Let Me Fix You (n.h)

Capítulo 50:

-No hagas fuerza, Thea- dijo Niall reprochándome mientras yo arrastraba el nuevo armario de la habitación de la bebé.

-Estoy embarazada, no inválida Niall- dije empujando el armario con fuerzas.

-Pero te harás daño- el me empujo con delicadeza para un costado y acomodo en dos segundos el armario que yo hace varios segundos trataba de acomodar.

Miré con orgullo la habitación de la pequeña. Estaba toda pintada de rosa. Tenía una cuña blanca en el centro, un armario lleno de juguetes y peluches, regalos de las fans, su armario de ropa. Ya teníamos su coche y el bolso ya está armado, lleno de pañales, ropa y biberones. Habíamos tardado demasiado en armarla ya que no nos decidíamos por los muebles, ambos tenemos gustos muy distintos.

-¿No deberíamos elegir ya el nombre?- preguntó Niall apoyándose de costado en la pared y mirándome cansado- Falta un mes para que nazca.

Dios, el tiempo había pasado demasiado rápido.

Faltaba cada vez menos para que naciera mi bebé. Y yo cada vez me parezco más a una ballena. Me duele todo el día la espalda, se me hinchan los pies y la bebé patea a cada rato. Eso resume mi mal humor y mis cambios de ánimo constantes. No sé cómo Niall me soporta.

-Puede ser, sí- me encogí de hombros yo y comencé a caminar como podía hacia nuestra habitación que estaba al frente.

Comencé a ordenar nuestra ropa con ansias. No sé porqué. Las ganas de hacer cosas me atacaban de nuevo. Estaba acelerada.

-Oye, mi mamá quiere conocerte- me di la vuelta con el ceño fruncido y miré a Niall que estaba parado a metros míos, comiéndose sus uñas.

-¿Cuando?- pregunté emocionada, pero al mismo tiempo no. Ya les dije, bipolaridad.

-Quiere que vayamos ahora a Irlanda, y quiere organizarte el Baby Shower- dijo él avergonzado y yo abrí los ojos sorprendida y con emoción. Siempre quise un Baby Shower.

-¿Y por qué te avergüenzas?- pregunté acercándome a él. Él rodeó sus brazos por mis caderas y me miró a los ojos.

-Es que mi madre tiende a ser un poco...- pensó el término- Intensa, por así decirlo.

-Sería genial conocer a tu madre antes de que la bebé nazca- asentí- Aunque no sé si puedo viajar en avión con esta panza.

-Sí, en realidad, mi madre ya sacó los vuelos sin mi permiso- murmuró el con nueva vergüenza- Ya te dije, es intensa.

Reí y le dí un fugaz beso en los labios.

-¿Cuando nos vamos?- pregunté yo asintiendo.

-Mañana- avisó él.

-No siquiera puedo mirarme los pies, ¿te das cuenta de que no podré armar las maletas?- apreté los labios y le sonreí divertida.

-Las armaré yo ahora mismo- el se encogió de hombros con desinterés.

Coloqué ambas manos en los costados de su cuello y lo besé con cariño. Él me respondió el beso y acarició mi cabello. Mordí su labio inferior y sonreí al oír el gruñido que salió de los labios de Niall.

-No juegues conmigo, Thea- dijo el con la voz ronca y yo solté una pequeña risita. Él acarició mis labios y luego volvió su vista a mis ojos- Eres jodidamente hermosa.

Sonreí con los labios cerrados y cerré los ojos cuando lo abracé. Pasamos varios segundos así.

-Quiero Oreos- murmuré aún con los ojos cerrados. Niall frunció el ceño.