello rubio para que no fuera vista por los paparazzis. Se lo veía riendo, feliz. En la segunda imagen, se veía a el abrazando a la chica de manera muy cariñosa. Demasiado. Me cubrí la boca con la mano y de ella salió una exclamación.

Mi corazón comenzó a latir rápidamente. Y estoy segura que también se partió en mil pedazos.

"Lo que nos preguntamos ahora es, ¿que sucedió con Thea Welsey, con quien creíamos que el rubio seguía en una relación? No lo sabemos. Lo que sí sabemos es que esta rubia misteriosa ha captado el corazón del artista y estamos ansiosos por saber quién es. Muy pronto regresaremos con más información"

La noticia terminó y yo seguía observando el televisor esperando que saliera Niall de algún lado con cámaras y dijera "Caiste en mi broma Thea, nunca te dejaría. Te amo."

-Thea- Kurt quiso sonar delicado y cuidadoso conmigo, pero yo ya estaba a punto de explotar.- Thea, tranquila, seguro todo es un malentendido.

-¿Puedo irme y tú me cubres?- dije rápidamente de un salto y el asintió confundido.

Tomé mi mochila con un nudo en la garganta y salí dando un portazo del lugar.

¿Que? ¿Niall estaba con alguien más? ¿Porqué? ¿Por eso no responde mis llamadas? ¿Ya me ha olvidado?

Mis ojos se llenaron de lágrimas. Comencé a caminar rápidamente en busca de mi auto.

-¡Señorita Welsey!- Bruno, el guardaespaldas que los chicos habían contratado para mí, comenzó a caminar hacia mí cuando se dió cuenta de que había salido.-¡Espere, la llevo!

-No, está bien Bruno- dije negando con la cabeza sin mirarlo- Necesito estar sola porfavor.

¿Con que necesidad, Niall? ¿Porque ahora? Si tan solo estaba harto de mí, me hubiera dicho. El dolor hubiera sido menor. Esto es humillante.
Me limpié lágrimas de rabia mientras seguía pensando y caminando por la gran ciudad. Había sido todo mentira. Todo. Tal vez lo hizo solo por lástima. O porque Harry le pidió. Tal vez sólo quiso jugar conmigo, y realmente nunca me quiso.

Estaba demasiado triste y demasiado frustrada, para darme cuenta de que estaba parada en medio de la calle.

-¡THEA, CUIDADO!- mi guardaespaldas me tiró hacia atrás desde mi mochila y una camioneta pasó por el lugar donde exactamente estaba yo hace un segundo. Caí en el asfalto duro y me raspé la mejilla y el codo. Con la cara empapada en lágrimas, por el dolor y la vergüenza, me levanté con la ayuda de Bruno-¿Está usted bien?

Toda la gente me miraba raro, y algunos me filmaban. Que momento horrible.

-Estoy bien- dije en un susurro y tocándome el raspón que me había hecho en la mejilla.- Solo quiero ir a casa.

Fui acompañada por Bruno hasta la puerta de la gran casa, que ahora la sentía más sola y triste que nunca. Rose había ido con Leo a ver a su madre, por lo que no había nadie.

Estuve media hora llorando en el sillón, de la bronca y la angustia. Media hora después, Rose entró por la puerta toda abrigada y se plantó enfrente mío con una cara triste.

-Oh, cielo, lo lamento- dijo ella y se sentó a mi lado. La abracé y me limpié las lágrimas con un nudo en la garganta.- Vine lo más rápido que pude.

Abrí la boca para decir algo pero luego la cerré ya que no me salía nada por mi garganta.

Ella me abrazó y me miró. Vio el raspón en mi mejilla, pero decidió no preguntar nada.

Me sorbí la nariz y quité el cabello que había caído sobre mi cara.

-Es que no entiendo, Rose- dije con la voz temblorosa- Parecíamos estar bien. Él parecía preocupado por mí y quería llevarme a la gira. Tal vez por eso fue. Quizá al no ir con él se buscó otra chica con la que entretenerse.

-No, Thea, seguro es un malentendido- dijo ella frunciendo los labios- Niall es un gran chico, y no parece muy de él hacer eso.

-¡Viste las fotos Rose!- exclamé dolida- La estaba abrazando, la protegía de los paparazzis- solté un pequeño suspiro- Al igual que lo hacía conmigo.

Ella apretó los labios y asintió. Estallé en llanto de nuevo y sentía que nada podía consolarme. Me sentía vacía, usada, de nuevo.

Ya lo superarás y seguirás adelante, eres muy buena en eso.

Sentí un malestar en el estómago y pecho, y supuse que podía ser la ansiedad del momento. Pero inmediatamente me levanté y corrí al baño que daba de cara a la sala. Vomité todo lo que pude y tenía adentro, pero no por elección propia.

Rose me miró con los ojos bien abiertos.

-¿Estas embarazada?- preguntó ella cuidando sus palabras.

-¿Que? ¡Claro que no!- dije obvia mientras me enjuagaba la boca- Son los nervios de esta situación de mierda.

-Eso espero- dijo ella cruzándose de brazos.

-No estoy embarazada Rose, tranquila- dije yo caminando de nuevo hacia el sillón y abrazándome a mi misma.

Dios me salve.

***

Let Me Fix You (n.h)Where stories live. Discover now