SECUESTRADAS

HÉROE FAVORITO

Jack solo se empezó a reír entre dientes, de la nada me contagio su risa, ¿De qué nos reíamos?

- Hay Dios, Jesús, María, José- dijo mientras se reía.

-y el Espíritu Santo- le conteste solo para incrementar su risa.

-Mira, mañana van a salir los tres para ver si consiguen algún trabajo, saldrán toda la mañana, así que tú y yo limpiaremos todo como quieres, bebe- él era y es maravilloso. Nos quedamos mirando, poco a poco nos fuimos acercando cuando...

Un grito resonó en toda la casa y un chico más o menos de pelo marrón con una que otra trencita por ahí, apareció.

- Jack, la hija de puta esca..., un momento, ¿qué carajos pasa aquí?- Jack voltio la cabeza en dirección a la puerta porque estaba de espaldas a esta, luego de unos segundos, llegaron otros dos chicos, uno pelirrubio y el otro castaño claro.

- Jack las nuestras también se es...- empezaron a decir los dos al mismo tiempo pero se callaron al vernos. Uno de ellos saco una pistola, fue el castaño.

- Jack, apártate - lo dijo con tono de orden. Jack se paró rápido al igual que yo, él se paró enfrente de mí en forma de protección.

- Detente, guarda eso- dijo Jack pasando a un tono serio.

Justo en ese momento de los conductos de ventilación del techo callo la rejilla y de ahí salió Mérida, Ana y Punzi.

-Elsa, vamos...- Mer tampoco término su oración pues vio a los chicos.

- Oh, miren, la pelirroja apareció por arte de magia- dijo el castaño de trenzas, el castaño ahora apunto a Mérida, yo me puse en medio rápidamente.

-No la toques- dije mirándolo amenazadoramente.

-Una vida menos no es nada- dijo el pelirrubio.

-¡¡¡no!!!- grito mi mejor amigo, he intento interponerse otra vez pero el rubio lo cogió por los brazos, aunque el forcejeaba no podía liberarse- ¡vete Elsa! ¡¡VETE!!-

- Ella no se va- dijo el de trenzas, se me acerco para retarme pero yo solo caí fácil una vez, eso no volvería a pasar, como las chicas estaban petrificadas, me moví cuando el tipo intento noquearme, lo cogí por la muñeca se la voltee, doblándolo, le di una patada en la entre pierna y lo empuje haciendo que callera sobre el castaño, él tipo soltó la pistola y luego la cogí, se la tire a Mérida, y me encargué del que agarraba a Jack, los tres chicos estaban en el piso, bueno cuatro, porque Jack estaba de rodillas en el piso, voltee para ver a las chicas y ellas sonrieron, pero Mérida le apunto a Jack.

-wow, párale al tren Mer- me puse entre ellos- a él no lo toques-

-Elsa, apártate- dijo mirándome.

-Mérida suelta eso, ahora- negó con la cabeza- lo siento- le di un golpe en el estómago haciendo que suelte la pistola, la cual cogí, ayude a mi peliblanco a levantarse y le di el arma- ¿estás bien?- él solo me sonrió y asintió con la cabeza.

Las chicas estaban reunidas alrededor de mer, la cual se retorcía en el piso de dolor, me acerque y las chicas retrocedieron, Jack también vio a sus amigos tirados retorciéndose en el piso.

- Mer, ¿estás bien?- me acerque pero ella se paró sosteniéndose de la cama.

- No me toques- intento separarse pero se calló, yo la cogí justo a tiempo antes de que se chocara contra el piso.

- Deja el maldito orgullo- la cogí y la senté en la cama, voltee a ver a Jack, quien estaba agachado a lado del pelirrubio- están bien tus amigos- pregunte mirándolos, el solo se levantó y le dio una suave patada produciéndole un mueca de dolor.

- No, pero se lo merecen por intentar atacarte- yo solo sonreí.