- ESCALERA AL CIELO -

C48: Ya nada es como antes

Narrando escritora

— ¡Valentina! — su padre estaba muy molesto — ¿Se puede saber dónde diablos estabas? — la rubia solo agacha la mirada — por lo menos debiste haber llamado. ¡Ni te imaginas lo preocupados que estábamos!

— Lo siento papá — se disculpa.

— Rafael — interviene Sharon — seguro que tuvo sus razones para no llamar. Valu se debe sentir decepcionada, debemos entenderla.

Valentina mira por breves segundos a su madrastra, quién fingía preocupación. Evita responderle y camina hacia las escaleras pero ahí se encuentra con Karol, quién por cierto se interpone en su camino.

— ¿De dónde vienes Valentina?

Cuestiona con rapidez. La ojiazul solo la ignora y decide continuar su camino.

— ¿¡Estuviste con Michael, verdad!? — empieza a gritar — ¿Dime que estuvieron hablando? ¿Qué fué lo que hicieron después de que me haya dejado ahí sola en la fiesta, cuando se suponía que estábamos celebrando por nuestro compromiso? — sonríe con malicia — porque sí, te lo aclaro y te lo digo con todas sus letras — la enfrenta — Michael se comprometió CONMIGO, me dió el anillo a MÍ, soy YO la novia de Michael, soy YO quién se va a casar con él. ¡Así que déjalo en paz de una buena vez! ¡No tienes opción, él me escogió a MÍ! ¡Acéptalo y supéralo!

Valentina la vuelve a ignorar e intenta subir las escaleras pero su hermanastra la toma de uno de sus brazos y la hace girar para así mirarla con mucho odio.

— ¡Aléjate de nosotros, déjanos ser felices, tu oportunidad se acabó, él ya te olvidó! ¿Tienes idea de cuánto he esperado para el día de mi compromiso? ¿¡Tienes la mínima idea!? ¡El día en que me comprometería con él, debía ser maravilloso pero tú lo arruinaste todo! ¡Claro! ¡Aún no lo has podido olvidar, lo que quieres es casarte con él!

Valentina hace un movimiento brusco para que ella soltara su brazo.

— ¡Así es! — decide enfrentarla — amo a Michael desde que tengo memoria e inclusive más que a mi vida. Es el amor de mi vida y quisiera estar a su lado por toda mi vida pero eso ya no tiene importancia. Tú te has comprometido con él, no yo. El trato está hecho.

— ¿¡Y de qué me sirve!? — sus ojos verdes se comienzan a llenar de lágrimas — ¿¡De qué me sirve tenerlo conmigo, si no soy el amor de su vida!? ¿¡De qué me sirve tener a un hombre que le hace falta el corazón porque tú se lo robaste!? ¿¡Dime de qué me sirve!?

— Así es, su corazón es mío. Es algo que jamás podrás quitármelo. ¡Entendiste!

La hace a un lado y quiere subir a su habitación pero nuevamente la castaña la detiene pero esta vez, toma una de sus manos y comienza a buscar, algo peculiar.

— ¿¡Dónde está!?

— ¡Sueltame! — intenta safarse del agarre.

— ¿¡Dónde está la sortija!? Yo sé que él te la dio. ¿¡Dónde la tienes!?

— ¡Te digo que me sueltes!

Ambas mujeres discutían en la escalera. De tanto forcejear, Valentina empuja bruscamente, que hace caer a su rival. La vuelve a ignorar pero de nuevo Karol insiste y esta vez se aferra a las piernas de la rubia.

— ¡Te lo suplico! — su voz se comienza a quebrar — ¡Lo amo Valentina! Amo a Michael...porfavor no me lo quites. Te lo digo enserio, no es ningún juego. Porfavor...

— Karol — Sharon se comienza avergonzar, al ver como su hija suplicaba de rodillas — porfavor basta.

— Porfavor Valentina, te lo ruego. No me quites a Michael, te lo digo con el corazón...