Deseo Italiano

CAPITULO 19

cancion: sober - deimi lovato

Todo se nubla a mi alrededor, las imágenes se trasmiten tan lento, me siento mareada, escucho otro disparo pero no se quien lo ha hecho. Giorgio me sube al auto, aun puedo verlo, esta tan distante, tan fuera de sí, es como si no supiera en qué lugar se encuentra-

- ¿Señor Bonatti está loco acaso? – puedo escuchar la voz de Massimo desde lejos-. Si no hubiese llegado usted estaría.

- Muerto – termina la oración-. ¿Y qué importaría?

- Debe volver en sí, reaccione.

- Llévanos a un hospital - es lo únicoque se limita a decir.

- Usted ira atrás con la señorita Williams.

- Aless, te vas a colocar bien ¿Me escuchas?

Asiento levemente con la cabeza.

- ¿Porque demonios fuiste?

- Porque no iba a dejarte solo – susurro-. No más separados.

- Aless..

Mis ojos empiezan a cansar, todo se vuelve tan oscuro, tan profundo como si me estuviera hundiendo en un pozo del que no pudiera salir.

Cuando mueres, los mejores momentos de tu vida pasan a través de ti, cada uno de ellos se transforman en uno solo, si yo estaba muerta, eso no estaba sucediendo, porque no veía nada, estaba en una oscura esquina sin luz, sin nada que me mostrara, o que me guiara de vuelta. Me sentía sola, me sentía perdida y asustada.

Recuerdo que toda mi vida he vivido dependiendo de lo que digan los demás, de lo que había dicho Lorenzo, de lo que el recomendara fuera mejor para mí, nunca me dejo elegir lo que yo quería, siempre tomo decisiones que no le pertenecían, cundo quise alejarme de eso, cuando elegí mi propio camino, se interpuso en medio de ello, sus mentiras me afectaron, al igual que sus acciones, intento romper lo que Giorgio y yo habíamos creado.

Y me sentía tan débil de no hacer nada al respecto de no luchar por lo que en verdad me generaba felicidad, no me había arriesgado, pero lo hice, al final lo había hecho, había corrido en busca de salvar lo único bueno que se había mantenido a mi lado a pesar de todo, me había arriesgado por la persona que amaba, y si moría, me iría feliz.

Y en ese instante esa esquina se lleno de luz, se ilumino mostrándome el camino que debía tomar, no lo pensé dos veces para empezar a acercarme y recorrerlo.

Entonces el sonido de su voz e hace presente, está leyendo. Lo puedo escuchar.

- "No se debe nunca escuchar a las flores. Solo se las debe contemplar y oler. La mía perfumaba mi planeta, pero yo no era capaz de alegrarme de ello" – reconozco ese frase es del principito-. Aless vuelve a mí, me has hecho ver lo que es amar a una persona, pero no puedo hacerlo solo, yo.. te necesito.

- Giorgio.. – susurro y abro mis ojos, y lo veo está allí, con unas horribles ojeras, su cabello que generalmente está perfectamente acomodado luce desordenado, y sus ojos azules claros reflejan un brillo en especial.

- Tu eres todo lo que yo necesito – me abraza y hunde su rostro en mi pecho. El hombre fuerte que he deosmtrado ser, se desmorona, se rompe y refleja otra faceta de él. Una que se me es difícil de ver, porque luce tan mal, tan triste-. Te quise alejar de esto y temrinaron lasimandote de igual manera.

- Yo me arriesgue por ti, por salvarte.

- No debiste, no debiste ni siquiera considerar esa opción.

- Escuche a mi corazón, y este me dijo que me lanzara al vacio sin importar el golpe que fuera a recibir – le sonrio.

- Jamas me había paralizado ante una situación como esas, estaba parado allí como un idiota.