ACUÉRDATE DE MI

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Simplemente me acerque, la abrase y contuve las lágrimas de alegría.

-Gracias por ese día, lo siento por lo que te hice y dije, no te mereces estar aquí. Estas por razones egoístas en las que no tienes que ver-

-Ahora estoy incluida, porque simplemente no me cuentas, entre los dos podemos buscar una solución-

Raramente senté satisfacción cuando me dijo eso, fue único me sentí otra vez querido.

Empecé a contarle como había entrado a las deudas y junto con mis amigos buscábamos soluciones, como apareció el hombre rico que nos ofreció pagarnos todo y como ahora le debíamos a él un millón de dólares contando intereses.

-Que feo, pero para eso secuestran chicas, no es justo-

-Nada es justo en esta vida-

NARRA FLIN

Entre a mi habitación con mi presa, perdón, amiga. Ella volvió a agarrar la sartén que se había quedado en el piso.

-¿Va enserio?, ¿ni siquiera puedes dejar que me cambie?- dije sacando ropa limpia de mi armario.

-Vas a contarme porque estoy aquí y no me podrás callar amarrándome o poniéndome cinta aislante en la boca- dijo con autosuficiencia.

"Si pudiera, lo haría. Pero reto es reto" pensé pero sin decirlo.

Entre al baño a cambiarme con un polo gris, un jean y unas zapatillas blancas, cuando salí ella tenía una carita de sorpresa que la hiso ver muy linda.

-Flin Ridder- fue lo que dijo y a mí se me congelo hasta el alma, no había nada en mi cuarto que apuntara como me llamo y de la nada ella lo soltó.

-¿Cómo sabes mi nombre?-

Me contó una anécdota, de cuando estábamos en primaria y nos pegaron y una rubia y una pelirroja nos defendieron, ella era la que me ayudo a pararme me sentí mal al verla con su carita pidiendo a grito que le explicara porque le había hecho eso y me pareció justo, me salvo una vez y yo a cambio crecí y la secuestre.

Me senté a su lado y le explique lo de la deuda y como llegaos a ella y de la nada entramos a confesiones, ella me conto que su ex madre era mala y luego se enteró que la había robado de la casa donde era sirvienta para no trabajar y que sus padres verdaderos les pagaran todos sus gastos, a cambio no le haría nada a ella. Un día se le dio por escapar y fue donde sus padres originales y metieron a la que la había cuidado por años a la cárcel.

Yo le conté que mis padres murieron cuando yo tenía tres y desde ahí había ido a muchas casas hogares.

Hablar con ella se sentía muy bien.

SECUESTRADASTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang