🌼 25 🍦

14.3K 1K 58
                                    

Alrededor de las siete de la tarde, aunque la mayoría de los demás habían salido del agua, Tiziano disfrutaba de la piscina junto con sus sobrinos

Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.

Alrededor de las siete de la tarde, aunque la mayoría de los demás habían salido del agua, Tiziano disfrutaba de la piscina junto con sus sobrinos. Mientras que el resto de la familia, ya había planeado ir a cenar fuera.

―¡Niños salgan de la piscina! ¡Apróntense a ducharse que iremos a cenar fuera! ―les gritó su madre y ambos le obedecieron.

―¡Enseguida vamos mamá! ―gritó uno de ellos.

Ambos niños entraron a la casa y fueron directo hacia la habitación de sus padres.

Tiziano salió del agua y se secó con una toalla grande el cabello, el rostro y parte del torso. Su padre había quedado sentado en el patio y bebiendo limonada.

―¿Irán a cenar afuera ustedes también? ―le preguntó su hijo.

―Esa es la idea. ¿Por qué no le dices a Génesis también? ―le cuestionó su padre.

―Se lo preguntaré.

Cuando el hombre entró también junto con su padre, este primero se quedó desconcertado mientras caminaba por el pasillo hacia la recámara de la muchacha para preguntarle lo que le había dicho su padre.

¿Era su impresión o todos creían que estaba saliendo con Génesis o que tenían algo entre ellos? Cuán equivocados estaban si pensaban eso ―reflexionó Tiziano.

Golpeó a la puerta y ella preguntó quién era antes de abrir. Apenas escuchó el nombre, abrió.

―¿Necesitas algo? ―preguntó con intriga.

―Vamos a salir a cenar.

―De acuerdo, vayan tranquilos, me quedaré con el niño, ¿o quieres llevarlo? ―contestó.

―El vamos fue para decirte que tú también irás con nosotros.

―Mejor no, es una salida en familia, quizá en otra ocasión ―le expresó intentando evadirlo.

―No te dejaré sola aquí.

―¿Por qué no? ¿Hay peligro? ―le inquirió con dudas.

―Para nada, pero no te quedarás sola, así que será mejor que vistas al niño y te vistas tú también. En una hora y media te quiero en la sala.

Aunque Génesis quiso contestarle lo contrario, era preferible no hacerlo porque si se volvía a negar y terminaba no yendo con los demás, Brunella iba a sospechar que en verdad gustaba de Tiziano y no quería que ella confirmara la evidencia.

―Está bien, iré con ustedes y gracias.

―Nos vemos luego.

Ambos se respondieron con palabras algo tajantes y él cuando se encaminó hacia su cuarto, ella cerró la puerta.

Primero baño al bebé con cuidado y mucho cariño y lo envolvió en su bata de toalla de ositos, salieron del baño para acostarlo sobre la cama y secarlo con lentitud. Cuando lo dejó desnudo en el medio de la cama, ella mientras lo vigilaba le elegía ropa para aquella noche. El niño comenzó a gatear por la cama y la joven quedó tan sorprendida que lo levantó en brazos y le dio muchos besos de lo contenta que se sentía al presenciar aquello nuevo de él. Teniéndolo así, fue seleccionando la ropa del bebé de a poco y la dejó sobre el colchón. Fue el turno de Brunella en golpear la puerta para luego entrar al cuarto.

De Margaritas y Un Amor italiano ©Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu