Best friends (Camren G!P)

Capitulo 2

El mismo día por la tarde Lauren estaba esperando a su amiga Normani en el centro comercial, a quien no esperaba ver era a Austin y a Camila. Estaban abrazados y besándose sentados en una banca, al ver aquello, se lleno de rabia y de celos, si bien no eran nada, quería mucho a su mejor amiga. A lo lejos pudo ver que Austin se acercó a él oído de la morena y le dijo algo, Camila lo miro con cara de asco y se separo de él, estaba por salir de ahí cuando el chico la tomo  fuertemente del brazo y ella intentaba por todos los medios zafarse del fuerte agarre que su novio ejercía en su brazo.

Al ver lo que estaba pasando, Lauren fue a ayudarla sin dudarlo.

–Me haces daño –Camila tenía los ojos llorosos.

–Tú tienes que ser mía a como dé lugar –Austin la sujeto mas fuerte.

–Austin, déjala en paz –la chica de ojos verdes lo miro furiosa.

–No te metas, Jauregui, el problema es entre Camila y yo, vete antes de que se me olvide que eres una chica –le advirtió como si pudiera hacer algo en contra suyo.

–Si tienes algún problema con Camila no es la manera de resolverlo –lo empujo por los hombros–, ¿tus padres no te enseñaron a respetar a las mujeres?

–Te dije que no te metas, Jauregui–la miro completamente furioso y a punto de lanzar el primer golpe.

–Y yo te dije que si querías lastimar a Camila te las verías conmigo primero –Lauren prácticamente lo estaba matando con la mirada, cosa a la que Austin no le estaba dando mucha importancia.

Desde el principio de esa relación la ojiverde le había dicho al muchacho que si quería seguir vivo más le valía nunca hacer llorar a su amiga, el no le creyó, pensó que Lauren era igual que todos los amigos de sus ex novias, siempre lo amenazaban pero nunca cumplían, con ella se equivoco demasiado, porque ella haría cualquier cosa para proteger a Camila.

Austin ya estaba harto y muy molesto así que tomo a la ojiverde por la cintura y la tiro al piso, como él estaba encima de ella, comenzó a golpearle el rostro a puño cerrado, Camila se soltó a llorar al ver aquello y empezó a gritar para pedir ayuda, por que sabía que si intentaba intervenir lo más probable era que también le dieran un golpe, llamó la atención de algunas personas, Lauren se giró y dejó a Austin debajo de ella, el primer golpe fue a parar a su nariz, el siguiente a su ojo izquierdo y los siguientes a todo el rostro del chico.

Unos brazos tomaron a Lauren por la cintura y la jalaron, pero antes de alejarse del todo le pego una patada en las costillas, haciendo que se quedara sin aire, los brazos la rodearon de nuevo, en esa ocasión ejerciendo más fuerza para inmovilizarla.

–Ya, Laur, tranquila –Dinah le susurro en el oído mientras Normani abrazaba a Camila de forma protectora.

Por otra parte, un vigilante ayudaba a Austin, al ponerse de pie lo que hizo fue insultar a Lauren.

– ¡Eres una maldita hija de puta! ¡Te voy a denunciar!¡Esto no se va a quedar así, Jauregui! –el no dejaba de gritar.

–Tú te vuelves a acercar a Camila y yo te mato a golpes, sabes muy bien que no estoy jugando.

El guardia sacó a Austin del lugar y todas fueron al departamento de Lauren, al llegar Normani y Dinah se marcharon ya que tenían unas cosas que hacer, así que dejaron a solas a las chicas y Camila aprovecho para hablar mientras curaba el pequeño corte en la ceja de su amiga.

–No debiste hacerlo –la riño

– ¿Querías que me quedara de brazos cruzados viendo cómo te lastimaba? –Lauren espeto molesta–. ¿Ahora eres masoquista? –le reprocho

–No, pero si no hubieras hecho nada, tu rostro seguiría igual de lindo que siempre –murmuro desinfectando la herida.

–Entiende, no podía ver cómo te lastimaba, te quiero y si se meten contigo, se meten conmigo –le ofreció una pequeña sonrisa.

–Yo también te quiero –beso su frente con ternura–. Sera mejor que me vaya, seguro llega tu novia en cualquier momento.

–No me importa, solo quiero estar contigo –murmuro mientras la sentaba en sus piernas.

–También quiero estar contigo –beso sus labios.

El beso se fue tornando un poco lujurioso y de un momento a otro, Camila ya sentía el gran bulto bajo los vaqueros de la ojiverde. Sin despegar sus labios  bajo su mano y comenzó a dejar tiernas caricias en su miembro haciendo que Lauren soltara pequeños gruñidos, se separo de golpe y miro a su mejor amiga, quien estaba roja y agitada.

–Tomaré una ducha –le dio una sonrisa picara y camino al baño.

– ¿De verdad, Camila? –reprochó incrédula.

–Claro que sí, ahora salgo –contestó mientras le lanzaba un beso y le guiñaba un ojo.

Ya estaba desnuda debajo el agua de la ducha y se sobresalto al sentir que unas manos frías la tomaban de la cintura posesivamente, así logrando pegar su espalda al pecho de Lauren, sintiendo el duro miembro erecto y los senos de su mejor amiga, soltó un suspiro al sentir que las traviesas manos recorrían su cuerpo, una se posó sobre su pezón y la otra bajó hasta su sexo.

Gimió alto cuando sintió a Lauren frotar su clítoris al mismo tiempo que pellizcaba uno de sus sensibles pezones, la ojiverde beso su cuello lentamente y succiono el punto de su pulso, haciendo que soltara un gruñido tembloroso.

–Lauren... – gimió la morena.

– ¿Qué sucede? ¿Quieres que te toque? –murmuro contra su piel.

–Oh... –gimió–, sabes que sí.

–Será como la nena quiera –mordió su lóbulo.

La giro bruscamente y la pego contra la pared buscando sus labios con desesperación, con besos húmedos bajo por su cuello y se detuvo en sus pechos que aclamaban atención desesperadamente. Con la lengua trazó círculos sobre el pequeño brote de carne que estaba rodado tanto por la excitación como por algunas mordidas que le daba, se entretuvo un buen rato en sus pechos robándole gemidos y jadeos a Camila, luego fue bajando por su vientre y se detuvo justo frente al sexo depilado y húmedo, mirando lo rosado que era y solo deseando penetrarla.

La miro estando sobre sus rodillas, Camila estaba agitada, mordiéndose los labios, con los ojos cerrados y esperando por su lengua, decidió no hacerla esperar más y sin tener algún tipo de preámbulo la penetro de la manera que tanto la volvía loca, la morena se aferró a sus cabellos gimió alto.

Siguió degustando los fluidos de su mejor amigo y mordió un poco el clítoris hinchando al mismo tiempo que acariciaba sus labios vaginales, esta acción fue suficiente para que Camila llegará al orgasmo aún debajo del agua de la ducha.

Lauren cerró la llave y llevó el tembloroso cuerpo de Camila a su cama, donde la recostó con cuidado y comenzó a dejar tiernas caricias en su cabello. Cerró los ojos y sintió cómo la morena se ponía encima de su cuerpo mientras comenzaba a besas su cuello.

– ¿Otro?

– ¿Qué crees tú? –murmuró–. Ahora quiero esto –hablo con voz seductora

–Está bien –jadeó–, hazlo ya.

Camila posicionó el miembro erecto en su entrada y de un solo movimiento bajo por completo, haciendo que ambas gimieran, se movió por toda la longitud mientras acariciaba sus pechos con una de sus manos y con la otra tocaba el torso de la ojiverde.

Lauren sintió cómo todo su cuerpo se tensó y la manera en que el orgasmo empezó a tomarla al igual que a Camila se liberó dejando todo su semen en ella y cayendo rendida de espaldas en la cama, segundos después Camila cayó sobre su cuerpo, ambas estaban cubiertas por el sudor y casi sin respiración.

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